¡NEVER SAY NEVER!-Justin Bieber

Capítulo 14-

-No tenía que haberte juzgado, no eres ni egocéntrico, ni engreído. –Sonreí- No eres nada de eso… lo siento.
-No te preocupes. –Juntó nuestras frentes- El pasado, es pasado.
-Ya sé por qué mis amigas están locas por ti. –Reí-
-¿Por qué? –Se acercó más a mí, sentía su respiración, olía a menta-
-Porque eres genial.
-Tú eres genial. –Sonrió-
-¿CÓMO SE SUPONE QUE ME TENGO QUE TOMAR ESTO? –Dijo una voz muy conocida-
-Christian. –Suspiré y solté enseguida a Justin- ¿El qué?
-Los pájaros que hay en el cielo ¡NO TE JODE! –Fulminó con la mirada a Justin- 
-Esto Christian… -Justin se puso delante de mí-
-¿Y por qué te pones así? Solo nos tomábamos fotos.
-¿Fotos? ¿Ahora se toman fotos? Hace menos de 48 horas ella no te soportaba. –Suspiro-
-No me conocía, todos nos equivocamos. No hacíamos nada, y si lo hacíamos no es problema tuyo…punto final. –Justin pasó su mano por mi hombro-
-Me quiero ir a casa. –Dijo Christian mientras nos daba la espalda-
-Vamos. –Suspiré-

Justin fue a tomar la cámara, yo fui caminando al lado de Christian.

-¿Qué es lo que te pasa en realidad? Digo… ¿Qué es lo que te ha molestado?
-Nada, no me ha molestado nada. –Aceleró el paso, yo lo imité- Es solo que ayer casi te tengo que traer a rastras aquí, y hoy esto… -Suspiró-
-Lo juzgue sin saber, tenías razón, es una persona maravillosa. –Sonreí-
-Ya ves tú que bien. –Volvió a acelerar el paso, volví a imitarle- ¿Te importaría no seguirme?
-No te sigo. –Reí- Solo que vamos en la misma dirección.

No me contesto y siguió caminando. Yo lo paré con el brazo.

-No sé qué he hecho, pero no te enfades. –Suspiré-
-No estoy enfadado. 
-No te conozco mucho, pero no sabes mentir. –Reí- No te enfades. –Le di un golpe en el hombro-
-No me enfado.
-¡Christian Jacob Beadles!
-Jajaja, ¿ahora tú eres la adivina? 
-Más o menos. –Sonreí- ¿Un abrazo?
-Claro. –Sonrió y me abrazo, en eso llego Justin-
-Eso está mejor. –Rió-
-Sorry bro. –Le tendió la mano-
-No pasa nada. –Hicieron su saludo-
-¡EI! Algún día me tendrán que enseñar ese saludo. –Les mire a los dos-
-Algún día… -Dijo Christian-
-Idiotas. –Reí- Les quería hacer una carrera, pero sé que les ganaré, además, estoy cansada, alguien que me lleva. –Puse una cara angelical-
-¿Dices que nos ganaras? –Preguntó Justin-
-No lo digo, lo afirmo.
-Retíralo. –Dijo Christian-
-No pienso retirar una cosa que es verdad. –Reí, de repente vi como los dos se acercaban a mí con una cara muy particular- Los veo venir, no se les ocurra. ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHH! –Empecé a correr gritando- ¡ME ACOSAN!
-No corras, no sirve de nada. –Dijo Justin mientras me seguía- Tu por ese lado Christian, yo por este.
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH! Dos contra uno no. –Corrí hasta que vi una señora mayor, me pare al lado de ella- Socorro, ¡ME ACOSAN! 
-¿Quién, quien? –Dijo la señora-
-Esos dos que vienen corriendo. –Dije señalando a Christian y a Justin- No sé qué me quieren hacer, me han perseguido.
-Ven Chloe. –Dijo Justin mientras se acercaba-
-¡NO LA TOQUES PERVERTIDO! ¡LA ESTAN ACOSANDO! –Dijo la señora tomando su bastón-
-¿Qué dice señora? Si es nuestra amiga. –Continuó Christian, la señora me miró-
-¿Mis amigos? ¿Cree que le pediría ayuda si fueran mis amigos? ¡ME ESTAN ACOSANDO! 
-¡PERVERTIDOS! –La señora se levantó y le pegó a Justin con el bastón-
-Esta nos la pagas Chloe. –Dijo Justin, mientras corrían-
-¡NO HUYAN COBARDES! –Dijo la señora con el bastón aún-
-Muchas gracias, me estaban acosando. –Sonreí-
-De nada, y cuidado con estos, que son pequeños pero son unos pervertidos.
-Lo tendré, gracias.
-Por cierto, le di bien al rubiecito ¿no?
-Jajajajaja, sí. Da igual, eso le pasa por pervertido. Ahora me tengo que ir. Adiós y gracias. 

Me aleje de la señora y empecé a reír, eso para que aprendan a no volver a meterse conmigo, por el camino al coche me dio un ataque de risa, la hostia que le había metido la señora a Justin, Jajajajaja, estaba riendo con lágrimas hasta que llegue al coche. Me borre las lágrimas y les vi a los dos, esperándome delante del coche, con las manos cruzadas.

-¿Encima de pervertidos, mafiosos? –Volví a reír, es que tenían unas pintas, apoyados al coche con los brazos cruzados y con cara sería-
-Sube al coche. –Dijo Christian mientras me abría la puerta-
-No voy a subir. –Continué-
-¿Y cómo iras a casa? 
-Tengo piernas. –Acto seguido me puse a caminar-
-¿No somos unos pervertidos? Ahora te vamos a secuestrar. –Dijo Justin agarrándome del brazo-
-No te atreves.
-Mírame. –Me agarro por las piernas y me cargo sobre su espalda-
-¡PERVERTIDO! –Grité mientras le daba golpes en la espalda-
-Cállate. –Dijo mientras me metía en el coche, él también entro y cerró la puerta, Christian ya estaba dentro solo que por la parte de delante-
-¡SOCORRO! –Grite-
-Cállate. –Repitió Justin-
-¿Y si no lo hago? 
-Te obligo. –Contestó-
-¿Y cómo harás eso exactamente?
-No te gustaría saberlo. –Me guiño el ojo- No me obligues a hacerlo.
-¿Así que somos unos pervertidos? –Christian se giró y tenía unas gafas grandes y negras, ponía cara sería-
-JAJAJAJAJA.
-¿Dónde está la gracia?
-En tu cara. –Volví a reír-
-A ver si te hará gracia después de que acabamos contigo. –Christian intentaba ponerse serio pero empezó a reír- Lo siento bro, no puedo con esto.
-¡Idiota! –Contestó Justin- Ahora que la teníamos.
-Jajajajaja, tontos Jajaja. 
-Enserio. –Continuó Christian- ¿Por qué lo has hecho?
-Por qué era dos contra una. –Reí-
-La verdad ha tenido su gracia. –Dijo Christian riendo- Ha sido mortal lo del bastonazo de la señora.
-Aun me duele. –Contestó Bieber-
-¿Dónde te ha dado? –Señalo una parte media de su espalda- Déjame ver. –Le levante la camiseta- ¡DIOS! Esta morado. Lo siento.
-Era una broma. –Sonrió- No lo sientas.
-No enserio… -Suspiré- Lo siento. ¿Cómo te puedo compensar? –Sonreí-
-Con un abrazo me basta.
-Aaw –Le abracé, me contestó de una manera muy tierna- 
-Bueno, ¿vamos? –Preguntó Christian-
-Sí. –Justin salió de la parte de atrás y se puso delante-
-Por cierto Christian. ¿Sandi y Wiil? –Pregunté-
-Ah, se me olvido decirte. Se han tenido que ir… ya sabes… trabajo.
-¿QUE? ¿Cómo se han podido ir? –Suspiré-
-Me dijeron que me despida por ellos.
-No es lo mismo. –Continué-
-Si quieres esta noche los llamamos. –Sonrió-
-Vale. –Le devolví la sonrisa-

Justin arrancó, llegamos a casa.

-Voy a ducharme. Intentaré no tardar. –Reí-

Me duche, me puse unos shorts tie dye y una camiseta de tirantes rosa, baje las escaleras, Justin y Christian estaban en la cocina, estaban hablando, oí mi nombre, por eso decidí escuchar.

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Me aman, lo se. ah

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