Charles Weasley, al parecer lo tenía todo: era atractivo, inteligente, tenía el trabajo de sus sueños, contaba con una gran familia que siempre lo apoyaba en todo, e inclusive era muy cotizado entre las mujeres. Pero le faltaba una pareja.Si bien era cierto que las pretendientes le sobraban, pero hasta ahora, a él no le había interesado ninguna; simplemente porque no les veía algo "mágico" que pudiera conquistarlo, porque sí, él era de los pocos seres que creían que el verdadero amor se reconocía en seguida.
Tampoco era que le urgía encontrar una mujer con quién compartir el tiempo. Sí se sentía mal cuando visitaba a su familia y veía como todos sus hermanos ya tenían pareja; Bill llevaba algunos años casado con Fleur, Percy acaba de iniciar una relación con su compañera de trabajo, George estaba comprometido con Angelina Johnson, Ginny y Harry nunca se separaban, ¡incluso Ron estaba con Hermione! Y definitivamente estaban muy enamorados.
Agarró una cubeta llena de porquerías para Norberta. Si había un ser femenino que sin duda sería su preferida, era ella.
Caminó un poco más de un kilometro para encontrarla recostada sobre una roca y tapándose con un ala. Con cautela, se acercó y levemente le acarició la cabeza.—¿Tú me quieres, verdad, nena?
Norberta abrió el ala y alzó un poco la cabeza. Charlie se alejó para no salir lastimado por un golpe accidental. Ella inclinó la cabeza hacía él, por lo que sonrió.
—Yo también. —Agarró un poco de porquería que tenía la cubeta y se la lanzó para que comiera—. Oye, ¿cómo crees que sea la chica con la que me llegue a casar?, ¿morena, pelirroja, castaña, teñida o rubia? Me gustan las rubias, pero no como Fleur... Fleur es de Bill, y tampoco es mi tipo. —Suspiró y se frotó el rostro, tenía que distraerse—. Hermosa, voy a salir un par de horas, ¿de acuerdo?
Caminó sin rumbo, perdido en sus pensamientos, no vio a dónde había llegado, hasta que distinguió a un par de niños jugado con sus padres. Suspiró. Buscó la banca más cercana para sentarse. El cielo estaba cubierto por grandes nubes grises, avisando que se avecinaba una fuerte llovizna, justo como le gustaba.
De lejos logró distinguir a su hermana Ginny junto a Harry, ambos jugando con el pequeño de Teddy Lupin.
Una pelota de plástico pegó con su tobillo. Se agachó para agarrarla y con la mirada buscó al dueño.
—Disculpa —se disculpó tímidamente una pequeña niña de rizos rubios—. Es mi pelota.
—No te preocupes, linda. —Sonrió y la niña se sonrojó fuertemente por el cumplido—. ¿Y cuántos años tienes?
—Así. —Ella le enseñó su mano y levantó los cinco dedos—. ¿Y tú?
—Tengo...
—Amy, cariño.
Una voz femenina lo interrumpió.
—¡Mami! —exclamó para después correr a los brazos de su madre—. El es Charlie y me dio mi pelota.
El pelirrojo arrugó el entrecejo, sin dejar de ver de reojo a la mujer. Se cruzó de brazos intentado mostrar seriedad.
—¿Como sabes mi nombre?
—Ahí dice.
Señalo un costado en su camisa, efectivamente, en una etiqueta blanca venía escrito su nombre. La mujer rió, lo que provocó una sonrisa inconsciente en Charlie.
—Gracias por darle la pelota. Soy Brooke.
—Charlie Weasley.
Ella lo observó directamente a los ojos sin borrar la sonrisa. Charlie le sostuvo la mirada. Así se mantuvieron un par de segundos, viéndose nada más. La pequeña niña pasaba los ojos de su madre a Charlie un par de veces.
—¿Están bien? —Los dos adultos regresaron a la realidad. Se vieron una vez más y bajaron la cabeza avergonzados—. ¿Nos vamos, mami?, ¿Charlie, quieres venir?
—¿Perdón? —Una sonrisa confusa adornó su rostro y se acercó un poco a ellas, más bien a la madre.
—A comer un helado.
La niña alzó los brazos emocionada y se bajó para salir corriendo con el señor que vendía los helados.
—¿A tu esposo no le va a molestar que las acompañe?Ni se molestó en ocultar la sorprendente amargura en su voz por la pregunta. A penas tenía minutos conociéndola, pero le causaba un poco de incomodidad y molestia pensar en su esposo.
—No tengo —habló en un susurro—. No interesa hablar de eso. Entonces, ¿vienes con nosotras?
El resto de la tarde fue muy interesante para todos. Charlie la pasó estupendo, y logró conocer a Brooke y su pequeña hija Amy, con la que había logrado encariñarse en pocas horas.
Para el anochecer había comenzado a llover, Charlie las llevó hasta su casa y las ayudó a que se cubrieron con su abrigo.—Bueno... adiós —dijo enfrente de su puerta, ninguno de los dos quería marcharse—. Fue el mejor día, Amy disfrutó demasiado de tu compañía.
—El mío también. —Dio un paso al frente, acortando la distancia entre ellos y rozando levemente sus cuerpos—. ¿Y tú, la pasaste bien conmigo?
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Capítulo de patttyAb, espero te haya gustado. <3Les pido de favor que denuncien a LaPutaDeDrxeory. Con el usuario ya sabrán de qué es, simplemente que una persona estúpida que no sabe que hacer con su pinche vida. Plis, denuncienla.
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Harry Potter » One Shots.
Fanfiction❝Es importante recordar que todos tenemos magia dentro de nosotros.❞ -J.K Rowling.- ➳ Obra originalmente publicada el 30 de Julio del 2016. ➳ Obra terminada el 30 de octubre del 2018.