capítulo 11: Mi boda

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Nueve meses después:
Me caso dentro de un día y en vez de quedarme en casa tranquila, decido ir a casa de Sam y Emily con Carlisle. Hace un mes que acabó el curso y mi familia, Cassie y yo volvimos a Forks, habiendo recogido a Alex y Sallie primero. Emily dio a luz una semana después de que llegáramos, lo cual fue una semana antes de lo previsto.
Llamamos a la puerta y Sam nos dice que entremos. Él está sentado en el sofá con sus dos hijos en brazos
-Ya les hemos puesto nombre.- dice Sam.
- Ya era hora.¿Cuáles son?- le pregunto
- Ella, Santana y él, Aki.- me contesta
- Dos nombres preciosos.- le dice Carlisle.- ¿Por qué no te hechas un rato a dormir? Nosotros cuidaremos a los bebés.
- Os lo agradezco un montón. En una hora despertad a Emily, les tocará comer para entonces.- nos contesta.
- No te preocupes.- le digo.
Sam se va a la habitación a dormir, yo cojo a Santana en el colo y Carlisle coge a Aki. Los dos son monísimos. Aunque sólo tienen tres semanas, puedo ver que van a ser muy guapos.
Al pasar una hora, despertamos a Emily y cuando acaba de darles de comer, despierta a Sam.
- Hasta mañana.- les decimos
- Hasta mañana.- nos dicen
Nos ponemos en marcha hacia nuestra casa, mañan será un día muy largo.
Celebraremos la boda a las dos en el jardín. Igual que hizo mi madre.
Alice no quería preparar las cosas sin mí así que lo fuimos haciendo los fines de semana poco a poco.
A pesar de estar en Forks, últimamente hacen días de verano, lo cual es lo propio pero no lo habitual. Alice ya había predicho que haría calor y sol pero, acostumbrados a que llueva en Forks, no la creímos.
Mi vestido es corto y tengo las cuatro cosas necesarias para mi vestimenta pero cambiando "algo prestado" por "algo heredado".
Alice y yo también elegimos el color de los vestidos de las damas de honor y los ramos que llevarán. A parte del color y de que todas llevan el mismo vestido y zapatos menos Sallie que se los ha comprado Carmen, no sé nada de ellos. No los he visto.
También sé que los invitados llegarán mañana a las 12 de la mañana, que mi madre no me deja ver a Jake y que eso me pone aún más nerviosa de lo que estoy. Pero debo irme a la cama, debo estar despierta para mañana.
4 horas y 15min. para la ceremonia:
- Ness, buenos días.- me despierta mi madre.- Son las 10 menos cuarto. Quedan 4 horas y 15min. para la boda. Hoy es tu día.
- Mmmmm. Buenos días.- le digo.- He dormido fatal con los nervios. Me desperté a la una y a las 5 para ir al baño.
- Lo sabemos. Te oímos pero no quisimos decirte nada para que no te entretuvieras y volvieras a la cama.- me contesta mi madre.- No te preocupes por los nervios. Yo también estaba nerviosa. ¿Quieres comer algo? Tienes un cuarto de hora.
- Lo intentaré.- le contesto.
- Pues vamos a la cocina. Esme te ha hecho el desayuno.
- ¿A qué hora viene Charlie?- le pregunto
- Él y Sue vendrán con Seth, Leah y Quinn a la una y media.- me contesta.- Por cierto, Alice tampoco deja que veas mi vestido y el de Rose y Esme.
- Más sorpresas.- digo a regañadientes.
Llegamos a la cocina y en la mesa hay zumo de naranja, leche y tostadas.
Sólo consigo tomar una tostada y el zumo. Después, voy al Salón donde todos me esperan para tranquilizarme. En cuanto llego a la puerta, Emmett viene y me levanta en vilo.
- Relájate, hoy es tu día. Hey, Jazz. Ayúdale.- Dice Emmett
Al momento estoy mucho más relajada.
- Gracias Jazz.- le digo
- Lo que sea por mi sobrina.- me contesta.
Emmett me pone en el suelo.
- Tranquila, cariño. Todo irá bien.- me dice Esme
- Lo sé.- le contesto
- Vamos, hay que empezar a prepararte.- me dice Alice al tiempo que me toma de la mano para llevarme al baño.
Empiezo por ducharme y lavarme el pelo, y luego Alice empieza a peinarme.
2horas para la ceremonia:
- Ya estás peinada y maquillada. Solo te falta el vestido, los zapatos y los complementos.- me dice Alice
- Gracias. De verdad.- le digo
- No hay de qué. Sabes que me encanta hacer estas cosas.- me contesta.- Estás preciosa. Ahora vendrá tu padre. Yo voy a ir a vestirme, a ayudar a tu madre, a Rose, a Esme y a peinar Sallie.
Alice se marcha y yo me pongo el vestido pero no lo abrocho porque necesito ayuda y no me pongo los zapatos porque, si no, me dolerán los pies.
Me miro al espejo. Alice es un genio. Me ha hecho un recogido bajo para luego poner el broche de mi madre que antes había sido de mi bisabuela con el velo.
El vestido es de color blanco, corto, con una sola asa, el forro liso y la capa exterior de encaje.
Empiezo a ponerme los complementos. Una pulsera de oro blanco con pequeños diamantes y unos pendientes con forma de gota también de oro blanco y con pequeños diamantes.

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