Revardecer / KaiSoo-KaDi

Capítulo 28

*Narra Kai*

Fui a casa de mis padres para pasar el fin de semana, no quería hacerlo realmente pero ya llevaba varios días sin ir. Tomé mis cosas y me dirigí al lugar el sábado apenas desperté.

Cuando llegué, abrí la puerta con mi propia llave, no había nadie cerca, ni mi familia ni los empleados, me pareció raro, antes de subir a la habitación que me correspondía pasé por el living y nada, salí al jardín trasero y nada, me dirigí al estudio de mi padre, la puerta estaba semi abierta.

-Entonces explícame a que se debe esto- escuché decir a mi padre.

-No hay nada que explicar- contestó mi hermano. Era raro, nunca lo había escuchado responder a mi padre, eso me hizo congelarme en la puerta antes de entrar.

-No le hables así a tu padre Joonmyeon- escuché la voz de mi madre.

-No hay excusa para no presentarse a trabajar, eres el presidente por si no lo recuerdas- dijo mi padre y recordé que Joonmyeon se quedó en mi casa.

-Lo recuerdo.

-Escuché de uno de mis empleados que Jongin fue a la empresa- me tensé.

-Si lo hizo- contestó mi hermano.

-¿Así que es por él, te ha estado metiendo ideas en la cabeza?- la voz de mi padre se endureció.

-Jongin no mete ideas en mi cabeza, no hables así de él.

-Yo hablo de él como quiero, es un inútil, no sirve para nada, y ahora encima viene y trata de corromperte- sabía que mi padre pensaba mal de mí pero escucharlo de su boca hizo que mis ojos se llenaran de lágrimas.

-Jongin no es inútil, es un chico talentoso pero tú no lo ves- Joonmyeon me defendió.

-¡Basta! Parece que me equivoqué con ambos, no puedo creerlo de ti Joonmyeon, pensé que podrías ser el presidente de la empresa, pero si el puesto te queda grande entonces no hay otra solución, volveré a tomar el cargo- dictó.

-He estado haciendo bien mi trabajo estos años- dijo Joonmyeon.

-Y ahora lo tiras todo por seguir a Jongin en sus tonterías, ten cuidado Joonmyeon, eres una fruta madura, no te pudras antes de tiempo como él- no pude escuchar más y me fui de ahí sin ser visto.

Aunque mi padre nunca me trataba bien, era doloroso escucharlo hablar así de mí, diciendo que no era nada.

Toda mi vida me dediqué a hacer las cosas lo mejor que podía pero mi padre nunca diría que estaba orgulloso de mí, ni siquiera mi madre lo haría, me gustaba pensar que mi hermano si lo hacía pero a la vez estaba frustrado porque por mi culpa estaba teniendo problemas.

Estuve caminando y dando vueltas durante un rato sin fijarme por donde iba así que no fue sorpresa para mí perderme, no había llevado mi auto a casa de mis padres así que no tenía en que volver.

Para hacerla más completa a mi celular se le acabó la batería y no traía suficiente dinero para un taxi.

Caminé buscando una tienda o negocio para pedir indicaciones, o un teléfono público para llamar a Sehun.

Iba bastante distraído y choqué con alguien.

-Fíjate por dónde vas- me dijo enojado.

-Lo siento, no te vi- murmuré.

-¿Eres ciego o qué?

-Suficiente Jongdae, ya se disculpó- dijo el otro chico que venía con él- no te preocupes está todo bien- me dijo a mí.

-Minseok- el chico hizo un puchero.

-Vámonos que Kyungsoo y Chanyeol nos están esperando- lo jaló y ahí me di cuenta de los nombres.

-Esperen- me miraron- ¿ustedes son amigos de Do Kyungsoo?

-Sí, ¿qué eres, un fan acosador?

-Me llamo Kim Jongin, somos compañeros de trabajo- dije.

-¿Tú eres Jongin? Un gusto yo soy Minseok y él es Jongdae- me sonrió.

-Te imaginaba más guapo- me ofendí pero lo ignoré.

-Estoy un poco perdido, ¿podrían darme indicaciones?

-Yo tengo una idea mejor- dijo el tal Jongdae.

Me llevaron caminando unas calles y me di cuenta que íbamos al edificio de Kyungsoo, no me dieron tiempo de protestar y me llevaron dentro, me sentía nervioso de verlo, desde el beso no habíamos hablado, pero era esto o seguir perdido.

Park Chanyeol abrió la puerta con una sonrisa en la cara que se esfumó cuando me vio y me miró con desconfianza.

-¿Qué hacen en la puerta?- escuché la voz de Kyungsoo que se acercó y me vio- ¿Jongin?

-Min y yo lo encontramos y lo trajimos- se refirió a mí como si hablara de un perro callejero.

Todos entramos al departamento, Park seguía vigilándome, Minseok y Jongdae actuaban como si estuvieran en su casa y Kyungsoo parecía ansioso.

A excepción de Kyungsoo y yo los demás salieron a comprar comida unos minutos después. Nos sentamos en el sofá.

-¿Viniste por algo?- me preguntó.

-En realidad estaba algo desorientado y me choqué con tus amigos que me arrastraron hasta aquí- dije sin mirarlo realmente.

-¿Te pasó algo?- volvió a preguntar.

-No.

-Tienes los ojos hinchados y rojos, ¿estuviste llorando?- lo miré con sorpresa y recordé las palabras de mi padre.

-Estoy bien- murmuré pero no pude evitar soltar más lágrimas, me sentía bastante sensible.

-Hey, ¿qué pasa?- se acercó a mí.

-Mi padre me odia- solté mirándolo y Kyungsoo me abrazó. Era reconfortante sentir sus brazos rodeándome y correspondí su abrazo.

-¿Por qué dices eso?- preguntó con voz suave.

Le conté acerca de la preferencia de mi padre por Joonmyeon, el hecho que nunca me notaba y las palabras que lo escuché decir esa mañana.

Cuando me calmé un poco, salimos de su departamento, fuimos a caminar, Kyungsoo dijo que era para darme privacidad antes de que llegaran sus amigos y yo lo agradecí, necesitaba respirar aire fresco. Nos sentamos en la banca de un parque solitario.

-No sé qué decirte Jongin, yo tampoco me llevo con mis padres- dijo.

-Parece que tenemos más en común de lo que parece- contesté y lo miré.

-Supongo- dijo.

Nos miramos a los ojos, nos acercamos y unimos nuestros labios como habíamos hecho unos días antes, pero ésta vez fue un beso corto y tierno, un toque lleno de cariño.

Kyungsoo no lo sabía, pero me había marcado como su propiedad desde la primera vez que me besó y sinceramente eso era algo que no me molestaba.

(Créditos de imagen a quien corresponde)

(Próximo capítulo narra Kyungsoo)