Ojos; Shinya Hiragi

[Número cuatro]

Shinya, hoy te veo radiante. ¿Será que intentas ocultar tu sufrimiento más de lo normal? ¿Acaso eres capaz de eso? Si lo eres, no hay problema, pero si no puedes, tengo que ayudarte. Te apoyaré y te prestaré mis fuerzas para que puedas sentirte mejor.

Capítulo 4. Los ojos son la puerta que lleva al corazón

Sin que se diera cuenta, los días pasaron rápido. Miércoles, jueves, viernes; ya había llegado el sábado. El tiempo de verdad pasaba rápido.

Sabía que esa noche sería la boda, sin embargo, se despertó cerca de las once de la mañana. Dijo que iría, pero sabía que se arrepentiría de esa repentina decisión.

Se apresuró a desayunar un par de tostadas con mermelada, sabiendo que el día —más bien, la noche— sería largo.

Bostezó un par de veces. En realidad la razón por la cual despertó tan tarde fue porque casi no pudo conciliar el sueño. Se  la pasó pensando en lo que sucedería una vez que empezara la ceremonia, y eso incluyó un sueño en el que él se oponía cuando el sacerdote decía: "Si alguien se opone, que hable ahora o calle para siempre".

Para acabar con lo que le quedaba de sueño, decidió preparar un poco de café. Mientras el agua hervía, recibió un mensaje de __(T/N) en LINE. Le preguntó si por fin había despertado.

"¿Por fin?"

Revisó su registro, encontrándose con unas cuatro llamadas perdidas por parte de la chica. Entonces volvió a la aplicación y le pidió disculpas.

+ No importa~ —Respondió.— Cómo amaneciste?

Se dedicó a conversar un poco con ella, para aliviar el estrés que le producía pensar en la boda de su amigo. En algún momento olvidó el café, y la olla 'estuvo a punto de estallar'.

Luego de todo eso, fue a buscar a la tintorería el traje que preparó para la ocasión con ayuda de __(T/N). En el camino vio varias parejas que le hicieron sentir algo extraño. ¿Celos? Quién sabe.

Cuando volvió a casa, era casi la una de la tarde y no tenía muchas ganas de almorzar, ya que casi apenas había desayunado.

Durante un momento estuvo viendo las noticias conociendo las novedades sobre el mundo, como no había hecho desde hace mucho tiempo. No esperaba terminar con demasiada información sobre hackers y robos.

A las tres de la tarde no tenía nada que hacer, y se dedicó a pensar en cómo podría arreglar su cabello. Aunque eso no era importante. Decidió que lo dejaría como siempre, al natural.

A las cuatro estuvo un rato en Twitter, y cuando se aburrió decidió ir a darse una ducha. Al parecer esa era una de las mejores formas de aliviar el estrés.

Al salir del baño, se encontró con un par de mensajes por parte de la violinista a la que tanto admiraba.

Después de responderlos se dijo a sí mismo que tomaría una siesta hasta al menos las seis, y se quedó dormido.

~..~

"Rayos... ¿Qué estará haciendo Shinya?"

__(T/N) había llegado algunos minutos antes a casa del peliblanco, quien aún no salía. Decidió ser ella quien fuera a buscarlo porque tenía tiempo extra. En absoluto no tenía nada que hacer.

— ¡Lo siento, __(T/N)-san! —dijo el de ojos celestes, apenas saliendo—. Me quedé dormido un buen rato...

La chica rió—. No pasa nada. Ven, traje un auto.

— ¿Sabes conducir? —preguntó Shinya.

— Yo no, pero él sí —le guiñó el ojo al conductor.

— Por un momento creí que conducirías tú...

— Bienvenido a 'Juegos mentales' —murmuró, entrando al auto, siendo seguida por el de cabello blanco.

— Ten —dijo, dándole a la chica un papel que tenía escrita la dirección del sitio donde sería la boda. 

Ella se lo pasó al hombre que estaba frente al volante para que los llevara hacia aquel lugar. Accedió y enseguida empezó a conducir.

Durante los quince minutos que tardaron en llegar —debido al tráfico—, __(T/N) y Shinya conversaron sobre temas que se les ocurrían. Así, el peliblanco logró evitar pensar en la boda a la que asistiría. Hasta que arribaron al sitio, claro.

Una vez llegaron, personas empezaron a saludar a Shinya. La chica creyó que serían conocidos, así que se limitó a saludarlos también.

— Shinya-san, por aquí —murmuró una chica de cabello morado.

— Shinoa-chan —exclamó el de ojos celestes, entusiasmado—, ¿qué tal todo?

— Bien —sonrió—. La ceremonia ya va a empezar.

Se sentaron junto a aquella muchacha y esperaron la llegada de la novia. Lucía como una princesa en el largo vestido blanco que llevaba puesto. La acompañaba un tierno ramo de rosas rojas y rosadas. El velo no dejaba que se le viera la cara, pero de seguro esbozó una sonrisa al ver al peliblanco allí. 

El piano entraba suavemente por los oídos de la chica de cabello ____. Sentía cada nota y cada vez tenía más ganas de tocarlas en el violín. El tiempo transcurrió tranquilo, hasta que llegó la hora de los votos, donde los novios se jurarían eterna fidelidad.

"Quién se oponga, que hable ahora o calle para siempre"

__(T/N) tomó la mano de Shinya, que se había convertido en un puño, mientras prometía que pronto iba a terminar.

— Puede, entonces, besar a la novia —dijo el sacerdote, dirigiéndose a Guren. Éste hizo lo que se le indicó, tomando a Mahiru por la cintura.

— Esta es sólo una etapa más en tu vida —murmuró la de ojos ____ al oído de Shinya—. Sólo debes superarla; todo estará bien. Si la vida te puso tan duras pruebas, fue porque supo que sabrías afrontarlas.

Mi querido Shinya, no cedas ante el destino. Creer en tu debilidad te hace más débil. Prometo ayudarte a superar todos los nuevos obstáculos que se te presenten. Porque con sólo ver tus ojos, frágiles cual cristal, me di cuenta de lo roto que está tu corazón. Ocultarlo con una cortina no sirve de nada, ya que ésta puede arrancarse en cualquier momento. La mejor solución es repararlo, y para hacerlo bastaría con convencerte de que puedes lograr cualquier cosa. Incluso olvidarlo.

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¿Qué tal la nueva portada? .w.

Lamento la tardanza </3 Y quizás el otro tarde más que este ;v;

PD: Siempre que escribo la parte final, me siento más poética o algo así xd