Dreams Fulfilled (Parte 4)

163. No aceptaré un no como respuesta (Pov. Donghae)

La nueva casa de los padres de Eunhyuk era maravillosa. Ciertamente, cuando Eunhyuk la compró no se lo dijo, simplemente los llevó hasta ella y con un simple: "Esto es por todo lo que habéis hecho por mi" se la regaló. Era un decimoséptimo piso en el centro de Seul, a poco mas de diez minutos en coche del piso donde vivíamos actualmente. Era practicamente un sueño para el él poder haberles regalado algo así y el que ahora el tuviese un lugar donde cohibirse sin ser molestado. Una habitación donde siempre la había tenido, al lado de sus padres. Tal vez así se sentía mas seguro, mas normal, mas corriente.
La casa tenia un amplio comedor contiguo a una gran y luminosa cocina donde estaba la señora Lee y SoRa preparando algo de cenar. Por el pasillo se encontraban cuatro puertas, dos paralelas a las restantes. Una daba a un baño, otra a una habitación principal y las dos últimas a una modesta sala de música y la ultima a la habitación de Eunhyuk.

- Porque no os quedais esta noche?- Oi como Sora se lo preguntaba a Eunhyuk.

- Nose...- dudó este.

- Claro, estaría guay- añadí trás el.

SoRa sonrió y me abrazó con fuerza, estrujandome entre sus delgados y blanquecinos brazos.

- Estás bien? Estáis todos bien? Vosotros, el grupo...

- Todo bien- sonreí quitándole peso al asunto de las ultimas semanas.

- Aish!- exclamó de la misma manera que lo haría su hermano- Si Hyukjae no te hubiese cazado, yo habría ido a por ti también.

- Estás segura?- Rei junto al resto de la familia.

SoRa admitió con seguridad con un ligero toque de cabeza y frunciendo los labios. Despues sonrió, me pegó un manotazo en el hombro y volvió junto a su madre.

Eunhyuk había ido junto con SoRa a la cocina para acompañar a su madre, mientras yo cogí un cojín y lo puse en el suelo, junto a la mesa donde cenariamos, en frente del señor Lee.

- Que tal estás, hijo?- preguntó desganado.

- Bien, gracias, y usted?- pregunte formalmente.

- Bien, aunque la espalda me está matando últimamente- contestó mientras se daba pequeños toques con los nudillos en la columna- Donghae, mi hijo está bien? Lo veo algo diferente...

- Ya sabe que el tema del escandalo le ha afectado muchís...

- Si, si, lo se- me interrumpió con voz ronca- pero no me refiero a eso. El jamás habla conmigo de vosotros, tal vez piense que me avergonzó o...

- No, para nada. El no piensa eso en absoluto- le interrumpí yo esta vez sin perder el respeto.

- No lo se hijo...- suspiró llevándose un pequeño vaso lleno de Soju a los labios- Me preocupa el que hayáis perdido "esa" frescura tan pronto- dijo antes de beberse el contenido del vaso entero.

- A que se refiere?

- Conozco a mi hijo lo suficiente como para saber cuando algo le gusta. Su mirada se vuelve luminosa, y en sus ojos se puede ver pequeños reflejos destelleantes de entusiasmo y antes podía ver como eras tu el que le hacia mirar así, pero ahora...- dudó en continuar a lo que yo aproveche para agachar la cabeza- Donghae te conozco desde hace muchos años y adoras a mi hijo, pero ya no veo esa adoración tampoco.

- Realmente nuestra relación ultimamente no va muy bien- admití cabizbajo-Yo he cambiado, y el también... Ha habido situaciones que nos han hecho madurar y... tal vez ya no seamos tan compatibles- dije doblandome con tristeza los hilos que sobresalían de la manga- o no al menos como antes.