Shots TaoRis

II

¿Dónde está? –gruñó totalmente descontento al no saber de su paradero–.

N-No lo sabemos, se-señor. –el pobre temblaba de miedo ante el tono de voz usado por su jefe, y es que, nunca lo había visto tan enojado–.

Pues ve a buscarle, ¿qué esperas? Lo quiero de nuevo aquí. –su voz estaba más fría de lo normal, ¿y cómo no estarlo? Su pequeño había desaparecido, así sin más, como si la tierra se lo hubiese tragado llenándolo de preocupación, el mundo que manejaba no era seguro y tenía que protegerlo a como dé lugar. No sabe cómo, ni cuando la situación se le fué de las manos con el resultado de la desaparición de su niño y ahora lo único que quiere es encontrarlo y tenerlo entre sus brazos llenándolo de mimos y besos–.

Una llamada fue suficiente para alterarlo y llevarlo al borde de la desesperación.

Llamada:

Tenemos a tu chico... Si lo quieres ver de nuevo será mejor que hagas lo que te pedimos o el pobre sufrirá. –y el sonido de pasos y una puerta ser abierta se escucha, más pasos que se aproximan hacía unos sollozos y Kris siente su mundo caer al reconocer esos sollozos–. Saluda a tu novio...

K-Kris... –murmuran del otro lado–. Sa-Sácame de aquí, por favor... N-No quiero estar a-aquí... –su voz se oye entrecortada por los hipos del llanto de hace rato, destrozando a Kris que jamás le gusto ver y escuchar a su pequeño llorar–.

Bebé, te sacaré de ahí lo prometo cariño. Estarás en mis brazos de nuevo, ¿si? Se fuerte hasta que llegue a ti, te amo, no lo olvides... –su voz suena temblorosa y desesperada, la irá lo consume poco a poco; se metieron con su bebé, con lo más importante que tiene y van a pagar muy caro aquel atrevimiento–.

Está bien g-gege... T-también te amo... –y no se vuelve a escuchar la voz de su pequeño, solo el ruido de una persona saliendo del cuarto–.

Que tierno... Pero vamos al grano, si lo quieres de nuevo tendrás que hacer unas cosas, si no llevas todo no dudaré en mandar a alguien para que disfrute del cuerpo de tu chico y si te niegas lo torturare, lo violaran y al final, cuando este todo sangrante y mis hombres se hayan cansado de jugar con su cuerpo puede que lo mate o lo mantenga vivo para entretención mía y de los otros, sería como una puta con la cuál disfrutar... –y unas risas se escuchan, Kris cierra la mano fuertemente al punto en que sus nudillos se ponen blancos de la presión que ejerce–. Bien ahora escucha, quiero un millón de wons y treina kilos del afrodisíaco más fuerte que tengas, todo eso en un bolso. Dentro de unos minutos te mandaré la dirección de dónde estará tu chico con mis guardias, les entregaras todo y ellos a él, no cumplas el que pagara será tu bebé. No falles... –y la llamada se corta, segundos después Kris esta hecho una furia y tira todo a su paso–.

¡¡Maldito hijo de perra!! Esta me las vas a pagar, recuperaré a ZiTao y te las vas a ver conmigo. Nadie se mete con él y sale ileso y tú, SeHun no serás el primero... –habla entre dientes esperando a que dicho mensaje llegue–. ¡Kai! ¡ChanYeol! –los nombrados entran en la habitación–.

¿Lo encontraste? –pregunta el moreno mientras el otro solo observa a Kris viendo como este asiente–. ¿Quién lo tiene?

SeHun, el bastardo tiene a mi Tao. Lo va a pagar caro si llegó a hacerle daño. –dice con rabia, conteniendose de seguir destrozando la oficina–. Saquen un millón de la caja y pongan lo en un bolso junto con treinta kilos del mejor afrodisíaco.

Hombre, es mucho lo que ha pedido.. –murmura ChanYeol antes de salir del cuarto seguido de Kai–.

Pero él lo vale... Es todo lo que tengo... –susurra Kris a la nada y el sonido de un mensaje lo distrae–.