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Capítulo 18: "La fiesta"

Ya dos meses desde que mis amigos se enteraron que existía el suicidio.

Tenemos una fiesta esta noche en un boliche todos los de mi curso festejando el día de la primavera y yo me reúno para hacer una previa con mis mejores amigas.

Llegan de a una a casa; primero Caroline (Car) con su bellísimo pelo largo castaño hecho una coleta, un vestido negro con encaje blanco, unos zapatos negros con plataforma y joyería negra; luego Amber (Amy) con un vestido rosa con encaje y zapatos blancos chatos y también con joyería blanca. Ella llegó acompañada de Sophie (Soo) con un vestido dorado de brillos dorados, tacones blancos y joyería dorada/plateada. Celia no quiso venir pues me parece que se ha enojado conmigo.

Yo vestía demasiado simple. Traía puesto vestido negro que traía un collar de diamantes y zapatos negros tipo sandalias con plataforma, sin ninguna joyería en especial solo aros con diamantes.

Y Mar, pues Mar ya era un caso especial, era la más hermosa de todas porque tenía puesto un vestido rosa ajustado luciendo su figura que detrás salía una cola larguísima y tacones rosados plastificados, también lleva puros rodetes chiquitos en la cabeza y una mini corona combinada de collares, aros y pulseras.

Habla Car

Med estaba hermosa a pesar de estar simple, sería sin duda la reina, ella creo que no está enterada de la reina de la primavera pero de seguro gana, yo la votaré.

Al momento de ver a Mar, me quedé helada, su vestido no me gustaba, para nada le quedaba bien, ¿A quién le habrá pedido consejo de como vestir? Pues ella había sido modelo y creo que debería estar hermosa.

Habla Amber

Más hermosa no podía estar Mar, estupenda figura tenía y ese vestido le favorecía al 100%

Med estaba demasiado simple, si las comparamos Mar le gana por 99% a ella. 99% solo porque me encanta el collar y los aros que traía Med.

Habla Sophie

Me sentía simple al lado de Mar y muy cargada al lado de Med, con Amber quedamos más o menos iguales y Med con Car parecen más parecidas que las mejores amigas muy juntas de Mar y Med.

Habla Mar

Mas cargada no podía estar, parecía alta princesa con Joyería, vestido cargado, zapatos de diseñador y bueno.

Quiero ver la impresión de todos al ver a las otras simples y a mi así de pesada.

-¿Vamos?

-Vale- dijo Med y salimos todas.

Habla Med

¿Porqué Mar no me pidió algún consejo? Yo soy buena para ayudarla, igual no se pero siento que me dejará de lado al llegar allá.

Salimos todas en mi auto porque según ellas parecía una limusina. Si, era grande pero tampoco para exagerar.

Ir en mi auto explicaba que yo tenía que manejar y era lo que más odiaba, prefería ir de acompañante, mirar hacia la ventana y pensar en cualquier otra cosa que no sea el camino.

Llegamos, no quedaba tan lejos tampoco. Todas bajaron corriendo y se fueron y yo como estúpida bajo del auto y me choco con Santiago.

-Hola, perdón perdón perdón.

-Jaja, hola no importa, me encanta chocar contigo- dijo esto y me sonroje cual tomate-¿Quieres entrar conmigo?

-Está bien.

Cierro el auto y entro con Santiago agarrada del brazo y por un momento ya en había olvidado de Jonatán y de la lista.

Al ver a Jona solté a Santiago y fui corriendo a abrazarlo y lo noté muy distinto. Me había pasado todos los santos días pensando en este momento, y en la lista, pero más en este momento y pensé que iba a ser algo mejor que esto y veo que otra vez me he equivocado.

Tomamos, bailamos, payaseamos, reímos, estaba todo perfecto y yo dejé de pensar en todo lo que me rodeaba pero así parecía más solitaria que cualquier otra cosa.

Obvio, no faltaba nombrar a las estúpidas, digo estupendas "Girls". Mucha pero mucha paquetería eran, vestidos de princesas mimadas hechos por diseñador, los tacones más altos que puedas haber visto y demás, mucho más. Ganas de vomitar me daban de tan solo pensar en ellas. Lo único que querían era llamar la atención de todos los chicos pero... Cada chico había ido con su princesa. Ellas desesperadas buscando alguien con quien bailar y yo me les cagaba de risa casi en la cara, no paraban de mirarme con bronca pues porque yo tenía a dos chicos, Santiago y Jonatán.

¡Adoro envidiar a la gente!