Dreams Fulfilled (Parte 4)

165. Los mismos de siempre (Pov.HanNa)

Muchos aun ni nos explicamos cómo paso. Ni porque. Un día simplemente se acabo, como una bomba de humo que de repente aparece y te nubla la vista, y cuando se dispersa, ya no hay nada como estaba antes de que hubiera llegado. Así finalizó su relación. Un simple acuerdo amistoso, con un: "Ya no podemos llegar a mas, y nosotros queremos más", con un " y que dirán?". Inseguridad. Miedo. Desconfianza.

Y con su ruptura, todo cambió.

Siempre hay un modelo a seguir, una pareja a la que admiras, que esperas un día poder compararte con ellos, con su nivel de confianza y su compromiso. Ellos eran mi modelo de pareja, mi pauta, mi ruta a seguir, y cuando su confianza, su compromiso, y su amor se vio turbado por la horrible rutina, el temor a seguir sin rumbo, el miedo al qué dirán, todo acabo para todos. Para ellos, para Heechul y Hangeng, para mí y para Leeteuk.

En nuestro caso, el servicio militar fue muy duro de aguantar, los celos y las inseguridades fueron más grandes que nuestra confianza. En el caso de Hangeng y Heechul, de sus idas y venidas, de sus secretos, de sus besos escondidos en esquinas oscuras para no ser juzgados, se turbaron por la distancia, y en el caso de Donghae y Eunhyuk... es algo que aun esperábamos saber.

El día que todo acabo llovía. Yo estaba en casa, revisando un artículo sobre un escándalo amoroso entre una famosa actriz y un conocido productor que, sin mi instinto no me fallaba- que no lo hizo- creó un gran escándalo. Entonces el móvil sonó, y yo lo cogí y oí lágrimas tras él. Donghae lloraba de manera silenciosa, evitando ser obvio. Le pregunte que ocurría, y el simplemente me dijo que se moría. Yun se moría, y no había nada que pudiese curarlo.

Trague saliva, cerré los ojos, y la imagen de SaeJin recorrió mi mente. Su agradable sonrisa, su cálida mirada, sus seguras palabras... una vida tan joven arrebatada por una enfermedad tan cruel. Y ahora la historia volvería a repetirse en otra persona, en otro lugar, en otro momento, pedo dejando la soledad atrás de nuevo.

Y yo que podía decirle?

Nada. No podía decirle nada, porque simplemente no había nada que decir.

Le colgué, me quite las gafas, apague el ordenador y me dirigí al piso de los chicos con cierto temor. No podía evitar mirar en cada esquina, primero derecha y después izquierda, insegura, con temor a que DongHa apareciera de nuevo, y yo, ya no pudiera hacer nada porque estaba sola. Todos estábamos solos a pesar de tenernos los unos a los otros.

Y cuando llegue al piso, todo ya había acabado. Donghae lloraba, Eunhyuk lloraba, y nadie sabía decirme el porqué.

Eunhyuk se levanto del suelo, apoyo su mano en mi hombro derecho e hizo un leve gesto de cabeza para indicarme que le dejara en paz. Cuando pregunte, simplemente me contesto: "HanNa, todo ha acabado", y se fue.

No me atreví a acercarme a Donghae.

Y en los próximos días, JungSoo cortó conmigo.

Y me sentí sola.

Y desamparada.

Y tenía miedo.

Y deje la medicación de lado.

Y tuve una crisis.

Y fui ingresada en el hospital.

Y Donghae vino a verme.

Y me arrepentí de que tuviera que perder el tiempo en mí cuando podía estar con Yun.

Y este me sonrió y me dijo que cuidaría de mí.

Y yo jamás volví a sentirme sola.

Los días pasaron, las semanas, y los meses también. El invierno se fue volviendo cálido, el verano llego con fuerza, y las hojas de los arboles cayeron casi sin darme cuenta, y de repente comenzó a nevar de nuevo.

Por cada estación, un nuevo hombre pasaba por mi vida.

Y Yun seguía vivo.

Y mi pareja idílica seguía separada.

Y echaba de menos a JungSoo.

Con el tiempo supe que Hangeng tenía novia, y que HeeChul no lo sabía. Y que este también se sentía solo, y que no sabía a quién acudir.

Y Donghae fue a ayudarle.

Y Eunhyuk estaba ausente.

Y simplemente, yo echaba de menos verlos juntos. A ellos, y a su complicidad.

Verlos mirándose, acariciándose, abrazándose y sentir envidia.

Y tener celos.

Y pensar que no lo merecían.

Y desear que a mi también me pasara.

Pero nunca pasaba. Tal cual llegaban, tal cual se iban, y en las frías noches, yo no podía olvidar la tierna sonrisa de JungSoo.

Todo había cambiado demasiado, pero todos seguíamos siendo los mismos de siempre. Que nos había pasado?