Cap 21

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Laura: y por qué a un sitio privado si se puede saber?  - dije cruzandome de brazos

Ross: si vamos a un sitio público te verán conmigo.  No te aconsejo que te vean conmigo,  te perseguirían

Laura;  ok,  sitio privado pero donde? 

Ross: es impaciente srta.  Marano.  Una propiedad que tengo en el centro de la ciudad.

A los cinco minutos metió el coche en un garaje de un edificio. Creo que el edificio más lujoso de todos los Ángeles.  Me abrió la puerta del coche y me tendió la mano para salir.  Cuando se bajó?  La cogí y nos montamos en un ascensor.
Había un montón de botones pero había una que tenía un código, es ahí donde metió el código con rapidez,  supongo que para que no lo viese.
Era la planta más altas de todas,  perdí la cuenta de cuantos pisos tiene...

Se abrieron las puertas del ascensor y dejaron ver un vestíbulo con cuadros de pinturas,  una mesa en el centro negra y una alfombra beige debajo de esta.  Encima de la mesa había un precioso jarrón carísimo y con rosas rojas.
Me tomó de la mano y me guió a un salón donde había una televisión de plasma con un sofá de muchas plazas de cuero negro enfrente y cojines blanco con una mesa de madera blanca con una alfombra beige y con toques marrón debajo.  A un lado había una mesa de madera blanca con sillas transparentes a sus lados,  había un total de seis sillas.  Por las paredes había marcos de pinturas abstractos preciosos.  Al lado había una chimenea con marcos de fotos en su repisa.  En una esquina había unas baldas de color madera negra y en ella libros y alguna foto.
Al fondo se encontraba una puerta que daría a la cocina y luego un largo corredor que daría a las habitaciones.
Ross tomó mi mano y me guió hacia la terraza por una puerta que antes no me había fijado,  estaría tapada por alguna cortina.
A fuera hacia brisa y mi pelo lo notaba.  Me solté de la mano de Ross y me asomé al barandal,  se veían las luces de todos los ángeles,  a que altura estamos dios?.  Ross viene y se apoya en el barandal y mira hacia donde yo estoy mirando

Laura: esto es precioso - dije sin mirarlo

Ross: lo es

Laura: por qué me invitaste a cenar?  - dije ahora mirándolo

Ross: me pareces interesante y me gustaría conocerte.  Que tiene de malo?  - dijo él sin mirarme

Laura: somos de mundos diferentes - dije dándome la vuelta para apoyarme en la barandilla

Ross: no somos tan diferentes como tu te piensas

Laura: no somos tan parecidos como tu te piensas - dije imitando sus palabras pero poniéndole el adjetivo contrario

Él soltó una carcajada

Ross: ven,  vamos a cenar.  Ya estará lista supongo.

Me guió hacia una mesa que había en el fondo con un mantel cáscara de huevo e iluminado por la luz de las velas.  Me ayudó a sentarme y más que él se sentó apareció un hombre de mediana edad con merluza en papilote con troceados de zanahorias,  calabacín y puerro acompañada de una ensalada césar.  Trajo luego una botella de vino (de vinos si que no se)  

Ross: te puedes retirar - le dijo al camarero para después irse

Comíamos en silencio,  un silencio que me empezaba a aburrir y yo con mi delicadeza de siempre lo dije

Laura: si me trajiste para conocerme no se que haces callado,  empieza a aburrir

Él soltó una sonora carcajada

Ross;  nunca antes me dijeron que se aburrían de tal manera - dijo todavía riendo

Laura: así soy yo

Ross: bueno,  cuéntame algo

Laura: eso es muy general además no te voy a contar gran cosa sigues siendo la persona que odio más de todo el mundo

Ross: del universo no? 

Laura: hombre,  si lo hubiera visitado quizás te podría incluir pero como no es el caso

Se rió de nuevo,  acaso soy un payaso y no me di cuenta? 

Ross: bueno,  empecemos así, por qué me odias? 

Laura: es un chiste no?  Me persigues, además no eres solo tú,  es toda tu camada

Ross: camada?  Así llamas a mis hermanos?  - dijo con gracia

Laura: normalmente no,  utilizo otros adjetivos pero es que resultan que son más ofensivos y son tus hermanos

Ross: dato curioso

Terminamos la cena y Ross se puso de pie y me tendió la mano.  Yo me quedé mirándole preguntándole para que con la mirada,  pero el solo volvió a mover la mano.  La agarré sin otro remedio y me levanté de allí.
Entonces empezó a sonar una música de fondo

Laura: claro de luna? 

Ross: tiene buen oído srita.  Marano

Laura: me educaron bien

Ross: me permite este baile,  damisela

Laura: claro.

Puso sus manos en mi cintura y yo las mías en sus hombros y bailamos a la luz de la luna al son de la canción

Ross: cual fue la primera impresión que te di? 

Laura: en una palabra,  egocéntrico o quizás antipático

Ross: y ahora? 

Laura: andas igual solo que en un grado más bajo

Ross soltó una carcajada

Ross: es usted impredecible srta.

Laura: deje de ser predecible hace mucho Sr.  Lynch,  me gusta... Lo inesperado - le susurré lo ultimo en el oído que hizo que temblara

Ross: eres especial

Laura: me gusta lo único

Hizo que le mirará a los ojos cogiendome de la barbilla y lentamente se iba acercando.  Yo iba a hablar pero estaba en shock,  no podía mover ni un músculo de todo mi ser. Hasta que sus labios hicieron contacto con los míos,  era un beso,  dulce,  delicado.  Pero una duda surgía en mi cabeza,  por qué me besa?  Pero había otra mucho más difícil de resolver,  por que lo seguía en el beso?

Amor prohibido ||Raura||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora