Ya habían pasado 5 días desde ese día en el parque, 5 jodidos días en los que no he podido pasar por la panadería, 5 días en los que ni siquiera he salido de mi casa. Todo por él, todo por ese maldito y hermoso beso.
Tenía que admitirlo, tenía que admitir que me gustó...mucho a decir verdad, tenía que admitir que lo extrañaba y también tenía que admitir lo estúpida que había sido al arruinar nuestra amistad al dejar que me besara.
-...Ahora pasamos a la sección de cocina con la especialidad del Chef...-la televisión me sacó de mis pensamientos al encenderse repentinamente, busqué con desesperación el control encontrándolo debajo de mi espalda, inmediatamente: lo apagué.
-Soy una imbécil-me dije a mi misma-No debí haber dejado que eso pasara.
Lo peor es que había dejado que todo esto me consumiera, me había quedado en el sofá en donde estaba ahora los 5 días, sin bañarme, cepillarme los dientes, peinarme, solo me paraba para ir al baño y comer.
Me paré e inmediatamente me dirigí a las escaleras, comencé a subir y decidí que no estaría nada mal un poco de aire fresco, así que fui a la terraza para relajarme un poco, ahí había una mesa acompañada con 2 sillas de madera y una maceta en la esquina con una planta casi muerta por el poco cuidado recibido.
Me senté en una de las sillas y comencé a ver todo lo que había a mi alrededor, desde mi ubicación se podía observar todas las casas de la"Aldea de los Vencedores" pero la única que tenía intención de ver era la de Peeta, justo en ese momento de manera inesperada o"por obra del destino" él decidió salir de su casa, desde mi posición podía ver perfectamente el rubio de su cabello, la claridad de su piel y la calidez de su sonrisa, lo que no podía ver eran sus ojos azules, lo cuál era sinceramente lo que más deseaba ver en el momento, así que decidí inclinarme un poco para ver sus ojos, ya que él tenía la cabeza gacha, pero aún así no lograba verlos, decidí inclinarme un poco más pero seguía sin poder apreciar sus ojos.
《Solo un poco más》-pensé inclinándome por última vez.
Entonces, sin previo aviso, la silla se inclino conmigo ocasionando que me cayera, el acto produjo un sonido estrepitoso ya que junto a mí se cayí la silla, la mesa y lo que se encontraba encima de ella, mientras tanto yo tenía la cara estampada en el suelo, al poder mover la cabeza, pude ver a Peeta viendo fijamente mi terraza con una expresión entre sorprendida y preocupada a la vez.-Hey Katniss-me dijo un poco burlón-¿Qué tal besa el suelo?
-Mejor que tú-dije con una sonrisa
《Qué buena mentira Katniss》-me dijo mi yo interior.
-Nos vemos después-dijo sonriente-O...¿Necesitas ayuda?-dijo con un poco de seriedad.
-No, yo puedo sola-dije con todo mi juego de mesa encima.
-Pues...te veo luego-se despidió Peeta.
《Bueno: Al menos pude ver sus ojos》-intervino mi yo interior.
-Ahora...la pregunta es...¿¡Cómo mierda me voy a sacar esto de encima!?-dije literalmente gritando.
-Con mi ayuda-escuché que dijo una voz familiar, volteé y cabeza y ahogué un grito al toparme con el azul cielo de sus ojos-Sé que tu orgullo no iba a dejar que te ayudara-dijo Peeta empezando a sacar la mesa que aplastaba mis piernas.
-No pregunté por tu ayuda-dije lo más seca posible.
-Como si no te conociera Katniss, eres la persona más terca que conozco-dijo con una sonrisa retirando la silla que mantenía mi cara contra el suelo, después de eso, pude quitarme la otra silla de mi espalda y levantarme por fin.
-Gracias-dije manteniendo mi tono seco, aunque estando frente a él era más difícil de lo creía-Puedes irte.
Dicho esto pude ver como su sonrisa de desvaneció casi instantáneamente, no podía verlo así y mucho menos por mi culpa, así que decidí irme.
-Katniss-dijo agarrándome del brazo impidiéndome salir-No te he visto pasar por la panadería estos días...¿Es por lo que creo?
-No sé a que te refieres-dije aún sin poder verlo a los ojos.
-Katniss: Mírame-dijo levantándome la barbilla en su dirección-¿Es por el beso?
No sabía que responderle, simplemente mi mente se quedo en blanco, mi cuerpo paralizado y mi mirada en sus labios, esos bellos labios, los que enmarcaban su preciosa sonrisa.
Entonces lo impensado en ese momento pasó: Lo besé. Ahí en mi terraza, ahí donde cualquiera que pasara podría vernos, ahí donde caí presa de sus labios.
Lentamente Peeta bajo sus manos hacia mis caderas, rodeándolas con sus brazos, por mi parte, puse mis brazos alrededor de su cuello, como si fuera algo de mi pertenecia, algo mío, desearía que fuera así. Poco a poco fuimos entrando en confianza y el beso comenzó a volverse en algo adictivo, algo que necesitaba, algo bueno, fue entonces que decidí apartarme.
-Peeta, no puedo hacer esto-le dije apartandome poco a poco.
-Katniss-me dijo aún con sus manos aferradas a mis caderas.
-Te voy a tener que pedir que te vayas-le dije seria quitando sus manos de mi cuerpo.
-Te quiero-me dijo mirándome a los ojos.
-Lárgate-dije brusca
-Y sé que sientes lo mismo
-¡Te he dicho que te largues!-grité en un tono que nunca creí que usaría con Peeta.
Él me miró por última vez y con la cabeza gacha salió de la terraza, no me atreví a mover ni un solo músculo hasta que escuché la puerta principal cerrarse. Inmediatamente entré corriendo a la casa, fuí directamente a mi cuarto, abrí y closet y saqué una maleta.
《Tengo que irme, pero ya》
Comenzé a empacar lo necesario como para una semana, si me iba a quedar más podría comprar más ropa donde sea a donde me este yendo, me cambié ya que continuaba en pijama, me puse mis botas marrones, una camiseta negra y unos jeans, no era nada des otro mundo, simplemente tenía que salir, bajé mi maleta al primer piso, la dejé junto a la puerta y antes de sacarla revisé si es que no había ni un rastro de Peeta, lo último que me faltaría sería que é apareciera.
Entonces, salí corriendo de la aldea y me dirijí a la estación de trenes, tenía suerte de que estaba cerca a mi casa, luego me detuve en la puerta de esta y pensé:
《Y ahora...¿A dónde mierda voy a ir?》
Y: Pensé en Gale, en la carta, él siempre me había querido, seguro me escribió eso, que me extrañaba, que quería verme, entonces me adentré en la estación, me acerqué a la boletería y dije:
-Un boleto por favor
-¿Con que destino?-me preguntó la señorita que se encontraba detrás del mostrador.
-El distrito 2
¡Holes Mis bellos tributos!
¿Qué tal todo?¿Ya salieron de vacaciones? Yo sí y estoy demasiado felíz por eso, sé que me demoré muchísimo en escribir pero el instituto de inglés me tenía muy ocupada y aparte, saben que no me gusta escribir cuando no tengo inspiración, en fin: Espero que les guste mucho el cap mis tributos bellos y trataré de subir un cap antes de navidad y si es posible otro antes de fin de año.
PD: TENEMOS 25.6K LECTURAS! Nada de esto sería posible sin ustedes, los amo, gracias por sus lecturas, votos y comentarios <3
Los adora :3
-Mellark:3
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Katniss y Peeta-Te necesito
RomantikKatniss y Peeta han pasado por una terrible guerra llena de muerte, lágrimas y sobretodo dolor, despues de haber pasado esta horrible fase Katniss se hunde en una depresión que solo Peeta puede curar con ese amor que le ha tenido desde que vió por p...