Capítulo 4: Los Bennett no solemos ser puntuales.

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Sábado ¡al fin! espere este dia con muchas ansias toda la bendita semana. Hoy por fin saldré con Sebastian, estoy re nerviosa para ser honesta, espero no meter la pata porque Dios estoy cansada de pasar vergüenzas. Si no me lleva a comer uff, mucho mejor porque no soy la típica chica delicada que come pura ensalada, no. Aunque el ya me ha visto comer, Dios aun siento tanta vergüenza por aquel dia.

Y que ni se le ocurra invitarme a jugar bowling porque mi sentido de la orientación es re malisimo y terminaria pegandole la bola a alguna persona, uhm si mejor no, sería una pésima idea. Y que no me lleve algún lugar que tenga que ver con música o bailar porque soy bien sorda, y definitivamente soy un desastre con dos pies izquierdos. Soy tan insípida y torpe, al contrario de Sebastian, es tan despierto, y interesante.

- Vístete casual - sugiere Nic- espera ¿Van a tener sexo? porque es así...

-¡No!- exclamó- ¿Estás loco, o que te pasa?

Observe desde mi cama a este que se encontraba sentado en la silla de la computadora, traia una libreta y un lápiz, y asintiendo tacho algo. ¿Que rayos...?

- ¿Que tienes allí?- cuestione lanzandole una almohada.

- Nada- dijo riendo.

Estoy tan nerviosa, que llame a Nic para que viniera a brindarme apoyo, pero es lo menos que hace.

- Solo espero que, no me lleve algún lugar donde sea fácil que haga el ridiculo- musite.

- Entonces no irás a ir a ningún lado nunca, porque imaginate...- Bromeó riendo aun con la libreta en la mano.

- Cada vez me convenzo mas a mi misma que tengo que buscarme un nuevo mejor amigo, porque tu ya no sirves...-

- ¡Imposible! ¡Ni lo sueñes! soy irreemplazable- se abrazó a sí mismo y se dirigió a mi armario- Solo, ponte algo sencillo por qué tampoco te dijo a donde iran, asi que si te vistes mal para tu cita a coger, pues es su culpa...

- Basta con esos comentarios Nic- dije entre risas-Además, siquiera es una cita, ni mucho menos cogeremos.

Este se quedo husmeando mi armario por un rato, cuando se giró hacia mí tenía en manos mi ropa interior de pandas- Esto explica el porque aun sigues siendo virgen- dijo antes de explotar en carcajadas.

-Dame eso-salte encima de él quitándole mi ropa interior- ¿Que tienen?, son lindas...-musité cuando ya la tenía en la mano.

-Sin comentarios-vio su teléfono-¿A qué hora viene Seb por ti?

- Seis, ¿porque?

Vi como Nic toma sus cosas y mientras camina hacia la puerta dice- Son las cinco y media, el tiempo corre...tic toc, tic toc.

¿Que? dios mío, la hora pasó volando, rayos y aun ni se que me voy a poner. ¿Que voy hacer? tome un vestido negro floreado, unas sandalias negras, y una chaqueta de mezclilla, lo puse en la cama y me fui a bañar. Cinco y cincuenta, me comienzo a vestir, que bueno que no me maquillo. Peine rápidamente mi cabello y baje a la sala, cinco con cincuenta y cinco, vaya, estoy lista en tiempo record, debería ganarme un trofeo por esto. Sebastian se ve que es un chico puntual.






Seis con quince minutos y Sebastian aun no llega, hasta ya se me seco el cabello.

- ¿A dónde vas tan linda?- Cuestiono mama.

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