Capitulo 12

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Me senté en la cama, cogí el mando que estaba en la mesita pequeña. Eran las 12:00 de la noche, yo ya no sabía qué hacer, que comer, como si el mundo se acabara. Empece a cambiar de canales muy rápido, el motivo es que no había nada interesante en que entretenerse. Sin darme cuenta, poso la mano en el cartón de pizza pensando que había y parece que me haya a cavado todas las porciones, lo tiro desilusionada, me cojo el móvil que me dio Theo y miro si hay mensajes, me digo a mí misma "que tonta si ya me dijo que dentro de dos días me llamara", me tumbo en la cama, mi cerebro empieza a pensar todo lo que ha pasado y se da cuenta te ha salido de todo esto; de la prostitución, de la drogas, de estar encerrada todo el día en hotel.
Respiró muy fuerte, me levanto de un salto, me duele tanto la cabeza.... "Ostias que dolor", necesito algo, mierda, mierda necesito pincharme, joder necesito drogas, me estremezco el cuerpo del dolor que me está causando; no tengo cigarro, no tengo nada....
El dolor aumenta, estoy sudando, me tiro en la cama, me quito toda la ropa.

No he dormido en toda la noche, bueno seguro que unas dos horas, me levanto, que parece que tenga una resaca bestial, aún me sigue doliendo la cabeza. Me ducho, cojo la ropa y me la pongo, cojo el dinero que me sobrado, suficiente para comprar medicamentos para la cabeza y comprar alguna cosa para desayunar.
Salgo del habitación, cierro con las llaves, enfrente del motel hay una gasolinera, entro.

ROSAS CAÍDAS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora