Sombras de muerte (kuroko no basket)

Final- Aun un niño

~narra haru~

la policía llego hasta la mansion, la reputación que daba la familia era demasiado importante para contar la verdad, una madre psicópata, un abuelo cruel, un padre invisible y un niño culpable de todo. 

en el periódico y noticias mintieron sobre todo.

"un accidente causo que el jefe de la familia cayera por un ventanal desde su tercer piso"

"un accidente causo que la madre muriera entre las llamas de un accidente en el cementerio"

"un accidente causo que el padre, que intento salvar al abuelo, estuviera herido de gravedad"

todos mentían, todo era "accidente" ¿acaso yo también fui un accidente?

miraba a mi padre ser curado por unos paramedicos, tenia heridas graves, a mi no me importaban todas aquellas cortadas que recorrían mi cuerpo, pero aun así pidieron curarme, mire a mi padre antes de ser llevado por la ambulancia. su miraba, su rostro, todo había cambiado, él estaba sonriendo.

mis ojos se abrieron completamente, lo había olvidado, la ultima vez que vi sonreír a mi padre de verdad. una mano se puso sobre mi hombro, levante la mirada.

-todo termino-dijo akashi-san sonriéndome, mire a todos detrás de mi.

todos sonreían de igual manera, ¿porque yo no lo haría también?; las lagrimas salieron sin parar de mis ojos, después de todo aun era un niño...

~meses después~

kuroko y haru estaban en un jardín jugando, entre las hojas que caían de los arboles, era otoño. la generación milagrosa salio desde una mansion hasta el jardín.

-hey haru-dijo aomine despeinando a haru

-chicos-kuroko se puso de pie con una pequeña sonrisa-me alegro que vinieran-

-me alegro que le hayan dado toda la herencia a haru-chin-comento murasakibara

-¿porque comentas eso justo ahora?-pregunto kuroko confundido

-porque nos daba miedo que si se fueran a vivir a una cueva aun con toda la herencia-contesto kise riendo 

-viviríamos de malteadas de vainilla-dijo haru feliz 

-pero eso no seria nutritivo-akashi acaricio la cabeza de haru

-pues no es mala la idea-respondió kuroko con la mirada perdida

-parece que aun después de todo este tiempo no es seguro dejarte solo-dijo akashi con una pequeña sonrisa de nostalgia.

-por cierto ¿que le paso a ese asesino que quería matarte, kurokocchi?-pregunto kise

-al parecer si el que lo contrato muere ya no tiene sentido contratar un trabajo que no le pagaran-contesto kuroko

-ya veo-

-vamos a jugar!-dijo kagami sosteniendo un balón de baloncesto

-no hay una cancha aquí-respondió midorima-solo piensas en jugar-

-para eso tenemos una cancha cerca de aquí-aomine salio corriendo seguido de kagami y kise

-no hay de otra-los demás les siguieron corriendo

haru se sentó en una banca mirándoles jugar, todos eran aun tan buenos como su padre le había contado, haru deseaba algún día ser tan bueno como ellos para ser capaz de vencerlos.

-algún día venceré a mi padre y a todos ellos-susurro haru mirando el cielo cubierto de los colores del atardecer-pero eso puede esperar-

haru se levanto corriendo hacia la cancha

-porque aun soy un niño-

-espera a crecer, porque crecer es una aventura-un hombre oculto miraba a la generación milagrosa jugar, con la mirada puesta en haru.

fin..

(espero les gustara la historia :D voten y comenten n.n)