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Yoongi respiró pesadamente, mientras que sus descalzos pies eran arrastrados por el brilloso piso de aquel amplio pasillo. Sus pasos se podían escuchar con claridad, ya que luego de unos segundos Min decidió apresurar su paso, permitiendo el fuerte choque de la planta de sus pies contra la cerámica. Su destino era obvio: la habitación de Park Ji Min. Finalmente la noche había caído, permitiendo al chico de cabellos ahora menta llevar a cabo su plan.

En sus labios se encontraba una amplia y pícara sonrisa. Sin duda alguna no podía esperar ni un segundo más, deseaba a su pequeño entre sus piernas, tomando su erecto miembro entre sus pequeñas manos, empezando a mover estas en pequeños círculos de arriba a abajo, mientras que en su tierno rostro un perfecto gesto de excitación se hacía cada vez más y más presente. Pronto unas inusuales palpitaciones en la parte baja de Yoongi se hicieron presentes, pues el imaginar aquella perfecta escena había despertado toda parte en él, incluyendo a su juguetón amigo.

- ¡Jimin! -le llamó golpeando levemente la puerta de la habitación del bajo ser al otro lado-.

Park al escuchar los leves golpes en la puerta de su habitación se levantó en un dos por tres de su cómoda cama y a grandes zancadas se acercó a su destino abriendo de golpe la puerta, permitiendo ver un risueño Yoongi.

Daddy ; Yoonmin. [ CANCELADA ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora