7. Comportamientos extraños

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- ¿En serio tienes que venir a visitarme la semana que viene?

- Podrías alegrarte un poquito más Eneko... Es que Albert se han empeñado en hacer una escapada romántica a Paris y no voy a ir allí y no visitarte.

- Pero es que la semana que viene me viene mal...

- ¿Por qué?

- Pues... porque es el cumpleaños de Alberto y quería prepararle una sorpresa.

- ¡Coño! Pues mira mejor, así de paso nos pegamos la fiesta.

- Ni de coña te invito a su cumpleaños.

- Uy, ¿por qué?

- Porque eres un bocazas y seguro que le acabas contando mierdas sobre mí...

*risas al otro lado del teléfono*

- Pues la verdad es que sí que pasaría eso pero o me invitas o me presento de improvisto y te jodo la fiesta, tú verás...

- Te odio tanto... ¿Por qué decidiría yo un día ser amigo tuyo?

- Porque soy el mejor amigo del mundo canijo.

- Ya, ya...

- Bueno, entonces me paso a verte con Albert y lo conoces y de paso yo conozco a tu querido Alberto, ¿vale?

- Que remedio...

- Pues ya me dices el sitio y eso, ahora te dejo que tengo que currar, adiós pequeñajo.

- Ala, que te cunda imbécil.

- Cuanto amor...

Después de colgar, Iñigo salió para ver si había alguien en la tienda pero al comprobar que no era así cogió su portátil y lo abrió, estaba abierta una pestaña con su Gmail, quería escribirle un mensaje Edu, el hermano de Alberto, para que viniera por sorpresa a su cumpleaños, pero estaba muy nervioso y no le salían las palabras. No sabía como se lo iba a tomar, sabía que Alberto le había contado lo suyo pero no se veía capaz de hablar con su cuñado por primera vez aunque fuera solo a través de un mensaje en el ordenador, pero tenía que hacerlo, sabía que Alberto lo estaba pasando mal por el hecho de pensar que iba a tener a su familia lejos en un día tan importante, y también sabía que, aunque le iba a comprar un regalo material, aquello sería un detallazo que Alberto no dudaría en agradecer. Se armó de valor y al final empezó a teclear en su ordenador.

Hola Eduardo,

Soy Iñigo, el-

Un momento, ¿pongo directamente que soy su novio o mejor que soy un amigo? Es que lo primero suena un poco fuerte, igual se me asusta el hombre... Voy a poner amigo y ya está.

Hola Eduardo,

Soy Iñigo, el amigo que ha hecho tu hermano Alberto aquí en París. Verás había pensado que como la semana que viene es su cumpleaños, y está bastante disgustado por no poder pasarlo con los suyo,s que por lo menos tú te podrías venir a la fiesta sorpresa que le quiero organizar, si quieres te puedes traer a algún amigo suyo o algo, lo que tú veas. Avísame lo antes posible si vas a venir para organizarme.

Saludos.

Bueno pues esto ya está, no ha sido para tanto, a ver si no tarda mucho en contestar...

Y efectivamente no tardó mucho en responder, de hecho lo hizo al minuto porque estaba aburrido en las oficinas del ayuntamiento de Madrid, la respuesta de breve pero clara, estaba encantado de ir y ya lo tenía pensado de antes pero al saber de la fiesta iba a ir seguro sí o sí. Iñigo se alegró un montón al oír aquello, sabía que Alberto no se lo esperaba y que le iba a hacer mucha ilusión.

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