Capitulo.8

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No puedo creer que Aylin no me haya dicho nada sobre su hermano, está muy bueno y a decir verdad me dan ganas de violarlo, volteo a ver al chico quien se está riendo de mí?
-de que te ríes?-digo confusa y esta vez sale una hermosa carcajada, siento como mis mejillas arden y el chico empieza a caminar hacia mi.
-creo que no será problema que me violes de todas formas tengo planeado dejarme.-dice aún riendo, mi rostro debe ser todo un poema ya que creo que estoy sonrojada, por qué mis mejillas arden y mis ojos están bien abiertos.
-yo.... a mmm no.... yo.-no podía decir nada solo balbuceaba y eso provocó que el riera más fuerte empezando a negar con la cabeza.
-vamos, Aylin debe estar preocupada.-dice este chico, digo Ethan, entonces si son hermanos?
-espera Aylin es tu hermana?-pregunte y se dio la vuelta quedando frente a frente realmente pegados tanto que nuestra respiraciones se mezclan.
-creía que eras más inteligente. - pero este que se cree para decirme así.-anda vamos mueve tu trasero de ahí y regresemos a tu casa.

Cuando dijo que regresaríamos a casa recordé lo qué pasó y que yo no tengo ganas de encarar a mi familia por lo que a pasado no quiero, niego con la cabeza ante su petición.
-no, no pienso regresar ahí.-dije firme, entonces Ethan resopló y con agilidad me cargo cuál saco de papas, empecé a patalear y pegarle en la espalda pero no me soltaba, minutos después me rendí y me quedé viendo su lindo trasero así que se me ocurre algo realmente estupido, por cada paso que el da le empiezo a golpear en cada pompa, se detiene al sentir los golpes, después de unos minutos se empieza a reír y esta vez fue el quien golpeo mi trasero y doy un respingo.
-hey por qué haces eso??!-pregunte,más bien pareció una queja.
-por qué tú hiciste lo mismo.-dice riéndose de mí.
-llegamos.-dice bajándome y volteo hacia donde está mi casa, yo doy un paso hacia atrás pero él pone una mano en mi espalda baja para que no retroceda.
-vamos.-dice empujando hacia adelante pero yo me pongo firme.
-Ethan por favor no quiero... aún no estoy lista.-digo susurrando al borde de las lagrimas.-por favor...-digo sollozando, y es que no quiero entrar ahí enserio no quiero.
-entonces donde te llevo.-dice y se me ocurre una grandiosa idea.
-sígueme.-no tengo idea de por qué me siento segura y por qué él me sigue pero no importa, estoy de camino a casa de mi mejor amiga.

Estoy frente a su casa, subo las escaleras y toco la puerta, se oyen pasos y abren la puerta.
-hola.-me dice con una sonrisa que se desvanece al ver a Ethan, luego vuelve a hacer su sonrisa pero esta vez en forzada.
-pasa-me dice y yo estoy pasando pero Ethan se queda afuera.
-Ethan pasa.-digo pero este niega.
-voy a avisarle a Aylin que estás aquí.-se da la vuelta y se va, mi pregunta es por qué ellos se preocupan tanto por mi.

-bien y que haz planeado para tu cumple que solo faltan dos semanas.-
Dice pero yo no tengo ánimos de hacer fiesta.
-nada-digo y veo como su rostro se desencaja.
-mira Kira se supone que la amargada aquí soy yo no tú, así que ahorita mismo me vas a decir que es lo que te pasa!! -me grita y yo me empiezo a reír, y asiento con la cabeza, era obvio que le diría pero pienso que es demasiado rápido y apenas y yo me sé todo esto.

Estábamos sentadas en la cama de Alejandra, ella solo me veía y yo a ella, era un momento en donde se respiraba tranquilidad.
-y bien Kira vas a decirme que ocurre?-preguntó mirándome a los ojos, yo solo agache la cabeza y lagrimas traicioneras descendían en mi rostro, alce la mirada y negué rápidamente.
-Es que no puedo.-dije en forma de susurro, no es que no quiera contarle simplemente no puedo, abro la boca para contarle pero algo impide, tal vez sea el nudo en mi garganta o el hecho de sé que no me creerá.
-vamos solo dilo, se que se te puede hacer muy difícil pero solo inténtalo.-dice tratando de transmitirme tranquilidad y de cierta forma lo logra.
-Alejandra.... solo prométeme que me creerás sin cuestionar nada.- le dije en forma de súplica, ella solo me veía sería-  Solo prométemelo...... por favor.-eso último lo dije en susurro por qué iba a romperme era demasiado y aún trato de procesar lo qué anteriormente me habían dicho, ella solo asintió tratando de sonreír aún que solo le salió una mueca.
-bien, mira hace unos días yo no....yo no tenía idea de lo que estaba ocurriéndome, solo eran pesadillas con mi tía, después mis cambios repentinos de humos, después el tatuaje.-le conté con lágrimas corriendo por mis mejillas  y alzando mi muñeca para mostrarle el tatuaje, como ella no hablaba yo pro seguí.
-cuando yo con mi mente pude levitar una lata y casi matar a a Atenea, discutir con mi madre, encontrar a un pequeño lobo que anteriormente estuvo en mis sueños....-iba a proseguir pero ella empezó a reír como desquiciada yo solo la miraba con lágrimas en los ojos al pensar que no me creía.
-espera espera de donde haz leído todo esto, esperas que me crea esto?? ...... en verdad piensas que estoy tan loca??
Vale Kira si no quieres decir me no lo hagas, pero no esperes que te crea.- dice muy enojada, yo solo asentí me limpie las lagrimas con brusquedad, me puse mis zapatos y salí de su habitación, estaba bajando las escaleras y ella me toma del brazo.
-espera!! A donde vas?!!-me dice desesperada al ver mi acción pasada.
-a donde crees? A mi casa.... o no lo sé tal vez a buscar a mi pequeño lobo que he dejado en el bosque, no lo sé.!!-grite realmente frustrada.
-enserio ya deja tus estupideces.-me grito de vuelta.
-es enserio?!! Para esto quieres que me quedé?? No Alejandra yo no me voy a quedar en un lugar donde no me creen, donde soy una mentirosa y sobre todo se supone que debe haber cariño.-dije llorando y pegando mi espalda ala puerta haciéndome un ovillo, ocultando mi cabeza entre mis piernas.

Pasaron unos minutos y Alejandra no decía nada, a decir verdad todo se quedó en silencio, alzó la vista y me doy cuenta de que todo en la casa está levitando.
Alejandra con ojos como platos y lagrimosos volteo a verme, y abrió la boca, yo solo negué me pare de donde estaba y salí corriendo de la casa.

Esta era  la segunda vez que salía huyendo como una cobarde, no sabía qué hacer o donde ir solo quería llorar iba caminando sin rumbo nuevamente, espero esto no se haga costumbre por qué odio llorar y más cuando las personas me ven.
He llegando a un muelle o algo así, no había notado que estaba atardeciendo dando a este lugar un hermoso enfoque del atardecer.

He llegando a un muelle o algo así, no había notado que estaba atardeciendo dando a este lugar un hermoso enfoque del atardecer

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Pase toda la tarde llorando, pensando y mirar con tranquilidad hacia el atardecer.
Escuche paso atrás de mi, la verdad es que no importaba quién era yo estaba demasiado cansada como para seguir con esto, siento como ponen un trapo húmedo en mi cara y me rehuso a inhalar lo que sea que contenga el trapo, empiezo a dar golpes y patadas, la persona que con la que estaba peleando solo apretaba con fuerza el brazo al rededor de mi cintura ocasionando que chille de dolor.
-Suéltenme por favor- siseo con dificultad por el trapo en mi boca, a decir verdad me estoy mareando por la falta de oxígeno en mis pulmones pero me sigo rehusando a respirar, siento como me levantan del piso y es donde aprovechó a patalear con las últimas fuerzas que tengo y al parecer obtengo un poco suerte por qué me suelta pegando un fuerte grito.
Empiezo a correr rápidamente introduciéndome al bosque, mis pulmones ardían exigiendo oxígeno así que me detengo, tengo miedo es de noche y no se ven muy bien los caminos.
-Valla Villalobos te recordaba menos fuerte y menos tonta, pero veo que no
Ahora eres más tonta pero también fuerte.-dijo gritando, lo más probable es que me este asechando.
-sabes cuando intente matar a tu tía se me hizo imposible, pero contigo será más fácil por qué no sabes nada.-
Dijo riendo escuchándose más cerca.
-No tienes experiencia, y sobre todo nadie está protegiéndote.-dijo riéndose fuertemente, entonces recordé las palabras de mi tía "siempre estaré ahí para ti, siempre te cuido aún que tú no puedas verme siempre estoy en la oscuridad, solo tienes que pensarme"
Entonces solo cerré los ojos y me tranquilice, veamos si por lo menos esta promesa si puedes cumplirla "mami" , la pensé mucho como si ella estuviera aquí, escuche unos pasos demasiado cerca abrí los ojos y era un hombre alto, regordete con barba de tres dias.
-Que intentas hacer? Gritar? Sabes que nadie podrá oírte cierto?Ósea que estás sola, siempre lo estuviste.- dijo riéndose de mi, por mi parte estaba decepcionada de que mi "madre" no acudiera a mi llamado, estaba temblando no solo de miedo si no por qué había demasiado frío y por terminar estaba llorando enfrente de él.
-Sabes creo que debí haberte asesinado a ti en vez de tratar de matar a tu tía.-dijo este hombre entre carcajadas y está vez fue mi turno de reír y de negar con la cabeza.
-Sabes en eso estoy de acuerdo debiste haberme matado a mi y así me hubieras evitado esta vida de mierda.- le dije burlona, realmente no sé de dónde saqué la osadía de hablar de esa manera sabiendo que mi vida corre peligro.
-Bueno, pues intentemos de que está vez no falle.- dijo riendo sacando una daga de plata con sangre mezclado con oro.
A decir verdad era una combinación bastante rara, de una manera muy extraña empezó a esparcirse una espesa niebla helada por todas parte y los árboles se movían con intensidad, la daga salió volando clavándose totalmente  en un árbol.
- y si mejor intentamos otra cosa? Como matarte de una vez por todas?- hablo una delicada y fina voz de mujer, detrás de un árbol apareció la escultura figura de una hermosa mujer,por la niebla que era muy espesa no se le veía el rostro pero se veía el hermoso vestido blanco.
Cuando por fin se le pudo ver el rostro, mi sangre se helo y mis facciones se pusieron tensas.
-Mama.......

La Hija De La Luna NegraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora