CAPÍTULO 2.

100 9 3
                                    

(Izan en la foto)

Palidecí.
¿Lily acababa de decir Max Brington? No podía ser. La miré con los ojos como platos, Izan se empezó a reír a carcajadas.
- ¿Es coña? Porque no tiene ni puta gracia. - Dije con cara de pocos amigos.
- Bueno chica, pensaba que te lo ibas a tomar mejor. - Respondió Lily, indiferente.
Me levanté, la miré por última vez y empecé a andar hacia la puerta.
Izan paró de reírse, al menos.
- ¿A donde vas? Lydia, no es para tanto, en serio. - Lily parecía empezar a preocuparse.
Me paré en seco.
- ¿Que mi mejor amiga salga con mi ex no es para tanto? ¿En serio? - Esto me estaba superando.
- Perdona, cariño. Tu ex de quinto de primaria. - Respondió Lily con tono de indignación.
- Hasta cuarto de la ESO, unos cinco años, he de decir. -  Izan acababa de intervenir, bueno, por lo menos estaba de mi parte.
- Mira, paso. Mañana hablamos. Estoy cansada y no me apetece discutir ahora. Hasta luego. - Y me fui.
Lily intentó detenerme pero Izan la paró y me alegro de ello, en esos momentos no estaba yo para estas cosas.

Cuando llegué a casa tuve que aguantar una bronca de mi madre por retrasarme, y a continuación una bronca de mi padre por contestar mal a mi madre. Lo que me faltaba.
Y es que esto es lo que más odio de mi familia, mis fallos hasta los enmarcan para que no se les olviden pero los aciertos como que ni existieran, prácticamente. A muchos les gustaría decir que su hija ha sacado un 8 en la Universidad, pues no hay manera. Supongo que será porque siempre he sido de buenas notas, pero joder, me toca las narices.

Esa noche me puse a pensar.
Quizá debería alegrarme por Lily después de todo ¿no? Osea, ella no es de novios y no cree en el amor así que por mucho que diga, si tiene novio por algo será. Desde que después de dos años de relación, su ex novio Will la puso los cuernos con Emily, una "amiga" que teníamos por aquellos tiempos. Una puta, vamos. Tuvimos una charlita con ella, aún me pregunto por qué no la partí la cara. Lily me suplicó que no lo hiciera, supongo que por ella no lo hice.

El caso, Max Brington era mi ex. Pero de eso hacía ya mucho tiempo... Estuvimos varias veces, dejándolo y volviendo, así hasta cuarto de eso que simplemente acabó por acuerdo mutuo, no funcionaba.
Pero aún así fueron cinco años, porque todo ese tiempo me gustó él, hasta la perdimos juntos. Era como el prohibido de mis amigas antes, pero después de tanto tiempo, en fin.
No se que hacer ahora mismo, ¿Lily y Max? ¿En serio? No me lo puedo creer. Tal vez no debería enfadarme y darles mi bendición... Al fin y al cabo yo ya no tengo nada que ver con Max. Porque le he olvidado, creo.

Al día siguiente quedé con Lily por la mañana. En un parque cercano a mi casa, hacía un buen día así que cuando llegué me senté en un banco a esperar.
Poco más de cinco minutos después llegó Lily.
- Lo he estado pensando tía, y tienes razón, si quieres que lo deje con Max sólo dilo. Lo siento. - Me dijo nada más levanté la cabeza.
- No lo sientas, Max está olvidado así que, que seáis felices. - Respondí riendo.
Lily me abrazó mientras me decía al oído cuanto me quería.
- Izan llegará en un rato. - Dije cambiando de tema.
- Yo he quedado con Max, pero espero a que venga Izan para que no te quedes sola.
Asentí con la cabeza y nos pusimos a hablar de Mery y Riven. Mery era una buena amiga nuestra del instituto y lo acababan de dejar, así que quedaríamos con ella en unos días para animarla.

Quince minutos después llegó Izan acompañado de Henry.
- Ey chicas. - Saludó Henry. Era un chico bastante mono, rubio de ojos verdes. Henry se había unido a nuestro grupo de salir hacía poco, ya que había conocido a Izan en la Universidad y estábamos apenas en Noviembre.
Porque sí, no estamos solo Izan, Lily y yo... Osea nosotros pasamos muchísimo tiempo juntos pero cuando salimos, sobre todo los sábados, tenemos un grupo. Gente del instituto y algún amigo de la uni, como Henry.

Fuimos a dar una vuelta y Lily se fue con Max, no la acompañamos demasiado porque tampoco es que me hiciera especial ilusión verle la cara, así que nos separamos de Lily a un par de calles de donde había quedado.

¿En serio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora