Desde que era niño, Kyungsoo soñó con ser actor y pudo estudiar actuación. Pero nunca imaginó que tendría un reto tan grande en su primer película.
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*Narra Kyungsoo*
Aunque Jongin y yo teníamos como objetivo llevarnos mejor, aún era una sensación extraña. Estábamos los dos sentados en un restaurante italiano comiendo spaghetti, era una escena bastante divertida si lo pienso ahora.
Comenzamos hablando del porque mis amigos no estaban por ningún lado y no había forma de comunicarme con ellos o encontrarlos.
-Y los estuve llamando a todos, incluso fui a sus casas a buscarlos pero no había nadie, tal vez estén ocupados trabajando- dije.
-Te entiendo, Sehun y mi hermano deben estar por ahí jugando- comentó.
-¿También te abandonaron?- pregunté.
-Bueno, no necesariamente, Sehun comenzó a salir con un amigo y ya que están trabajando juntos pasan mucho tiempo solos, mi hermano tiene un amigo y creo que ambos se gustan así que no quería interrumpirlos si tenían planes- contestó.
-¿Tú no estás saliendo con nadie?- pregunté.
-No, claro que no- me miró directamente.
-Creo que las relaciones son un poco problemáticas- yo no había tenido suerte precisamente.
-Pero podría ser algo lindo, tener a alguien que te gusta y tener citas- dijo mirando su plato.
-Supongo- no quise seguir recordando mis experiencias pasadas.
Después de eso continuamos hablando y recordando viejas peleas de la universidad, nos reímos bastante y la conversación tomó otros rumbos pero nunca el de nuestros padres. Cuando terminamos la comida, ordenamos un postre cada uno.
-Nunca supe que bailabas ballet- me sorprendí cuando me lo dijo.
-Sí, bueno algo así, tomé clases pero nunca lo hice profesionalmente- dijo sonriendo.
-¿Por qué lo dejaste?- cuestioné.
-Fue cuando decidí ser actor- respondió.
-¿Y te gustaría volver a bailar?- le pregunté.
-La verdad, sí, si me gustaría, no sólo ballet, me gusta bailar de todo en general- se sonrojó.
-¿Y eres bueno?- pregunté divertido.
-Obvio que sí, bueno siempre recibí buenos comentarios- dijo sonriendo aún más.
-Se te salió el ego otra vez- ambos nos reímos.
-Los viejos hábitos nunca mueren- dijo- ¿y tú, te gusta algo más aparte de la actuación?
-Sí, y también tiene que ver con la música- me miró- la verdad es que me gusta cantar y no lo hago nada mal.
