Hoy te pido perdón. Luz de mi vida, alma gemela y musa de mi alma, me disculpo por ser caballero. Esto es una disculpa de corazón, perdona mi buena habla y mis largas miradas, perdona mi admiración hacia ti, hacia tu personalidad, hacia tu cuerpo.
Perdóname. Perdona mis tediosas preguntas para saber tu día a día, perdona mi preocupación hacia ti, te imploro que perdones mi molestia cuando te ibas porque yo solo quería seguir hablando contigo, suplico tu perdón.
No me recuerdes como el que no tenía chispa, movimiento o frases sucias que solo me llevarían hacia tu cama. No estuve buscando tus sábanas tanto como tú piensas que lo hice. Busque tus sonrisas escondidas, tus secretos, tus pensamientos más oscuros... En pocas palabras. Tu amor.
Discúlpame por no ser el idiota que tanto te gusta, si no el caballero que nunca esperaste.
ESTÁS LEYENDO
Poesía de un corazón herido
PoetryPorque antes de amar, hay que saber llorar. Son una serie de escritos (comúnmente prosas) que he estado haciendo desde hace años y aunque no son los mejores ni los más extravagantes. Son algo que hago con mi corazón en el puño y en muchas ocasiones...