Shawn Deckard

8 1 0
                                    


El viento soplaba por el parque revoloteando alrededor de una figura de piel tostada y de cabello rubio que se encontraba en posición de flor de loto sobre un tapete azul, Shawn había sufrido de estrés y depresión antes pero encontró una manera espléndida de apaciguar sus emociones en el yoga, sus ejercicios de estiramiento y su filosofía era lo que necesitaba en su vida y ya llevaba unos meses haciéndolo

Se levantó para tomar una posición de árbol elevando sus manos juntas mientras llevaba un pie a su muslo inhalando profundamente cuando un sonido interrumpió el ambiente, de inmediato volteó y vio a una chica de cabello rosa pálido con un suéter verde botella manchado de rojo, corriendo como si escapara de algo y como si se tratase de un instinto, saltó de su lugar para correr a verla preocupado

Una vez llegó hasta allá, la tomó del hombro que parecía estar bien para tratar de calmarla y preguntarle que ocurría pero Bonibel no pudo contestar, una criatura idéntica a la que estaba acompañando al que la mordió se arrojó sobre Shawn haciéndola soltar un grito de terror para volver a correr adentrándose en el parque hasta que tropezó con una rama de enredadera que estaba en el suelo y dio a parar contra un arbusto, reaccionando rápido se escondió detrás de este para buscar su teléfono en su mochila dejando al tipo a merced de la criatura

- ¿Pero qué hace un mundano en estos lados..?  ¿No te han dicho que te pueden... atacar los perros? - Dijo la criatura cánida haciendo que a Shawn se le quedara helara la sangre por sólo verlo hablar, dejándolo sin palabras con el color desvaneciéndose de su rostro mientras las uñas de su captor se clavaban en su piel, perforándola hasta el punto de hacerle sangrar, pero el miedo lo había dejado paralizado impidiéndole tan siquiera gritar de miedo o dolor mientras los ojos de la criatura le miraban casi atravesándolo con el mismo filo de sus uñas

La criatura le miró antes de soltarle y dar un zarpazo que le abrió cortes en el brazo y la espalda con tal fuerza que le envió rodando por el césped del parque hasta que se le arrojó encima con uñas y dientes maliciosamente, jugando con su comida antes de devorarle, el sol del anochecer empezó a reflejarse sobre las manchas de sangre que adornaban al rincón escondido del parque en el cual Shawn Deckard vivía su peor pesadilla mientras la criatura le lanzaba zarpazos viciosos esparciendo más el color escarlata por las plantas y la lucidez de Shawn se le escapaba cada vez más con cada golpe, hace unos instantes todo su ambiente era paz pura, ahora era todo lo contrario 

Mientras todo esto ocurría, Bonnie estaba cubriendo su boca para no gritar, hundida en un desesperante terror mientras escuchaba las uñas de la criatura rebanar y desgarrar la piel del chico, pero su nariz empezaba a captar un olor extraño, era metálico y suave, ese olor por alguna razón le hizo abrir el apetito mientras se intensificaba con cada golpe de la bestia hacia su amigo, las lágrimas empezaron a correr por las mejillas de Bonnie mientras imaginaba que la explicación más salvaje poco a poco parecía la más probable y su consciencia se apagaba mientras sentía su corazón acelerándose como si se quisiera salir de su pecho hasta el punto de ser doloroso, ella sólo dejó salir un gemido mientras apretaba ambas manos contra el músculo que bombeaba sangre a un ritmo demasiado rápido hasta que cayó inconsciente al suave suelo del parque

Misma cosa que le ocurrió a Bonnie, le afectó a Shawn cayendo sin conocimiento por pérdida de sangre pensando en lo que quería para el futuro, viéndolo desvanecerse en un desorden de manchas rojas ante sus ojos, la criatura sonrío maléficamente dispuesto a dar una mordida para matar al muchacho y empezar a devorarle pero justo antes de que sus quijadas se cerraran sobre su cuello, un cuchillo de plata atravesó su espalda con una precisión temible, colándose entre sus vértebras el cuchillo rebanó los nervios de su columna hasta terminar alojado en medio del corazón y un pulmón quemando toda la carne a su paso provocando que la criatura cayera hacia un lado convulsionando mientras daba arqueadas repletas de sangre, lo último que vio fue una figura vestida de negro mirándole a la distancia y, al igual que la chica de cabello rosa que estaba escondida pero a diferencia del chico rubio que estaba debajo suyo, su corazón dio un último latido deteniéndose para siempre mientras salía humo del lugar por el que había entrado el filo mortal

Lluvia De CristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora