Me gustas

La risa te hará bien, Evans

Lily

Nos dirigíamos a clase de Pociones, al salir de la bibloteca noté que Joan, Annie, Sirius y James estaban más callados de lo habitual, lo cuál era raro.

-¿Qué le pasa a ese cuarteto? - le dije a Remus mientras él abría la puerta y me dejaba pasar.

-No lo sé, tal vez pensaron que estando en la bibloteca nos olvidaríamos de pociones -me guiñó el ojo.

-Puede ser -murmuré.

El profesor Slughorn entró a la clase y nos miro fijamente.

-Bienvenidos de nuevo -dijo -, hace seis años que los conocí y aquí estan -fingió secarse una lagrima falsa - en su ultimo año, aprovechenlo al maximo chicos. Me gustaría decir que las cosas siguen como el curso pasado, pero no - me miró- ahora modificaré mi sistema. Los trabajos se harán en parejas, yo las asignaré -alzó la voz para silenciar los murmullos que se generaron - y se sentarán en el lugar asignado. Comencemos: Jackson y Black, Lupin y Robbinson, Evans y Potter,...

Mire a Remus, ¿es en serio? Mi vida será un desastre, ya que el es malo en pociones y sin embargo nos hacen pareja para TODO el curso.

*

Bien, debería alegrarme, pero no puedo, justamente Potter y yo somos compañeros y nuestro primer trabajo juntos no se podra hacer porque el tiene que entrenar Quidditch, y como es el capitán tiene que entrenar duro y hasta el cansancio... Pero eso no es justo, todo en su vida gira alrededor de, ¿Quidditch?

Annie me dijo que lo dejara entrenar, pero el trabajo se entrega al finalizar la semana y no me gusta dejar las cosas a lo último.

-Podría ser peor y lo sabes -reprochó Annie - al menos tienes una excusa para ir a verlo.

-Si claro, y la perfecta excusa sería 'James te necesito ¿porque no puedo prender mi caldero'?

Joan me miró y alzó un ceja, y las tres nos comenzamos a reir.

***

-Lily, tienes que comer -me regañó Annie.

-No me apetece -dije por enesíma vez.

-Si James te ve asi nos va a matar.

Ellas son unas exageradas. Tomé una tostada y le di un mordisco.

-Así esta mejor -repitieron al unísono.

Rodé los ojos. Y para mi mala suerte, había enfermado, y James tuvo que hacer el trabajo de Pociones, lo cuál hizo muy bien, ya que el profesor lo felicitó y después de eso... Yo enfermé, ¡Por Merlín!

-Hola chicas -saludó Sirius.

Yo solo asentí. Annie saludó a Sirius muy entusiasmada, y Joan me alzó una ceja, como diciendo '¿y a ésta qué?' , a lo cuál yo solo me reí.

-La risa te hará bien, Evans -yo alcé la mirada, era James -. Y mientras tanto, deberías dejar de comerme con lo ojos -me sonrió mostrando sus dientes blancos y perfectos.

-Eres un idiota - desvié la mirada, viendo a Remus con Peter.

-Tal vez -respondió -, pero soy el idiota al que quieras.

Oh no, el no dijo eso.

-Se siente la tención - le susurró Sirius a Annie.

-¿Cómo puedes estar seguro? - miré a lo ojos a James.

-Es obvio, siempre te he gustado, ¿no es así? -alzó una ceja.

Negué con la cabeza y sonreí, sentía mis mejillas enrojecer.
Me levante de la mesa y sali de Gran Comedor, no sin antes escuchar que James decía:

-Espera Lily, lo siento.

Pero ya era demasiado tarde, ya había salido de la habitación.

***
Me senté junto a un árbol, cerca del lago, mi lugar favorito cuando me sacaban de quicio mis amigas, pero ahora era por un chico.
La puesta de sol se veía muy lejos, asi que comencé romper un ramita de un arbol, tal como lo habí hecho una tarde, años atrás.
No me percaté de su precencia hasta que habló.

-¿Porqué tan sola, Lily?

-Eso no te incumbe. -respondí cortante, precisamente cuando no tenía humor de hablar con nadie.

-Estabien, me quedaré aquí hasta que sueltes tus lagrimas.

-Nunca te cansas de ser así, ¿verdad, Sev?

-Te conozco bien Lily, y estuve en el comedor, así que no puedes fingir conmigo.

Se oía tan sincero...

-Y tú conmigo sí, ¿no Sev? Porqué si no tengo mala memoria, hace dos años que me llamaste...

-¡NO! -me interrumpió - ya se que lo que te dije Lily, y no sabes cómo me arrepiento...

-Bueno, fue un gran arrepentimiento hechizar a Frank, ¿no?

-Lily, yo...

-Tú nada, me mentiste Sev, acepta tus errores, -lo miré a los ojos, estaba frente a mi, con el mismo aspecto inleíble de simpre -, si pudiese cambiar algo del pasado, sería a tí.

-Y a Potter no, ¿verdad? -dijo dolido.

-Ahora que lo mencionas, también, no sabes como me han hecho mi vida de cuadritos todos estos años.

Severus estaba viendome con un sonrisa maliciosa, como si algo que estaba fuera de mi campo de visión no viera.

-Pues vaya que ahora tu vida si cambiará, iniciando por Potter -respondió.

Me dí la vuelta y ví a James alejandóse del lago.

Oh no, nos escuchó.