-¡Estoy tan estresado!- se queja un hombre de facciones finas, ojos almendra y cabello rosado mientras relajaba su cuerpo sobre la silla, dejando de leer por un momento los papeles que debía entregar en menos de una hora junto a la sesión de fotos que había realizado durando una semana completa.
-No te quejes, Ji. Yo aún no puedo terminar con esto y ni siquiera pude editar unas fotografías que he tomado para la reseña de un periódico. Tú estás por acabar y te irás a descansar a tu departamento- suspira frustrado su mejor amigo, cuyas facciones eran más masculinas que Jiyong. Su piel era levemente más oscura y su cabello era rubio peinado hacia arriba, logrando que su look se vea salvaje y a la moda.
-¡Pero es que realmente estoy agotado, Bae! Hasta en las noches de soledad en mi departamento, necesito que alguien me consuele mientras lloro y diga que todo estará bien- suspira haciendo un puchero.
-¿Por qué no pruebas conseguir un Ikemeso?-
-¿Qué es eso?- frunce el ceño.
-Estamos viviendo en Japón hace más de cinco años y ¿no sabes lo que significa?- se burla el rubio.
-Perdón por no ser un experto en idiomas como tú, bro- comenta irónico Jiyong.
-No te ofendas, es broma Ji. Primero te diré su significado... La unión de las palabras Ikemen, que significa guapo y mesomeso que significa llorar, llevan a la palabra Ikemeso. El cual conseguir un Ikemeso, significa alquilar un hombre guapo y apuesto para que te consuele y así, puedas liberar todo tu estrés, desahogándote para él quien te apoyará y animará como un buen hombre. Aunque hay un problema...-
-¿Cuál?- al pelirrosa no le desagradaba la idea ya que su amigo sabía a la perfección de su condición sexual y que un joven guapo lo consuele, sería buena idea.
-Tengo entendido que sólo se dedican a consolar mujeres- suspira frustrado Bae ante su fallido intento por ayudarlo.
-Oh, qué lástim...
-¡Podrías intentarlo, Ji! Tus facciones y físico te hacen ver femenino, si vas a pedir por uno, ve lo más femenino posible-
Jiyong observó detenidamente a su mejor amigo. Creyó que por un momento estaba bromeando, pero al notar la seriedad del rubio y su intento por ayudarlo, sonrió.
-De acuerdo, terminaré con lo poco que me queda e iré a ver cómo es que puedo conseguir un Ikemeso. ¿Tienes la dirección?-
-Sí, hace un año he trabajado para un periódico sobre ese tema. Por eso es que sé más o menos cómo trabajan ellos- sonríe y busca en uno de los cajones de su escritorio, dicho periódico.
-Con razón... y tú que te burlaste de mí por no saber lo que significaba. Mal amigo- hace un puchero, fingiendo enojo.
-Ya, lo siento Ji. Ten, ahí tienes la dirección y si te quieres informar más del tema, léelo- le extiende el periódico.
-¡Gracias Bae! Seguramente conseguiré un inteligente y guapo chico que me consuele de tanto estrés- sonríe de una manera distinta, logrando que Bae lo mirara dudoso.
-La idea es que te consuele anímicamente. No te aproveches de ninguno. Son hombres jóvenes. Tú tienes veintiocho y si no mal recuerdo, los Ikemeso tienen de dieciocho a veintiún años-
-¿Me estás diciendo pedófilo?- lo mira serio.
-Sólo te estoy advirtiendo y que tengas cuidado, Ji. Ellos sólo trabajan para hacer un bien a las mujeres-

ESTÁS LEYENDO
Ikemeso
ФанфикKwon Jiyong, un hombre de veintiocho años y bello ante los ojos de cualquier persona, dedica su vida fotografiando tanto paisajes, como seres vivos y objetos inanimados que él cree que son arte ante sus ojos, para luego publicarlos en una revista de...