No podía dormir, no después de pensar una y mil veces en que Joe casi me besa en la fiesta. Era extraño ¿Joe podía sentir cosas por mi, ___ Sommerville? Después dije “No, seguro que quiso besarme para molestarme. Pero no le salió su juego”
Yo soy una persona muy gordita, por eso casi nadie se me acerca amorosamente. Tengo amigos, si, pero de todos los hombres que me han gustado, ninguno ha sentido nada por mi, con la misma fuerza que yo por ellos.
Me dormí pensando en eso y tuve una pesadilla. Todos me decían que era fea, especialmente Joe y Natalia, la presidenta del Fans Club de Connect 3. Aunque en la pesadilla se veía que yo cambiaba corporalmente y terminaba enfrentándolos y ganando una pelea.
Amaneció y me di una ducha fresca. Miré mi cuerpo en el espejo que tenía en mi baño y empecé a pensar que cosas de mi cuerpo iba a cambiar para quedar irreconocible, cuando vuelva por mi venganza.
“¿Y si cambio mis pechos y me pongo un poco de silicona? Si, seguro que eso podría servir un poco” me decía mientras tocaba mi cuerpo. También me haría una pequeña modificación facial para parecer “La prima de ___”.
Desayuné algo ligero y me fui a arreglar, porque todo este día se lo dedicaría a 2 personas especiales, mis mejores amigas. Ellas vinieron por mí y nos fuimos caminando, mientras en mi casa se quedó mi mamá arreglando mis maletas de viaje.
Nos quedamos toda la tarde paseando por la ciudad, bromeando, recordando cosas y contándoles más de mi plan de venganza al llegar al Shopping de la ciudad. Nos sentamos a tomar café y vimos a Joe. Llamó a una de las chicas y le entregó una caja. Él después me miró y me sonrió.
Se me fue toda la sangre a la cabeza al mirar a Joe, pero luego se fue y tuve que tomar un café bien helado para recuperar el color normal de mi cara. Mis amigas me miraron y me dijeron que la caja de Joe era para mí. La recibí, pero dije que iba a abrirla cuando ya estuviera en el avión rumbo a mi nueva vida.
Nos devolvimos a mi casa y al llegar, mis amigas me dijeron que irían conmigo a despedirme al aeropuerto. Sonreí y entré. Me acosté por última vez en mi cama y me dormí profundamente. Esa noche volví a soñar con Joe, que estábamos solos en una parte mirando el mar.
A la mañana desperté y vi que me faltaban unas 5 horas para irme del país. Dejé ordenada mi cuarto y pensé en mi plan completo para vengarme de no solamente Joe, sino de todos los que alguna vez me lastimaron.
Me haría pasar por muerta, y mi nuevo yo sería “la prima de ___”. Haría cualquier cosa para enamorar a Joe, y cuando él ya esté casi llorando por mi, le revelaría mi verdadera identidad y mis intenciones, para que sienta lo mismo que yo sentía al amarlo en silencio.
Mi mamá me llevaría al aeropuerto junto a mis dos mejores amigas, las cuales llegaron y me ayudaron a limpiar un poco de mi cuarto. Nos subimos todas al auto de mi mamá después de llevar mis maletas y nos fuimos riendo durante todo el camino.
Al llegar al aeropuerto confirmamos mi pasaje y me puse a esperar que llamaran a quienes irían en mi vuelo. Me puse triste y por un momento pensé en no irme y tener la valentía de declarar mis sentimientos a Joe sin cambiar mi apariencia. Pero el miedo fue más fuerte.
Cuando llamaron a los pasajeros de mi avión, me acerqué a mis amigas y nos dimos un fuerte abrazo. Me prometí no llorar en la despedida, pero si después. Les prometí avisar de mi regreso y mandarles fotos de mi cambio corporal. Me fui a la fila de embarque, pero antes vi a algunas chicas del Fans Club de One Direction acercarse a mí.
Me entregaron un regalo envuelto y me dieron un abrazo fuerte. Me dijeron también que dentro de los regalos de la cajita envuelta, venía algo que Joe compró especialmente para mí. La fila comenzó a avanzar y antes de subir al punte que lleva al avión, dediqué una sonrisa de despedida a mis amigas y compañeras de Fans Club.
al acomodarme en el avión, a los lejos podía ver a mis amigas abrazadas llorando mientras mis compañeras de Fans Club hacían lo mismo, dejé que algunas lágrimas se me escaparan mientras abría el regalo que Joe me había mandado ayer con mis amigas, el cual traje en mi bolsito de mano.
Era una cajita musical, con stickers de One Direction y Connect 3 pegados en él. Antes de poder ver el resto de regalos, avisaron que nos abrocháramos los cinturones, porque el avión ya iba a despegar. Alcancé a llamar a mis amigas y decirles que no lloraran, cosa que hicieron más fuerte hasta que les conté un chiste.
Apagué mi teléfono y me acomodé el cinturón y una azafata me lo abrochó. Cerré los ojos mientras sentía que el avión se movía y luego despegaba. Adiós a la vieja ___ Sommerville y bienvenida venganza.
