Me gustas

¡Respeta mi privacidad mujer!

Lily:

James me había mentido.
Snape me había dicho algo que no era de mi agrado, que obviamente lo involucraba a él y los Merodeadores.
Y no sabia si era cierto.

Ahora estaba frente a mi novio (sí, me gusta como se oye "mi novio") y el se veía espantado, tal vez aliviado y preocupado. Pero fuera de eso, se veía guapísimo.

Sirius se sobresaltó al verme y me reclamó:

—¡Toca antes de entrar! ¡Respeta mi privacidad mujer!
Yo lo ignore, y le rodé los ojos.

—James, necesito hablar contigo.

Remus estaba aliviado, el había estado presente cuando Severus me había hablado y al oírlo pues había reaccionado de manera incómoda.

James en cambio estaba tenso y Sirius ni que decir, a el le importaba menos.

—Di lo que tengas que decir, presiento que todos los de esta habitación lo sabemos.

Bien, ellos ya lo sabían, y eso me dejaba con la certeza de que Snape no me había mentido.
Al contrario.

—Snape dijo -comenzó Remus, pero James lo interrumpió.

—¡Ya se lo que él  dijo! -repuso James, -¿tu le crees Lily?

Me miró a los ojos, preguntándome cómo era que le creía a Severus y no a él.

—Me ha hecho pensar mucho James. -eso fue lo único que pude decir.

—Entonces eso solo significa una cosa.

—No me tienes que hacer una escenita James, ni siquiera te he dicho lo que me dijo.

—¡Exacto! -replicó Sirius. Ya me había olvidado de su presencia en la habitación.

James lo fulminó de una mirada y el pareció entender.

—Severus me dijo que ustedes ocultan algo -James parecía debatido, no sabría leer su expresión- y no se que pensar, porque al parecer Remus no negó nada, así que dime si es cierto, solo quiero saber eso, quiero que me tengas confianza James.

Al escuchar su nombre saliendo de mi boca, se sobresaltó.
Primero vio hacia Remus, luego a Sirius, se encogió de hombros y me dijo:

—Lily, toma asiento.

—Pero... -comencé a protestar.

—Haz lo que él te dice -habló Lupin.

Me senté, a regañadientes.

James estaba un poco inquieto y no sabia como comenzar.

—Esto es muy difícil para mi, es un gran secreto y creeme, tu relación con nosotros cambiará desde este momento.

—James...

—No me interrumpas Lily. Desde hace dos años, nosotros "merodeamos" por los pasillos de Hogwarts, creo que eso ya lo sabia, pero no sabes el porqué. Bueno, debido a que cada cierto tiempo vamos en auxilio de nuestro amigo.

—¿Quién? -pregunté, sabia que se pasaban explorando cada rincón del castillo pero creí que era por arrogancia.

James le sonrió a Remus como diciéndole que continuara y así lo hizo.

—Vamos en auxilio de Remus. Él es un hombre lobo. Un licántropo.

—¿QUÉ?

Eso no era cierto.

Remus no podría ser eso.

Si se ausentaba era por problemas familiares, no porque se convertía en algo...

—Sé que cuesta creerlo Lily, pero sí, desde pequeño un licántropo me mordió y cada luna llena ocurre -Remus me miro a los ojos.

—Nosotros lo averiguamos cuando estábamos en tercero, y desde ese entonces no dejamos a Lupin solo. Lo apoyamos, el necesitaba de amigos y era muy amable con nosotros. Era uno de los nuestros, no importaba su apariencia, si no como salia adelante cada vez que se convertía.
La razón por la que Snape te lo dijo, o una parte, es que Sirius le revelo lo que le pasaba y como verlo en "acción lobuna". Después de que aceptarás salir conmigo, era el momento en que. Lunático se convertiría, por eso no nos viste en la noche.
Snape fue a ver que tramabamos y cuando lo vio a él quiso regar el chisme, así que fue con Dumbledore y al día siguiente los busco a los dos.Y aquí estas.

James me miró y pude ver que decía la verdad, aunque me asustaba saber que uno de mis mejores amigos era un hombre lobo, la confianza de poder saberlo y en como me entero por la voz de James, me hacen sentir mas segura.

—No debes tener miedo por él -repuso Sirius.

—No le temo a Remus, ya me aclararon que pasó con Severus, pero ¿como se encontraban allí?

James tragó saliva, ahora si estaba en un aprieto.

—Eso si que es secreto, Lily, si te dijera tendrías que hacer el Juramento Inquebrantable -James me miro serio.

—Quiero saber cómo fue que los encontró Snape.

Y me dijo: "Lily, nosotros tres somos Animagos".
Literal. Así lo dijo. Y no hice un Juramento Inquebrantable para saberlo.

Sí, me sorprendió, y he allí me llegó la iluminación de sus nombres. Lunático, Canuto, Colagusano y Cornamenta, los Merodeadores no eran más que mejores amigos que se protegían unos a otros.
Y eso era lo bonito de su amistad.