Si Yoongi hubiera tenido que decir cuándo notó que Hoseok le gustaba como algo más que un amigo debía remontarse al año 2009, a cuando tenía 16 años e iba en el segundo año de secundaria. Nunca lo había pensado de esa manera hasta ese momento, de haberlo hecho tal vez lo hubiera sabido antes, pero eso se debía a una sencilla razón: que el pelinegro apareciera muy seguido en sus pensamientos, que el ver algo bonito como perritos o flores le recordara a Hoseok, que una sonrisa se formara involuntariamente en sus labios cada vez que hablaban o cuando lo veía o cuando recordaba algún chiste suyo... todo eso le parecía normal porque así había sido desde el principio de su amistad, desde el "accidente" del avión de papel en su arroz. Sin embargo, no le pareció normal la forma en la que su corazón se aceleró y comenzó a latir como loco esa vez en época de pascuas que decidieron ver una película de terror juntos y Hoseok del susto le tomó la mano con fuerza, porque ciertamente el sonrojo, los nervios, la respiración irregular y el pulso acelerado no eran cosas de todos los días para Yoongi, menos si los causaba ese al que consideraba mejor amigo. Esa fue la primera vez que pensó que tal vez sus sentimientos por Hoseok eran más fuertes de lo que creía, al igual que ahora al sentir los labios suaves del pelinegro sobre los suyos pensaba que esos sentimientos no habían cambiado ni un ápice en todos esos años.
Su primera reacción en cuanto Hoseok lo besó, por supuesto, fue tensarse por completo. De hecho colocó las manos entre él y el pelinegro por el susto que le causó aquel ataque tan inesperado, los ojos abiertos como platos y el corazón latiendo como loco y a punto de detenerse tal como ya lo había hecho su respiración. Tardó unos dos segundos en comprender lo que estaba sucediendo antes de relajar el cuerpo y abrir los puños (¿en qué momento los había cerrado?), entonces cerró los ojos y entreabrió los labios soltando un suave quejido, más bien un suspiro de completa satisfacción en la boca del menor. No supo con precisión qué pasó primero, si Hoseok profundizando el beso con la lengua o si él mismo llevando poco a poco las manos por el cuerpo del menor hasta posarlas en su cintura, pero para cuando quiso darse cuenta estaba abrazando a Hoseok como nunca al mismo tiempo que el pelinegro lo sostenía del cuello con fuerza, como si temiera que Yoongi fuera a soltarse, y ambos estaban besándose como si la respuesta a todas las preguntas del mundo estuviera en la boca del otro.
Honestamente para Yoongi eso último era cierto, su respuesta siempre fue Jung Hoseok.
Yoongi había imaginado más de una vez cómo sería besar a Hoseok, mentiría si dijera lo contrario. En el pasado lo hacía todo el tiempo, en el presente ya no tanto, pero que lo hacía, lo hacía porque tenía muy oculto un lado cursi y romántico que nada más él, sus cuadernos, las cartas no enviadas y las cuatro paredes de su casa sabían. Y aún así, ni siquiera en su fantasía más profunda y secreta había pensado que realmente pasaría, ni que Hoseok lo iniciaría, ni que se sentiría tan bien a pesar del notorio gusto a alcohol que ambos tenían en la boca. Otra cosa que tampoco había pensado nunca era que terminaría aceptando que toda esa mierda de las mariposas y los fuegos artificiales que tanto mencionaban en las películas y en los libros cliché que Seokjin disfrutaba era real, pero vaya que ahora venía a confirmarlo, el beso de Hoseok había provocado todo eso y más en su cuerpo y mente. Estragos, eso hacía el menor sobre él.
(Aunque cabía la posibilidad de que el cosquilleo, el mareo y la sensación de estar en una nube fuera en realidad a causa del alcohol en su sistema, Yoongi no descartaba esa opción).
Esto es real, esto está sucediendo en serio, pensaba mientras se deshacía en los brazos del menor. Este soy yo, Min Yoongi, besando a Hoseok, Jung Hoseok, mi Hobi, aquí y ahora y de verdad. Los labios de Hoseok eran suaves y cálidos y tenían un movimiento incierto, curioso, lento, besarlo se sentía de maravilla. El menor sostenía su cuello con firmeza al mismo tiempo que con los pulgares repartía caricias casi imperceptibles que le erizaban la piel, y poco a poco sentía que el calor del cuerpo ajeno se contagiaba al suyo, la temperatura subiendo en toda la habitación con esos besos que cada vez eran menos inocentes, cada vez más necesitados después de una espera tan larga por probarse. Yoongi sentía que estaba diciendo todo lo que no podía formular en palabras al succionarle el labio inferior a Hoseok, mordiéndolo, lamiéndolo, suspirando dentro de su boca. ¿De verdad afuera estaba nevando tanto? ¿Realmente seguía siendo invierno en Seúl? Ahí dentro se sentía como si fuera el más cálido verano, la más dulce primavera, tanto así que en la mente de Yoongi el concepto de <frío> había dejado de existir cuando el cuello y el cuerpo entero del menor ardían entre sus brazos y viceversa.
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편지 (YoonSeok)
Fanfiction편지 (rom. pyeonji; ing. letter, esp. carta): Escrito que una persona dirige a otra para darle noticias; generalmente se envía por correo encerrado en un sobre. ¿Es posible enviar tu corazón en una carta? ♦YoonSeok (Yoongi x Hoseok) Portada hecha por...