Capítulo 30: "Me duele"

10 0 0
                                    

No me lo podía creer pues nunca había visto por aquí a este chico sin embargo lo abracé como si lo conociera desde siempre.

Mientras lo abrazaba una voz en mi cabeza me despertó de mis pensamientos, era Facundo que me volvía a hablar después de mucho.

-Hola Med, muy lindo tu amiguito nuevo ¿no?

-¿Fuiste tú?

-¿No me agradecerás?

-¡Pues no! ¡Claro que no!

Llegando a la realidad me doy cuenta de que el chico me miraba con cara rara por hablar sola.

-Soy rara pero tampoco para mirarme así-y nos echamos a reír.

Lo invité a entrar, nos fuimos a mi habitación y empezamos a conocernos.

En un momento siento como mi celular vibra y se que es la hora en la que tengo que cocinar, no quería echar al muchacho de mi casa así que lo invité a comer y ahora tendría que cocinar para ambos. Para mi suerte él me ayudó a cocinar pizza. Terminamos llenos de harina, pero con la comida hecha y en el horno.

Nunca me había divertido tanto con alguien si no fuese gracias a este chico.

Nos fuimos a bañar pues teníamos que estar limpios. Joa fue el primero en entrar y cuando ni bien salió entré yo. Al momento de salir voy comúnmente a mi pieza a cambiarme y ahí estaba él desnudo tirado en la cama masturbándose. Me dio tanto asco que cerré la puerta y me fui a la habitación de mis padres donde capaz podría encontrar ropa que me quedara, pero al momento de entrar como iba a cerrar la puerta algo me detiene...

-¡Joa! ¿Que haces? ¡Por favor tapate!

Me abrazó, me sacó la toalla que tenía puesta y me tiró en la cama, lloré, grité pero al parecer nadie me escuchaba, él como no quería seguirme escuchando me tapó la boca con una remera y me ató a la cama con  un montón de remeras más, no podía dejar de llorar y no porque éste me quisiera violar, si no porque Facundo me lo ha traído.

Ese extraño me empezó a manosear y mientras lo hacia yo recordaba el día en el que tuve mi primera vez con Santiago. Después de tanto manoseo sentía como tenía mis partes todas raspadas y ahí fue cuando vino lo peor que se puedan imaginar, eso dolió demasiado y sé que me dejará una marca para toda la vida.

Horas después él me desata, me pide perdón y se va, pero ¡¿Como puede pedir perdón de haber hecho semejante cosa?! Me enoja que algunos chicos sean tan estúpidos.

Me dolía todo, no podía ni caminar, rozar mis piernas era como si me rasgara, se que no lo entenderán porque no pasaron por esto, pero fue feo.

Ya no quería comer, no tenía apetito, me había pasado algo realmente malo y espero no recibir algo malo de esto...¡No quiero quedar embarazada! ¡No volveré a confiar más en ninguna persona nunca! Me iré, si, lo haré, no quiero seguir sufriendo en este lugar de mierda, espero Santiago lo entienda, mañana en el colegio le hablaré, quiero decirle todo en persona, quiero ver su reacción al enterarse.


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 04, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

SueltateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora