Me terminé de vestir y bajé las escaleras en busca de Damon, estaba sentado en la terraza, muy concentrado leyendo un libro se veía tan lindo, salí corriendo hasta el y me le tire enzima.
-Te encontré -grito sentada en sus piernas, mirándolo fijamente a los ojos.
-Estas pisando mi libro con tus redondas nalgas- dice levantándome un poco, y sacando el libro que se encontraba bajo de mi.
- ¿Que lees?- le digo emocionada.
-Hush Hush- dice mirando el libro con inspiración. Lo miro sorprendida y ríe por lo bajo.
- ¿Vamos a salir? Estoy aburidaaaaaa - grito con desespero.
- Si dejas de gritar, te invito un trago. Pero me tendrás que dar algo a cambio- dice con una sonrisa muy hermosa pero perversa a la vez.
-Que quieres que te dé primito -digo saltando de la emoción en sus piernas.
-Una noche juntos. Pero no específicamente para dormir- dice guiñandome un ojo.
-Estas demente-digo y subo a mi habitación.
Pase toda la tarde viendo American Horror Sorry hasta que el reloj marco las 19:00 y salió corriendo al cuarto de baño. Me duche y salí lo más rápido que pude. Me dispuse a buscar un sosten por todos lados, nuevamente, nose que había pasado, pero parece que los escondieron.
- Pase- Digo mientras escucho tocar ala puerta, tomó la toalla y la enredo en mi cuerpo.
- ¿Que haces? Ya vamonos -Dice Damon entrando por la puerta,y mirándome desconcertado.
- No me has invitado a salir y además, ¡No encuentro mis sostenes! - grito toda desesperada.
- Creo que se donde están- Dice con una sonrisa maliciosa, mientras salia por la puerta, y por instinto lo sigo muy desconcertada.
Llegamos a la puerta de cuarto donde se estaba quedando mientras hacian las compras de los muebles en su hogar, y entramos. De inmediato abre un cajón de la mesita de noche. Creo que ya se donde están todos mis sostenes, lo veo levantar uno con un dedo.
-Creo que esto- dice señalando mi sostén negro favorito- te pertenece- me dice mirándome con la sonrisa más pervertida que había visto.
-¡Ladron! -grito señalandolo con un dedo.
- No te enojes primita, sabes que lo tuyo es mío - me dice saliendo por la puerta, con mucha tranquilidad.
¿Cómo se los robo sin que me diera cuenta? Me grito a mi misma saliendo de su cuarto para dirigirme al mío, dejó caer la toalla y ne colocó el sostén y mis bragas, me pongo mi vesido favorito, rojo un 3 dedos más abajo de mis nalgas, busco unos zapatos de tacón alto negro y me miro al espejo, me veo hermosa y no es por presumir pero me encantan como se ven mis piernas con este vestido.
Me dirijo hacia la planta baja de la casa y veo a Damon sentado en el sofá tecleando algo en su teléfono móvil. No se percata de mi presencia hasta que carraspeo un poco.
- ¡Wow! -Dice abriendo los ojos como platos y mirandome con ternura.
- ¿Nos vamos? -pregunto mientras terminó de bajar las escaleras, y me acerco un poco mas a el.
-Si- dice sin dejar se mirarme, se levanta del sofá y abre la puerta principal haciéndome una señal con la mano para que camine junto a el.
-¿Mamá sabe que saldremos?- pregunto a lo que el asiente. Fuimos directo a la cochera de su hogar y nos montamos en su auto, me senté en el asiento del copiloto y me quedé viendo la ventanilla todo el camino
Para: Tina .
De: Madison.
-Creo que estoy comenzando a sentir cosas por Damon.
Leído 19:58
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SEDUCIENDO A MI PRIMO. (PAUSADA)
Teen Fiction¿Será cierto que del odio al amor hay un solo paso?
