Las tenues luces de colores resaltaban sobre el espacio oscuro. El joven de cabellos negros caminaba intentando no acercarse a nadie, odiaba esos lugares porque lo hacían sentir más raro aun. Un grupo de hombres sin camisa bailando uno contra otro, uno vestido de señorita, otros besándose en un rincón. Alec quiso huir de allí, ¿por qué le habría hecho caso a Isabelle?, era obvio que explorar su sexualidad en un bar gay era un gran paso. No quería. Si alguien lo veía allí, si Jace pasaba por allí y lo observaba. Alec se estremeció al pensarlo horrorizado, a pesar de no ser posible.
Una mano se deslizo sobre su trasero, Alec se tensó, se giró molesto y confundido. Un hombre le sonrió, esto le asusto y le molesto aún más. Quería salir corriendo de allí, así que comenzó a caminar hacia la salida fingiendo que nada paso, chocando con lindos hombres que lo miraban interesados. De alguna manera sabía que él atraía la atención de muchos hombres pero no quería hacerlo, ¿estaba engañando a Jace?,¿cómo?, Jace era heterosexual, y hasta donde sabía él, Alec también.
El joven de cabello negro y ojos azules como zafiros logró llegar al callejón. Odiaba sentirse así, incomodo consigo mismo, como si fuese un error, pero no podía corregirlo. Se había obligado tanto a ver con interés a las mujeres, pero no podía enamorarse de ninguna.
- ¿Te vas tan pronto, "ojos bonitos"?.- pregunto una suave voz, una voz de esas que te emocionan y exaltan con solo oírlas, suave pero grave.
Alec quiso no girarse pero aquella voz lo lleno de curiosidad, ¿a quién puede pertenecerle?.
Alec quedo en absoluto silencio al ver al joven de pie tras él, era alto, de rasgos asiáticos que hacían lucir su rostro más hermoso, esbelto pero magro, se notaba pues la playera colorida se encontraba ceñida al cuerpo, un esculpido torso atrajo su mirada más tragando decidió mirar los hermosos ojos verde-dorado, almendrados y atractivos. Su cabello con las puntas y mechones azules lo hacían ver más atractivo.
- Es que es tarde.- murmuró Alec respondiendo a la pregunta de tan atractivo hombre.
- ¿No viniste a divertirte?, parecías un ratoncito aterrado, un colegial que no ha salido del armario.- murmuró burlón más su tono solo calmo a Alec, este volvió a tragar saliva.
- Es que no he salido del armario.- respondió Alec asustado por la verdad dicha a un desconocido.
- ¡Terrible!.- dijo.- Un joven tan naturalmente hermoso sería codiciado por cualquiera, eres el típico, "Por favor que sea gay, por favor que sea gay", y sale con una hermosa chica bronceada para disimular.- respondió burlón el joven inclinándose mas cerca de Alec, con sus largos dedos levanto la barbilla del joven de ojos azules, este se estremeció, acarició sus labios con la punta de sus dedos y le sonrió.
- Soy Alexander Lightwood.- se presentó Alec sintiéndose estúpido, ¿qué pensaba?, la verdad es que el joven de 22 años no pensaba nada, solo en saber el nombre del hombre frente a él.
- Eres muy difícil, ¡eh!, pues bien. Soy Magnus Bane.- dijo con una suave sonrisa. Alec conocía ese nombre, Magnus Bane era un Productor discográfico y Manager muy reconocido, se decía que todo lo que él producía lograba obtener ganancias exorbitantes, Alec jamás lo había visto, no de verdad, por lo cual se tensó.- ¿Así que sigues en el armario?.- le pregunto sacando al joven de su mudez mental y física.
- Es que es muy cómodo.- dijo queriendo sonreír, Magnus lo miro dulcemente y nuevamente acarició su rostro como si fuese un sueño, deslizando los largos dedos por las mejillas, dibujando sus pómulos y los labios.
- De verdad eres hermoso, Alexander.- dijo Magnus inclinándose para besarlo.
Alec jamás había besado a un hombre en su vida, fantaseaba con besar a uno que otro, jamás con besar a Jace. Pero ahora que los labios de Magnus Bane se aferraba a los suyos, primero suaves, después más apasionados. Levanto las manos sosteniéndose de los hombros de Magnus, sus cuerpos cálidos se acercaron más. En un segundo Alec había captado el ritmo de esos labios y con los ojos cerrados se entregaba a aquel beso ininterrumpido. Magnus lo pego contra la pared deslizando hábilmente una pierna entre las piernas de Alec. Froto levemente la rodilla en la entre pierna del joven y este dio un gemido suave; se presionó más fuerte contra él, deslizando las manos por la cintura de Alec. De igual manera, el joven de ojos azules deslizo las manos sobre el marcado estomago de Magnus.
ESTÁS LEYENDO
Mi Hermoso Alec
FanfictionCuando Alec Lightwood, hijo mayor de la familia Conservadora Lightwood, cuyo padre es candidato a gobernador, conoce a Magnus Bane, un productor Discográfico que no solo le ofrece amor sino el mundo a sus pies, todo comienza. Alec se rehúsa a enamo...