Mi guardaespaldas |Dylan O'Brien|[Editando]

22.¿Qué me sucedió? ¿Donde está él?

Grace.

Escuché la voz de alguien, no logro percartar quien es, mis oídos están sensibles.

— Necesito un doctor — gritaba aquella persona que apenas lograba escuchar.

Sólo movía mis manos inquietamente, abro mis ojos poco a poco... Apenas logro analizar en donde me encuentro, miro lentamente a mi izquierda y allí se encontraba una persona tomándome de la mano.

Era Tyler.

— ¿Tyler? — pregunté con una voz débil.

— Grace, al fin despiertas — dijo con una sonrisa en su rostro.

Abren la puerta y aparece el doctor acompañado de una enfermera, Tyler se hace un lado, mientras que aquellos hacían su trabajo.

El doctor me hace una revisión.

— Es un milagro que hayas despertado — dijo el doctor

— ¿Qué me sucedió? — dije un poco abrumada

— Tuviste un accidente — respondió.

Yo solamente no digo nada, trato de hacer el mínimo esfuerzo por tener al menos un recuerdo sobre lo sucedido.

Una imagen viene fugazmente, y era Dylan, desmayado, con sangre entre su rostro y brazos.

— ¿Recuerdas algo? — preguntó Tyler

— No mucho — dije

— ¿Qué es lo que recuerdas? — preguntó esta vez el doctor.

Lo miro por unos segundos, y desvío mi mirada hacía la nada.

— A mi guardaespaldas, herido ... Y yo saliendo de la camioneta — dije aún pérdida entre ese pequeño recuerdo.

Trato de esforzarme y el doctor lo nota.

— Esta bien, no hagas mucho esfuerzo, poco a poco recordarás lo que sucedió — dijo el Doctor.

— Gracias Doctor — dijo Tyler

— Con su permiso — salió de la habitación junto con la enfermera.

— Tyler... — hablé

— ¿Qué pasó? — preguntó

— ¿Qué día es hoy? — pregunté alarmada.

Tyler ríe a lo bajo y yo lo miro con extrañeza.

— ¿De qué te ríes? — pregunté

— De nada — respondió — es solo que llevas un día, si pensaste que estabas en coma; lamento decirte que estabas equivocada — dijo.

Mis mejillas se tornaron a un color rojo, me había enojado.

Solo el tomo mi antebrazo.

— Lo siento hermana, quería hacerte reír — dijo mostrando una pequeña sonrisa — era un chiste — lo miro con seriedad

— Pues ese chiste fue de mal gusto — puse los ojos en blancos y el me abrazo y acepte el abrazo.

— Te quiero — susurró en mi oído

— yo igual — respondí

Me dió un beso en mi frente.

— ¿Y papá? — pregunté

— Ya viene en camino — dijo

Sonreí en mi interior, hubo un pequeño silencio en la habitación; hasta que fue interrumpido por un timbre del teléfono de Tyler y salió a contestar en el pasillo.