Epílogo

2.1K 166 17
                                    

Dos años después de la historia principal.

Lucy~
Levante mis brazos para estirarme, sentía mi pecho lleno de felicidad, me sentía en el lugar correcto, donde pertenecía, y ese sentimiento, es inigualable.
— No te muevas de mi lado, quedate un rato más acostada ¿Si? — dijo Natsu a mi lado, yo sonreí con ternura, y me acurruque nuevamente a su lado.
Habíamos pasado por tanto en estos dos años, cosas realmente tristes, pero las superamos juntos, Natsu supero sus problemas, en ese sentido le debemos mucho a las terapias que tuvo, esas a las que en un principio había que obligarlo a que fuera, y que después le resultaba tan natural ir, en ese momento supe, que él saldría como el gran vencedor de su pelea con el destino.
A veces pienso que de alguna manera no he tenido una suerte tan terrible, que no me ha sucedido algo realmente malo, o verdaderamente desgarradorme dijo aquella tarde de verano, rodeando mis hombros con sus grandes brazos.
Estábamos bajo uno árbol de cerezo, de esos tan grandes y maravillosos que hay en Magnolia. Natsu miraba el cielo, yo lo miraba a él, a su sonrisa sincera, esa que me encantaba, esa que me enamoraría por el resto de mis días, esa que besaría en este instante.
Me levante para estar a su altura y de manera rápida lo bese en la boca, él estaba sorprendido, porque no me correspondió en el acto, pero lo hizo y fue uno de los momentos más mágicos de toda mi vida.
Mañana hay que ir a visitar a tu tío,prometeme que te portaras bien ¿si? — dije abrazada a él. Natsu se rió ligeramente.
Haré todo lo posible, pero sabes que Gilderartz siempre me molesta y yo no puedo evitar devolvérseloyo puse los ojos en blanco.
Pero evita destruir toda la casa Natsuél se puso rojo, por la vergüenza diría yo. —

Aún así llevaré una buena tarta, para que Cana no se enoje tanto — él rió ligeramente.

No sería una mala ideadijo acariciando mi cabello, me gusta que haga eso, me dan esas cosquillas ligeras, esas que son tan agradablesYa es hora de irnos, vamos que yo haré la cenayo le sonreí y me paré en seguida, adoraba cuando él hacía la cena.

Sabes que te amo aún más cuando haces la cena, me pareces aún más sexyhice un movimiento gatuno con mis manos, y solté un “arghhque hizo que él se riera a carcajadas y me lanzará una mirada picara. — ¿Qué me prepararas hoy sexy cocinero? — él me sonrió de manera ladina, como si yo fuera un tierno gatito y él un lobo feroz.

Ya verás Lucy, ya verásme dijo, para luego tomar mi mano y correr hacia el apartamento.

Sonreí con nostalgia, ese sin duda había sido un buen día, aunque todos los días son buenas estando con él. Tenemos nuestras peleas, pero siempre las arreglamos, siempre salimos adelante.

Y de eso se trata la vida ¿no? Son altos y bajos, son días buenos y días malos, eso nos hace disfrutar de todo, conocer el dolor para disfrutar la alegría, conocer la perdida para alcanzar la gloria.

Y eso tengo yo con Natsu, el amor incondicional que viene tras haberlo perdido todo.

My Little Lucy » EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora