Maldito amor.

"Algunos infinitos son mas grandes que otros infinitos"

Capítulo 8.

"Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos".

¿Perdón? ¿Había escuchado bien?
¿Me llamo, her...?

-¿Có-cómo? -tartamudee.

-Pues sólo me senté aquí afuera, así te... -y lo interrumpí.

-No, no, no, no, no. -negué. -No me estoy refiriendo a eso.

-¿Entonces a que? Hermosa-me dijo guiñandome el ojo haciendo énfasis en "hermosa".

-¿Po-por que me llamas así?-«sigue tartamudeando Melissa, sigue mostrando tus jodidos nervios»

Es que es malditamente inevitable.
Debería estar prohibido mirar a los ojos a Mac, al menos para mi debería estarlo, ¡me descontrola su maldita mirada!

-¿Qué no es obvio? Hoy te ves hermosa, y no soy el único que piensa así, te queda genial lo que te has hecho en el cabello.

¿Ya les mención que me decolore el cabello? Mi madre me obligo a hacerme mechas californianas.
Ella y sus malditas ideas de volverme más femenina.

-¿No-no eres el único? -y ahí vienen de nuevo los nervio.

-Si, estuve hablando hoy con el equipo de fútbol, varios chicos me preguntaron por ti. -y me sonroje. -Pero les dije que tenías novio.

-¿QUÉ!? -gruñí.

-Relajate, son unos idiotas. Cuando alguno que valga la pena me pregunte por ti, le diré que estas disponible. Sólo estoy cuidándote, amiga. -y me rodeo el cuello con el brazo insitandome a caminar a su lado hasta su auto.

Después de esa rara caminata junto a Mac, el rompió el silencio.

-¿Irás conmigo al cine esta noche?

-¿Por no me dijiste que no eras vegetariano? -bien jugado, Melissa.

-Supuse que te sentirías rara viéndome comer carne frente a ti.

-Eso es ridículo. -reí.

-Aún no has contesto mi pregunta. -y ahí va de nuevo guiñandome el ojo, voy a coserle los párpados a la cara.

-No lo creo. -y me soltó del cuello, pude notar como su brazo se tensó.

-¿Por qué? Te morías de ganas por ver esa película.

-Pues si, pero es muy tarde y mi madre no me dejaría ir sola. Espera... -al fin reaccioné- ¿cómo sabes que me moría por ver esa película?

-¿Qué? Eres mi mejor amiga, te sigo en twitter.

¿Mejor amiga?

-Oye, lo siento, pero convencer a mi mama de dejarme salir de noche en días de escuela es como pedirle agua al desierto.

-¿Y si yo se lo pido?

-¿Estas loco? ¿A media noche? ¿Salir tu y yo? Mi madre tiene la mente retorcida, jamás se tragara que iremos al cine, pensara que estamos haciendo otra cosa.

-¿Cómo que? -se acercó más a mi con intenciones retorcidas, mirándome fijamente a los ojos, dios estaba tan sonrojada.
De repente me soltó un beso en la mejilla y lo empuje hacia atrás.

-¡MAC!

-¿Qué? -sonrió- ¿Te pone nerviosa? -guiño el ojo.

-¡Si!

-¿Qué? ¿Esto? -y comenzó a besarme las mejillas y la frente muy rápido, hasta que lo aparte de mi con la cara toda sonrojada mientras el reía.