Cartas Que Nadie Leerá.

Yo sí te quería, porquería.

Te quería, ¿lo sabías? Te quería como se quieren ciertas cosas, sin explicación y lógica. Te quería como para empezar de nuevo, como para intentarlo para que nos salga bien. Estaba dispuesta a cambiar yo, no en mi forma de ser sino comprender tu forma de ser. No quería que cambies, me gustabas así, muy parecido. Y me gustabas... ¡Dios, cuanto me gustabas! -No te voy a mentir- Me gustabas de tantas maneras... ¿Y si un dia te preguntaras si Te quería? Claro que te quería no lo dudes. A un modo no convencional, pero sincero.  Te quería como para empezar a vivir. Como determinante del tiempo. Un antes de ti y un después de ti.

Llegaba a un punto donde te quería tanto como para darte la la seguridad de que a la mañana siguiente no me iría... Así te quería.