Soy Un Monstruo

Primer día de clases.

Primer día de clases.

Pasé una semana entera encerrada en mi cuarto, bebiendo sangre y haciendo cualquier cosa menos dormir. Ya no sentía sueño y no me sentía para nada cansada. Mi padre había vuelto y se había asombrado mucho al verme y empezó a llorar y llorar igual que mi madre, y yo dura como una piedra no pude votar ni siquiera una minima lagrima al verlos así.

Habían empezado las clases y mi madre me había suplicado ir, yo me sentía un poco asustada porque en serio no quería hacerle daño a alguien. Me vestí con lo primero que ví y no me importo que nada combinara (ok no. Esto es pura mentira, jamás podría salir a la calle mal arreglada), terminé de arreglarme y me fui abajo.

- Hola mamá. - Dije llegando a la cocina y tomando una de las botellas de sangre para guardarla en mi bolso.

- Hola Brenda. - Dijo ella mientras hacía la comida.

- Hoy... quiero comer de eso sabroso que cocinas.

- Ah, ¿vas a comer con nosotros? - Asentí y ella me señaló la mesa para que me sentara.

(...)

No quería salir del auto, mi padre me había llevado en mi primer día de clases a la secundaria. Tenía quince minutos encerrada desde que habiamos llegado y el había sido paciente conmigo porque esperó sin decir nada a que yo bajara.

- Ádios, papá. - Dije nerviosa y el lo notó porque tomó mis manos cuando salí.

- Todo va a estar bien, tu eres fuerte y puedes afrontar esto sola. - Asentí de nuevo nerviosa y alejé mis manos para irme.

Con todos los nervios que tenía no me dí cuenta lo enorme que era esta secundaria y el montón de gente que había. Unos sentados en la grama y otros alrededor de una mesa con una sombrilla que los cubría completamente. Y a diferencia de otras escuelas estos no parecían interesados en la chica nueva, excepto un grupo donde habían chicas con faldas cortas, tacones de un metro (exageré, lo siento), crop tops y absolutamente todas eran rubias (algunas no eran rubias naturales)  pero en fin eran rubias. Los chicos traían chaquetas enormes y supuse que ese era el "grupito" popular que en toda escuela había.

Pasé por un lado y me gané miles de miradas de desprecio de dos rubias que estaban sentada en la mesa, las otras simplemente sonreían falsamente y los chicos me miraban con la boca abierta. Dios, más incomodo no pudo ser.

Fui directo hasta la recepción y luego de dar algunos de mis datos me entregaron una hoja con el horario y un mapa detrás para saber a donde dirigirme cuando me toque alguna clase. Distraida en la hoja no me dí cuenta cuando choqué con una chica, casi me caigo yo... pero ella se hallaba en el piso con todos los libros regados.

- ¡Ay! Mil perdones, en serio no fue mi intención. - Me tiré de inmediato al piso y empecé a ayudarla a recoger todos los libros, cuando terminé se los entregué y ella solo me sonrió de medio lado timidamente y me esquivó yéndose a quien sabe dónde. Seguí mi camino hasta la primera clase y noté que había llegado justo a la hora porque como cincuenta estudiantes se amontonaban mientras alguien abria la puerta de un salón.

Me apresuré pero caí al suelo al momento en que sentía un pie tropezarse frente a mí, todos los que estaban amontonados en la puerta se voltearon y algunos rieron pero otros me miraban confundidos. Miré atrás para ver quien había sido el maldito/a que me metió el pie y solo ví a una de las rubias que estaba afuera hace un rato en el campus.

- ¡Ops! - Dijo mientras se cubría la boca. - Disculpa querida, es que estabas en mi camino. - La fulminé con la mirada hasta que llegaron atrás de ella un montón de personas. Era su "grupito"

- ¿Estas bien? - Una voz masculina me habló y me tendió la mano. Miré hacia arriba y era un chico de cabello castaño claro y ojos marrones, su cara era seria y espero a que tomara su mano.

- ¡Blake! - La rubia que me había hecho caer ahora se estaba dirigiendo al chico que me tendía la mano. Lo golpeó en el hombro pero este hizo caso omiso. Y por venganza yo...

- Estoy bien. - Dije tomando su mano amablemente y levantandome. La rubia me miraba realmente mal, si las miradas quemaran ya tuviera millones de huecos en mi cabeza. Le sonreí al chico y me voltee para irme y empecé a escuchar susurros detrás de mí y sonreí para mis adentros.

(...)

Había terminado la clase y todos estaban a puntos de salir si no hubiese sido por el profesor que paralizó a todos antes de salir.

- Bueno, es un nuevo año escolar y han llegado muchos alumnos nuevos. Así que vamos a hacer que estos se presenten... - Todos los nuevos nos dirigimos hacia el profesor y cada uno por orden empezó a dar su nombre y a responder cada pregunta del profesor. No presté atención a estos y solo pude quedarme viendo a Blake, el chico que me había dado su mano, obviamente solo lo veía cuando el veía a otro lugar que no fuera yo. - Señorita... - Noté que me estaban hablando a mí y rapidamente respondí.

- Mi nombre es Brenda Koslov, soy rusa pero practicamente viví toda mi vida aca en Inglaterra. - Escuché un leve susurro que provenía de la rubia fastidiosa, se lo decía a su amiga y como si yo estuviese a su lado pude escuchar claramente como decía "perra rusa"

- Y... ¿De qué parte del país vienes? - Dijo el profesor.

- Yorkshire. - Me había mudado exactamente el día que me había convertido en el monstruo que ahora soy.

- Muy bien, hemos concluido pueden irse. - Todos empezaron a salir y yo iba a hacer lo mismo si no hubiese sido porque alguien me jaló del brazo.

- ¿Quien te crees que eres para tocar a MI novio? - Cuando me volteé ví a la rubia esta que me había molestado todo el día.

- ¿Quien te crees que eres para tocarme? - Alejé mi brazo de sus uñas postizas y seguí caminando ignorando por completo sus gritos. Pero entonces choqué con algo fuerte y... ¿frío? Alcé mi vista y ví a... Blake.

- Disculpa. - Dije haciendome a un lado. Cuando estaba por irme el me tomó fuerte del brazo y cuando me volteé nos miramos por unos largos segundos en los cuales pareció que el me hubiese escaneado la vida. Luego de una eternidad el me soltó y empezó a respirar agitado como si le faltase el aire y se fue, así sin más, sin dar explicaciones y sin decir ni una sola palabra...

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En multimedia... Blake

(Sí, ya sé que es Spencer Boldman pero lo necesitaba en serio para mi historia)

Ah, y si tienen cualquier pregunta sobre la historia pongan en los comentarios y cuando tenga un poquitín de tiempo les respondo. Lo prometo.