Muros de malas vibraciones

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Después de colocar todas mis cosas y explorar cada rincón del apartamento me puse a escribir cada detalle del día de ayer y hoy. Fui a por el tipp-ex, que me lo había dejado dentro de la maleta, cuando vuelvo a la mesa me encuentro con algo escrito a continuación de lo que yo había puesto. Jack.

"No entiendo cuál es el problema de que yo te proteja."

-No me proteges, Jack. Lo que tu haces es sobre protegerme y aislarme del mundo.Ya había conseguido comenzar una vida normal. Y ahora me han encerrado aquí... mas bien TÚ me has encerrado aquí. Que tu estés encerrado en mi mente no significa que quiera estar igual que tú, por fin había una persona con la que me sentía a gusto, y tú me lo has arrebatado, me has arrebatado una vida normal.- Dije seria mientras miraba fijamente el cuaderno.

A los dos minutos o así llamaron a la puerta y entro Raquel. Me explico que ya habían hablado con los otros instructores y que, cuando terminase de escribir, me esperaban en la sala de reuniones, que se encontraba al final del pasillo.la verdad es que no me apetecía mucho estar con gente que supiese de la existencia de Jack. Ella se fue dejándome de nuevo sola.

-Jack, espero que te comportes y no des muchos problemas, entendido?

Emprendí mi camino hacia la ultima puerta del pasillo. parecía que en este centro no había mucha gente, no sabia si eso era buena señal o mala.

Llegue y di tres toques a la metálica puerta (estas puertas le daban un toque aun mas carcelero al centro). Raquel me abrió la puerta y había como siete personas en esa misma sala. Todas excepto Kerry y Raquel iban con una bata blanca. Justo la persona que estaba en medio de la redonda mesa comenzó a hablar.

-Buenas tardes, Ashley. Lo primero bienvenida a nuestro centro, espero que te haya gustado tu nuevo apartamento. Segundo, aquí no sera como en tu otro centro aquí tendrás mas libertad, impartirás clases en tu centro asignado, pero siempre tendrás a alguien del personal que te acompañe. Tercero, tendrás dos o tres semanas dedicadas a hacer pruebas, para ver lo que puede hacer Jack. Con lo que solo iras tres días a la semana durante el periodo de pruebas.

Yo solo asentí, mientras miraba al suelo. ¿Qué más diría? ¿Qué no estaba de acuerdo? ¿Qué quería que me dejasen vivir tranquila? Sí se lo podía decir pero ya me sabia la respuesta. Lo bueno que tenia este centro era que podría hacer una vida más o menos normal, podría relacionarme con gente.

A continuación, todos los presentes en la sala se presentaron, excepto una chica, que vino después, la cual llevaba un mono blanco puesto hasta la cintura y una camiseta de tirantes negra.

-¿Y ella?- dije señalándola con un leve movimiento de cabeza.

-Oh. ¿Ella? Ella es de mantenimiento, nos ayudara con las pruebas. Era una de nuestras antiguas internas.- La verdad, no se la veía muy contenta de recordar esto ultimo, se veía reflejada la tristeza en sus ojos.

Algo raro había entre los anchos muros de esta cárcel de mentes. Al pensar me dio un pequeño escalofrió que me recorrió toda la espalda.



**Nota de la autora: bueno espero que os este gustando la novela. También os invito a pasaros por las cuentas de dos personas: flor2002flor y Baetriiz **

La chica de los cuadernosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora