Cap 11

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Mientras iba caminando hacia mi apartamento,  noto que vibra el bolso,  mi móvil.  Lo cojo y observo que es un mensaje.  Lo abro y dice :

Mensaje:

Laura Marie Marano de veinte años,  has sido citada en Empresas Lynch, edificio 1 planta doce a las 14: 30 p.m.  por los Srs. y Sra. Lynch.  Si no acude a su cita nos verá obligados a intervenir.

Un cordial saludo, seguridad

Fin mensaje

Quién  narices es seguridad?  Ahora si que metí la pata,  mire mi reloj de muñeca y eran las una,  tenía una hora y media.  Me dirijo a mi apartamento a paso rápido.  Cuando entro observo que no hay nadie y mentalmente lo agradezco,  no estoy para perder tiempo con riñas de las chicas.
Entro a mi habitación y tiro el bolso al primer sitio que pillo.  Cojo una toalla y me meto en la ducha.  A la media hora me encuentro frente al armario decidiendo que ponerme.  Al final me decido por un pantalón blanco con un chaleco de tirantas blanco con cosas doradas por todos sitios.  Una rebeca de lana color chocolate con leche,  un pañuelo marrón muy claro con un diseño de hojas mas oscuro. Unas botas cortas marrones de tacón,  un bolso de dos marrones distintos y luego mi reloj y unos pendientes de pluma blanca.
El pelo me lo recojo en una coleta de caballo dejándome mechones sueltos.  Me maquillo los labios de un rosa con brillo y me pongo algo de rimen y rubor.  Me echo mi perfume favorito.  Y salgo por la puerta.  No seré millonaria como antes pero eso no es igual a que no me sepa arreglar.  No sabeis lo que se encuentra en ropa de segunda mano,  es bonita y barata y con un par de arreglos ni lo parece de segunda mano luego.
Camino hacia mi coche,  algo ya viejo pero me gusta.  Escucho un par de silbidos y piropos por ahí pero los ignoro olímpicamente.
Estoy frente al edificio de los id**tas estos.  No se lo que me encontraré entrando ahí y no se si saldré echando humos o con una sonrisa triunfante.  Miro mi reloj de muñeca y faltan quince minutos para la citación.
Cojo el móvil y le pongo a las chicas que no llegaré a almorzar a casa porque me entretuve por ahí,  que ya comía fuera.  Me respondieron al instante todas con lo mismo pero con distintas palabras pero vamos,  en resumen,  después nos cuentas.
Volví a mirar mi reloj y me di cuenta que ya pasaron diez minutos.  Me bajé del coche y camine al ascensor.  Cuando llegué a la planta deseada me baje después de dar un respiro hondo.  Le avisé a la secretaria de que ya había llegado y me hizo esperar diez minutos en la maldita sal de espera.  Siempre supuse que los ricos eran puntuales,  que equivocada estaba con eso (al igual que con muchas cosas más.)
Cuando me avisó que ya podía entrar,  esta vez era distinto.  Entré en una sala de juntas. La mesa era rectangular en un extremo estaban toda esa plebe y en la otra una silla para sentarme. Me senté en ella y me crucé de piernas dejando el bolso en el respaldo de la silla

Riker : sabe por que esta aquí? 

Laura: hombre,  recordando y recordando los acontecimientos de hace una hora y media no lo dudo pero sr. Lynch podría ir al grano?  Cancele una cita por esta reunión

Todos se miraron sorprendidos entre ellos

Riker: bueno,  esta usted en lo cierto.  No fue muy correcto ni gritar a la Srita.  Lynch y muchísimo menos tirar un batido encima del Sr Ross Lynch

Solté una carcajada por esto último

Laura: quizás me arrepienta un poco,  tampoco mucho,  no os ilusioneis de hablarle con tan poco respeto a la Srita.  Lynch,  cuando no venía a cuento pero nunca me arrepentiría y digo nunca de lo último.

Riker : estás aquí para firmar un contrato de confidelidad

Laura: por que? 

Rydel: por Sofía - habló por primera vez

Laura: haber si entiendo,  firmo eso para que nadie sepa de Sofía,  hija suya

Riker: exacto

Laura: y aún así la sacáis al parque , al centro comercial... Con su tío que luego ve a su madre y que queréis que piense la gente?  Que se sacó a la niña del bolsillo?  Os creía más inteligente

Rydel: no tenemos que darte explicaciones del por que o el por que no de lo que hacemos srita.  Marano - dijo con un tono duro y cortante

Laura: tienes razón,  no me interesa vuestra vida

Ryland: pero aún así escribe un blog de nosotros - escuche que le dijo el menor a uno castaño que sería Rocky

Abrí mis ojos de par en par pero pensé en otra cosa mejor

Laura: pasadme el contrato,  así me largo de aquí cuanto antes

Riker me alargo el contrato y me lo puse a leer detenidamente.  Estos ponen trampas seguro.  Cuando me aseguré de que estaba todo correcto.  Lo firme y me levanté de mi asiento.

Laura: si ya terminaron me retiro

Riker : una cosa más,  habla la próxima vez que nos encuentre a alguno de nosotros por la calle con más respeto

Laura: créame evitaré que haya una próxima vez

Dicho eso salí de la sala y me fui a mi casa.  No tenía ganas de almorzar, luego comería si eso un sandwich.

Cuando llegué todas las chicas se giraron hacia mi.  Y les conté tooodo lo que pasó.  Salvo la parte de Sofía,  lo tenía prohibido.

Dove: no me puedo creer que le tiraras el batido encima

Vane: siii... Yo no hubiera sido capaz

Laura: se lo gano a pulso

Maia: Laura,  podemos hablar un momento a solas - sabia que ella dudaba de mi palabra

Fuimos a su cuarto y me senté en el suelo mientras ella lo hacia en la cama

Maia: ahora si,  cuéntame lo que en verdad paso

Laura: ...

Amor prohibido ||Raura||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora