Pronto tendría que salir de la ciudad, mamá me pregunto si quería ir, la verdad es que aunque le dijera que no, no me permitiría quedarme sola en casa, según me entere por mi hermano Theo se iría pronto, aunque no se ha confirmado la fecha el dice que para fines de este mes se ira, quisiera decir que me da igual pero no es así, lo quiero, y la verdad, es que cuando se marche de seguro voy a llorar, no hablo con el desde hace mucho, aveces lo veo, viene a la casa y se va con mi hermano y se encierran en su habitación, no se cuando se volvieron tan cercanos, y aunque ya no le hable, tengo una excusa para verlo, aveces voy a casa de Ally para saludar a su madre y ayudarla a distraerse, aunque ella cree que yo estoy mejorando debido a que siempre que estamos juntas sonrió, pues no es así, aunque me duela quiero que su madre se sienta mejor, que no siga llorando en el jardín mirando la casa del árbol o sosteniendo su uniforme sentada junto a las margaritas, siento que se lo debo a Ally, por dejarla y abandonar nuestra amistad por estar sufriendo por un chico.
Estaba sentada en mi recamara frente al espejo colocándome rimel, baje y vi a mi madre frente a la televisión con una sonrisa en su rostro, pase junto a ella pero simplemente me ignoro, me senté y vi que no había nada, mi madre dejo de preparar mi desayuno desde hace una semana, me levante y me fui, mi padre no se dio cuenta que salí de la casa.
Me coloque mis audífonos y simplemente comencé a caminar al instituto, al llegar fui directo a mi casillero y tome mis libros, entre a la clase y me senté junto a la ventana, no me quería retirar los audífonos, era odioso escuchar las risas y voces de los demás, la maestra llego y comenzó a dar la clase, no se en que demonios estábamos solo se que se me acerco y me retiro uno y me dijo al oído:
-Señorita Marie si no le importa la clase se puede ir.
Y eso hice, me levante y me largue, la maestra comenzó a gritar mi nombre diciendo que regresara o me mandaría con el director.
Solo comencé a caminar sin rumbo hasta que llegue a la cacha de fútbol, regrese a ver a los lados, no había nadie, así que simplemente deje caer mi cuerpo y grite lo mas fuerte que pude, cuando termine escuche una risa, vi al graderio y me di cuenta que había una chica sentada ahí, estaba con una chaqueta over-size verde, se notaba que era delgada y alta, tenia un cigarro en la boca y tenia los labios rojos y sus ojos eran azules, la verdad su maquillaje era un poco sobre cargado y se notaba que al pintarse los labios se salio un poco para que estos parecieran mas gruesos, me le acerque y le dije:
-¿Que te parece tan gracioso?
-Tu-rió- me da risa el notar lo débil que eres.
-Tu no sabes nada de mi.
-Tu tampoco sabes nada de ti misma, ni de mi, ni de nadie, estas tan concentrada en simplemente tratar de tener una vida perfecta como si fuera una comedia romántica, como si la vida fuera un libro que no te das cuenta lo patética que te ves cuando todo se derrumba a tu al rededor y no lo puedes controlar y caes en cuenta que esto es la realidad y que no se va a solucionar en el siguiente capitulo, si no reaccionas y comienzas a escribir tu historia por ti misma tal vez ni siquiera exista el próximo capitulo, así que amiga mía comienza a madurar y deja de sufrir por un chico, lo que tu sientes no es amor, es un simple capricho de niña chiquita de que yo lo quiero y si el no es mio voy a hacer un berrinche para que me lo den.
-¿Por lo menos sabes mi nombre? ¿Porque hablas cosas que no sabes? ¿Porque sacas conclusiones apresuradas?
-Ay Marie Marie Marie, te conozco mas de lo que crees, y la verdad se todo lo que paso entre tu y Theo, y para contestar tu ultima pregunta solo te diré algo, analiza todo lo que dije y dime si me equivoque y saque conclusiones apresuradas.
-¿Quien eres?
-Me llamo Andrea.
-¿De donde demonios apareciste? por que supongo que no estudias aquí.
-No, yo estoy en la universidad.
-¿Entonces que demonios haces aquí?
-Vengo a fumar, no se me permite en el campus, pero como en este lugar la seguridad es una mierda a nadie le interesa lo que haga.
-En eso tienes razón.
-¿Quieres?- dijo moviendo su cigarro de un lado a otro.
-¿Que?
-¿Que si quieres un cigarro?
-No, no fumo.
-Solo tómalo- se me acerco y coloco el cigarro en mi boca- si lo escupes te mueres- tomo el encendedor y lo prendió.
El humo inundaba mis pulmones, y aunque sabia que me hacia daño, simplemente me relajaba esa sensación, di una, dos, tres, cuatro caladas y me decía mentalmente -debo dejar esto -pero en menos de un segundo era tan adictivo que esa mañana fume la mitad de la cajetilla que tenia Andrea.
De regreso a casa me puse a pensar en lo que había hecho, me carcomía la cabeza, pero me decía una y otra vez, no lo volvería a hacer.
Al entrar a casa corrí a mi cuarto y cerre la puerta, coloque mis manos en los bolsillos de mi chaqueta y note que había algo, lo saque y vi una cajetilla nueva, tenia una nota al rededor escrita con delineador que decía:
"Solo es un pequeño regalo, disfrútalo Marie, y no te sientas culpable, después de todo no le afecta a nadie."
La tire a algún lugar al azar y caí al suelo junto a la puerta, me apoye junto a esta y cerre los ojos, de repente escuche pasos apresurados y gritos que provenían de mi madre y mi padre.
-¡Ya no puedo mas Jhon, ya no lo soporto mas, necesitamos enviarla a un centro de rehabilitación, lo que ella tiene es depresión y yo ya no puedo soportarlo mas, es una carga mas y es la causa de cada uno de nuestras peleas!
-¡Cállate ya April, es nuestra hija de la que estas hablando, ella no es una cosa de la que simplemente nos vamos a deshacer, si ella, como tu dices, esta deprimida lo que mas necesita es nuestro apoyo, date cuenta de lo que ha pasado , y tu no ayudas mucho ignorándola!
-¡Se que es nuestra hija, y por que la amo y me preocupo por ella es que te digo que debemos rehabilitarla!
-¡Te das cuenta de la tontería que estas diciendo ella no esta loca, estas exagerando la situación!
-¡Exagerando la situación! ¡Lo dices enserio! ¡Por consentirla siempre es que ahora es así!
-¡Ya April ya!
Me levante, tome la cajetilla , saque uno y lo coloque en mi boca, ahora todo estaba en si lo encendería o no, y aunque me preocupaba, al escuchar otra vez los gritos de mi madre, no lo volví a dudar y lo encendí, y en el momento en que di la primera calada de ese cigarrillo, me di cuenta de que seria difícil dejarlo.

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Quiereme como SOY
Ficção AdolescenteMarie es una chica común que según ella dice clacificarse entre las chicas normales, es un poco insegura, no tiene muchos amigos y nunca a tenido novio, y mucho menos se ah enamorado, sus amigas tratan de hacer que ella salga y conozca el mundo sin...