Sus labios eran tan cálidos, y húmedos, su esencia me vuelve loco.Cada beso que él me da, tiene un sabor que me hipnotiza, quiero seguir disfrutando de esos besos.
Esos besos sabor a miel que tanto me gustan, y que recorren por mi piel con suavidad...
Me encontraba en mi habitación, los chicos por su parte salieron a cenar, yo preferí quedarme en los dormitorios que compartíamos, estaba muy agotado, los ensayos y las practicas son más pesadas ahora por el próximo comeback.
-Tiempo después...-
Escuche que la puerta principal de la casa se cerró, probablemente eran ellos, me levanté para darles la bienvenida, pero cuando salí de mi habitación, era Leo el que había llegado y note que sus ojos estaban llorosos-
-Leo ¿vienes sólo? Pensé que estarías con los chicos.
-Ellos se quedaron un rato más, solo fuí por la cena.
-Oh,esta bien -Leo siempre tan directo en sus respuestas y esa mirada tan seria en su rostro todo el tiempo- ¿Y por qué no te quedaste?
-Estoy cansado, por eso no quería quedarme hasta tarde- comenzó a caminar a su habitación.
-¡Oye, espera! -lo seguí y le tome del brazo- ¿Qué te pasa? ¿Te encuentras bien? Sabes que puedes hablar conmigo de cualquier cosa.
-Estoy bien -quitó mi mano de su brazo, abriendo la puerta de su habitación- Me iré a dormir ya, buenas noches.
Puse mi pie para evitar que cerrará su puerta, abrí paso a su habitación, cerró la puerta y me miro con una expresión seria.
-Vamos TaekWoon -lo abrace mientras acariciaba su espalda- si necesitas desahogarte, aquí estoy para lo que necesites.
Se quedó quieto, sin corresponder el abrazo, no dijo ni una sola palabra cuando de pronto comenzó a llorar apoyando su cabeza en mi hombro, sentía como sus lágrimas tan cálidas caían en él, continúe abrazándolo mientras acariciaba su cabeza, pasando delicadamente mis dedos entre su cabello, podía sentir el calor de su cuerpo, y como iba poniendo sus manos en mi espalda para abrazarme.
-Estoy aquí Taekwonni- sentía como me abrazaba aún más fuerte y sus lágrimas se detenían poco a poco- relájate, aquí estoy contigo.
Cuando sus lágrimas se detuvieron completamente aún seguíamos abrazados, levantó su cabeza de mi hombro y me miro con sus ojos hinchados.
-HakYeon -su mirada y la mía se conectaron en ese instante, debo admitir que me puse nervioso y que a la vez me puse rojo al verle fijamente- gracias por siempre apoyarme.
-No debes agradecerme- seguíamos con las miradas fijas uno al otro, poco tiempo después me di cuenta que seguíamos abrazados- oh, bueno -me aleje un poco dándole una palmadita en su espalda- ahora descansa, mañana será un día mejor.
Sujete la perilla de la puerta para abrirla, cuando sentí como Leo se acercó detrás de mí, bloqueando el paso.
- ¿Está todo bi...-en ese momento, Leo se encontraba muy cerca de mi, sentí su respiración algo alterada, lo único que yo sentía era como yo me ponía más nervioso, su mirada fija en mis ojos, acercándose cada vez más, nuestros labios estaban a casi nada de tocarse, cerré los ojos por un instante abriendo la puerta bruscamente, corrí hacia mi habitación sin mirar atrás...
Habitación de HakYeon
Mi corazón estaba acelerado, estaba tratando de analizar la situación que hace apenas unos segundos acaba de ocurrir o bueno que casi ocurría, acaso Leo intentaba... ¿Besarme?
-Esto... No entiendo -Mi corazón seguía acelerado, no sabía cómo controlar tantas emociones que sentía en este preciso instante, quería tener respuestas, ¿Qué es esto que estoy sintiendo yo ahora?
¿Qué es lo que Leo hacia...?
Al día siguiente
Los rayos del sol entraban por la ventana, eso causó que despertará.
Tome mi celular y ví que eran las 11 de la mañana, lo bueno de todo esto es que hoy no teníamos algo agendado o ensayo.
Me levanté de la cama y me estire un poco, después de eso me di un baño, me puse algo de ropa cómoda y salí de mi habitación, me dirigí a la cocina por un vaso de agua.
Tome un vaso de la estantería cuando escuché una voz detrás mío.
-HakYeon- dijo una voz ronca y suave detrás de mi,- ¿A dónde vas?
Era Leo, al parecer apenas había despertado, recordé lo que anoche por poco casi pasa y mi corazón se empezó a acelerar.
-Pues...pensaba ir al parque un rato e ir por un poco de comida para todos-Llene mi vaso con agua, lo bebí, y me dirigí a la puerta principal.
-¡Espera! Iré contigo-me dijo mientras venía detrás mío.
-Estoy bien, regresaré en un rato así que...-en eso me interrumpió-
-Así que nada, iré contigo, espérame aquí- lo dijo de manera muy seria, lo ví como se fue corriendo a su habitación, por un demonio lo que me faltaba, y tu de obediente aquí... ¿Verdad HakYeon?
Pude aprovechar esta situación para irme, pero ¿porqué me quede entonces?
-En verdad que no tengo remedio conmigo mismo, ni siquiera yo me entiendo...-agache la cabeza, mirando fijamente al suelo- ¡¿Qué demonios pasa conmigo?!
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¡Hola! ¿Que tal están? Bueno pues este es mi primer Fanfic, no soy experta en escribir, he hecho algunas historias en el pasado, pero jamás las he publicado, no se porque, pero hoy en día he andado muy inspirada y quise hacer un Fanfic de VIXX, tenía planeado algo diferente a esto, pero Neo se me vino a la cabeza en ese momento, no les aseguro que sea larga, pero todo depende de mí inspiración, espero les guste, no soy buena con esto, pero viene de mi corazón ;<; así que aquí está el primer capítulo.
Bueno de mi parte es todo, y espero que sea de su agrado.
Atte: Ana M.
(Nota: Para todos aquellos que leyeron la historia original, sufrió algunos cambios y correcciones, espero que esta vez sea mejor.)
