Umbrella [Yaoi]

4. La Sombrilla de Colores

Como suaves murmullos en el oído, el viento movía mis ropas, cabello y sombrilla. Esta lloviendo. A lo lejos donde los cielo se desangran en la tierra. Como si el cielo acompañara mis penas.

Estaba parado enfrente de la tumba de mi padre, casi no podía ver por la lluvia y mis lágrimas que se juntaban cada que caían a éste mundo terrenal.
No se encontraba nadie a mi lado. Estaba solo.
No... Espera, te tengo a ti. A ti que solo existes en mi cabeza.

Siempre estaré aquí, para ti, a tu lado apoyándote.
Cambia conmigo, yo cargaré con tu dolor.

No, no lo haré, esa no es la solución, dejaré de huir.

Siempre has sido más débil que yo. Hazlo. Vamos. Ahora.

No... ¡No!...

- ¿Estas bien?- Hablaron a mi lado tomándome del hombro. Era un niño con una sombrilla de colores, brillante y grande.

- No...- Susurré en lágrimas.

- Tranquilo, estoy contigo, te ayudaré a sanar tu do...

(Jake)

Un grito. Alguien grito. ¿Fui yo? No. Fué... Jack.
Me levanté de un salto y corrí hacia su cama al otro lado del cuarto. Estaba asustado, sudando y jadeando.

- Oye... Oye, tranquilo, es sólo un sueño. ¿Ya?- Le tome de la mano para tranquilizarlo, como solía hacer.
No me respondió, sólo asintió y se paro para ir al baño.

Hace tiempo que no sucedía esto ¿que habrá sido?
Ya le preguntaré luego, ahora no es el momento.

Pfff... Ya no tengo sueño.

Tome el reloj de Jack 9:23 a.m aún es temprano es Sábado, no hay clases y hoy es "la" fiesta.  Genial.

Dejé el reloj de donde lo tomé y me fui a por mi celular, lo tomé y le marqué a Sam. Tardó en contestar pero al final lo hizo.

- Jaky, cariño ¿que sucede?- Descolgó el celular con su característico buen humor. Maldigo el día en que le escucho ese apodo a Jack, desgraciado.

- Buen día ¿Ya sabes que usaras para la fiesta?- Haría planes con ella si no lo tiene. No me molesta ir de compras.

- ¡No! Estaba planeando ir después de terminar de hacer ejercicio ¿Quieres venir conmigo?- Cambio su tono a uno mas infantil.  Siempre hace eso. ¿Siempre había sido tan molesto?

- Claro. Te recojo a las 12 ¿Vale?- Quede con ella de mala gana. Que raro, nunca me ha molestado ir de compras con ella de hecho me divierto, eso no fué lo que me irritó ¿fué el tono que utilizó para pedírmelo? No creo... Siempre lo ha hecho ¿porque ahora fué diferente?

Sin darle mas vueltas al asunto, me levanté de la cama volviendo hacia la puerta de baño de la cual salía un Jack mas relajado, se bañó ¿tanto tiempo me tarde hablando? No, él se bañó rápido. 

- ¿Quedaste con Sam?- Preguntó para evitar el tema de haces unos minutos. Me dirigí a la regadera y dejé correr el agua.

-Si, la recogeré más tarde. Que hay de ti ¿Irás algún lado antes de ir a la fiesta?- Le seguí el juego. Si aún no me que quiere decir, esta bien. Me desvestí y me metí bajo el chorro de agua.

- Estaba planeando ir con Uriel y planear lo que haremos con los chicos.- Dibujó una sonrisa maliciosa en su rostro de porcelana.

- Ahh... ¿Otra vez no quiere ir?- Ese chico es un híbrido, es popular, mujeriego, carismático, genial, cool, buena onda, etc... Y el mejor amigo de mi hermano, pero no le agradan las fiestas. Es... extraño.

- No, pero ya me encargo yo.- Rió por lo bajo, supongo que fue solo de imaginar sus métodos para hacer que vaya.

Se siguió vistiendo y yo salí de la regadera encontrándome con Jack totalmente vestido y arreglado, estaba desenredando su cabello y peinando lo en una coleta. Hace tiempo que no se peina así, definitivamente algo a cambiado y me asusta saber si fue para bien o para mal.

Si no fuera por su cuerpo de Dios Griego, el peinado, cabello largo, teñido de las puntas azules y de espaldas, diría que es mujer. Jajaja creo que va lo mismo para mi. Que va. Estoy bien bueno, tengo a todas las chicas de Instituto a mis pies, claro, igual mi hermano. Somos los muy conocidos hermanos gemelos King, a pesar de mi hermano ser bisexual no le quita puntos, al contrario se los da con los chicos también, aun que ambos somos atractivos y populares, tanto con chicos y con chicas yo nunca que me he sentido atraído por un tío.

Tragándome todo el miedo, me lancé a preguntarle.- ¿A pasado algo y no me has querido decir? ¿Volviste a soñar con ese día, verdad?- Pregunté sin mas. Tardó unos segundos en responder.

- Yo... Y-yo... No fué nada, ya lo resolveré. No te preocupes.- Empezó a caminar hacia la salida del cuarto.

- Sabes que te apoyaré en todo ¿es que ya no confías en mi?- Le intercepte antes de que saliera.

- Ja... No me chantajes, Jake.- Fingió una sonrisa, se le veía ansioso por deshacerse de mi.- Es sólo que... Ayer creo que conocí a alguien muy importante para mi.- Termino de decir con una sonrisa triste.

- ¿Es él? ¿El crió de aquella vez?- Asintió.- ¿Entonces porque esa sonrisa triste? ¿No deberías estar felices de por fin saber quien es?- 

- Creo que le he herido.- Tenía la mirada vacía en el suelo. Yo intentaba de hacer que me mirara a los ojos, no lo logre. Damn it.

- Resolveremos esto juntos, ¿somos King?- Le recordé la frase que siempre usaba papá para animarnos. Le extendí la mano en un saludo de hermandad.

- Claro que si, hermano.- Aceptó mi saludo estrechando su mano con la mía. Se animó.

Soy el mejor hermano del mundo, logré ayudar a mi hermano, logré que me dijera sus problemas y lo animé.

Después de la platica sentimental, dejé que se fuera no sin antes molestarle un poco para hacer que sonría. Con todo esto tenia miedo de que cambiara con su alterego, él nunca se hubiera agarrado el cabello así. Nosotros nunca usamos una media coleta floja en la nuca, siempre dejamos caer nuestro cabello por sobre los hombros, ni en temporadas de calor lo amarrábamos por completo. 

Al menos irá con Uriel, si algo pasa él sabrá que hacer. No sería la primera vez que le toca esa situación. Por precaución, llame el número de Uriel.

- ¿Si? Jake.- Descolgó el móvil al 3er timbre.

- Hey, lo siento no tengo tiempo de explicar ¿Quedaste con Jack, no?.- Iré directo al grano. La casa de Uriel esta a 40 minutos y si maneja mi hermano, esta a 15.

- Si, saldremos al centro comercial ¿Pasa algo?- Le noto preocupado. Creo que lo preocupe de más. Oops.

- No, tranquilo es solo que... Aghh... Se despertó gritando de nuevo, otra vez soñó con él.- Mi voz sonó cansada y si que lo estaba.

- Entiendo, ¿cambío con...?- 

- No, aun no, es por eso que te marco, te pido por favor que le cuides y que no haga rabietas, no se que tan inestable se encuentra.- Le corte apresurado,

- No te preocupes, estará bien.- Me aseguro. Bien confió en él. Después de hacer que casi lo firme con sangre colgó antes.

Miré el reloj faltaban 20 minutos para las 11. Y yo seguía en pelotas. No he desayunado y tengo hambre. Comencé a vestirme para después bajar a desayunar algo con Perriot.