Secret Notes | Gonuh

My Story

Llegué a mi casa, sin ganas de nada. Me senté a hacer los deberes, pero no podía concentrarme. Pensaba en Luh y en por qué tenía un ojo morado. Los chicos no pudieron haber sido, pues no le pegaron en la cara. Iba descartando ideas, hasta quedarme más confuso que antes. 

Desde que entendí que me gustaba Luh, sabía que ya no me afectaría lo que me dijeran. Si me decían maricón, gay o lo que fuese, me importaría lo más mínimo. Al que si le importa (y bastante) lo que le digan, es a Luh. La verdad no sé por qué, pero me gustaría descubrirlo.

Narra Luh: 

¿Por qué tuvo que verlo? ¿Qué le voy a decir cuando vuelva a preguntarme? ¿Cómo evado la pregunta? Quería azotar mi cabeza contra la pared una y otra vez. Como cuando estaba en mi anterior escuela. Me hacían la vida imposible, solo por que dije que una vez me llegó a gustar un compañero. No estaba cómodo sintiendo todas esas miradas hacia mí, todos los murmullos a mis espaldas. Cada vez estaba más paranoico, quería irme de ese lugar.

Por suerte Gona me recibió bien. Los demás chicos a veces me hablan (sin contar a los bullys). Él es lo más cercano a un mejor amigo que tengo. Sin él, no se que sería de mí. Las peleas en mi casa, estaría solo en el colegio y seguirían molestándome.

Quiero contarle la verdad, pero ¿y si se entera mi padre? ¿Y si reacciona mal? Mi padre mucho menos sabe la razón de por qué me molestaban en el antiguo colegio. Si supiera que me llegó a gustar un chico... no quiero ni pensar en que sucedería. Mi mamá si lo sabe, y ella me apoyó. Aún recuerdo sus palabras.

Flashback

Estaba nervioso, ¿enserio voy a decirle a mamá sobre esto? Me acerqué lentamente, pero se dio media vuelta y vino a abrazarme.

-¿Qué pasa, cariño?.-Su sonrisa me tranquilizaba. Sabía que ella no me juzgaría, pero tenía miedo.

Luh: ¿Tú sabes la razón por la cuál me molestan en el colegio?.-Miré hacia abajo, jamás me gustó ver a la gente a los ojos cuando cuento o digo algo vergonzoso, o que me entristece. Ella negó con la cabeza.-Me gustaba un compañero.

-¿Un chico?.-Yo asentí, cerrando los ojos, intentando no llorar. Me fue imposible, una lágrima cayó por mi mejilla, y ella me envolvió en un reconfortante abrazo.-Escucha, Lutfi. No te críe para gustar de mujeres concretamente, te crié para que seas feliz.

Ese día supe que tendría el apoyo de mi mamá, y eso me impulsó a seguir adelante, siguiendo sus consejos y gustando de quien me plazca.

Fin Flashback

Es curioso, luego de eso no volvió a gustarme ningún hombre. No me creo completamente heterosexual, pero supongo que las chicas también son lo mío.

Mi padre no estaría en casa por dos días por temas de trabajo. Lo agradecí todo el tiempo. Mi mamá vino a ver mi ojo, con cara de lástima. 

Luh: Mamá, tu no deberías estar así por mí, tu estás mucho más lastimada que yo. Lamento no haber podido ayudar ayer.-Esta era la primera vez que miraba a alguien a los ojos cuando decía algo que me apenaba. Ella soltó unas lágrimas, y me abrazó.

-Sabes bien cual es la razón por la cual no puedo dejar a tu padre. Me encantaría poder hacerlo y que ambos vivamos una vida normal.-Me acarició la mejilla y yo asentí, viendo su lágrima caer. Me besó en la frente y se fue.

Luh: ¿Crees que pueda contarle, a una persona a la que le tengo confianza? No contaría nada...-Ella asintió y salió de la habitación. Cogí el teléfono y llamé.

Gona: Luh.. ¿Qué pasa?

Luh: Gona... yo... enserio. Quiero contarte sobre mi ojo, y básicamente, sobre todo.

Gona: Te escucho.-Le conté lo más resumido que pude la historia. De mi antiguo colegio, de que me gustaba un compañero. Aunque esa parte la dije muy despacio y disimuladamente, no quería que pensara mal de mí. También sobre mi padre y la razón de mi moretón.

Luh: Pues eso.. simplemente no hay más que decir.-Suspiré. 

Gona: Yo no puedo creerlo.-Tartamudeaba, estaba demasiado confundido.-Luh, ¿por qué no me contaste sobre esto?

Luh: No quería que te hicieras una mala imagen de mí.-Contesté apenado.-Lamento si tardé en decírtelo, sólo necesitaba tiempo.

Gona: Además, ¿qué se creen esos que te llamaron maricón? ¡Pleno siglo veintiuno! Madre mía...-Me reí. La verdad es que él tenía razón, pero me hizo un poco de gracia su reacción. Él es el tipo de persona que todos deberían tener en su vida. Cariñoso, gracioso, lindo, te escucha cuando lo necesitas, y siempre está ahí para ti.

Pensamiento de Gona.

¿Enserio piensas que me molesta que te haya gustado un compañero tuyo? 

Una nueva oportunidad para mí.