Capítulo 17

3.2K 388 161
                                    

Will

30 de enero.

Casi un mes y mi rutina era totalmente diferente.

Dipper y yo pasábamos mucho tiempo juntos... fuera de la escuela. Porque dentro de esta volvíamos a lo de antes, apenas me dirigía unas miradas discretas y unas sonrisas en los pasillos o en la hora del almuerzo, pero fuera de eso actuaba como si ni siquiera notará mi existencia.

Eso me traía pensando últimamente.

Eso y el hecho de que San Valentín estaba a la vuelta de la esquina, bueno en realidad faltaban poco más de dos semanas... pero esas semanas podrían irse volando y quería encontrar un regalo adecuado para Dipper. No tenía ni la más mínima idea de qué podría regalarle, no quería darle algo exagerado puesto que llevábamos relativamente poco tiempo "saliendo" (si es que podía decirle así), no quería darle algo empalagoso porque conociéndolo, lo odiaría y algo muy simple se me hacía muy... poco. Quería demostrarle que para mí era importante, pero sin que sea muy cursi o exagerado, ¿eso era siquiera posible?

Este sería mi primer San Valentín en lo que podría llamar una relación porque, hasta el momento no habíamos aclarado que era lo que teníamos exactamente y, tampoco había reunido suficiente valor cómo para preguntarle directamente, de cierto modo estaba algo asustado de su respuesta, no quería escuchar que sólo soy un pasatiempo o algo por el estilo, incluso si nos reuníamos casi todas las tardes, hablábamos, reíamos, estudiábamos y nos besábamos... eso ultimo más que nada, me sonroje ante el recuerdo de nuestras últimas tardes juntos, tapé mi rostro con mis manos, a pesar de que no hubiera nadie más en la habitación para notarlo.

También el pequeño temor de que estuviera avergonzado de mí, eso igual rondaba por mi mente... tal vez por eso no me hablaba en la escuela.

Lo que me tranquilizaba era que sabía que él también tenía sentimientos por mí, no podía decir que de la misma magnitud que los míos, pero algo me decía que los tenía y por ahora eso me bastaba.

Regalo de San Valentín.

En eso tendría que centrar mi atención ahora, porque si me dedicaba a pensar porqué no hablábamos tanto en público como me gustaría, simplemente me deprimiría.

Suspire frustrado, llevaba alrededor de una hora tirado en mi cama pensando en qué podría darle, tomé mi teléfono para checar la hora, 2 de la tarde... tenía un mensaje de Dipper.

Terminé antes mi práctica de esgrima, te veo en tu casa en 15.

Demonios me lo había enviado hace como 20 minutos, me quite mis audífonos y alguien estaba tocando mi puerta.

—Adelante —grité y me senté en la cama.

—El joven Gleeful está afuera, ¿lo hago pasar? —preguntó un empleado en la puerta.

—Claro, dile que bajó en unos minutos —se dio la vuelta para irse, pero lo detuve—, espere... déjalo pasar siempre, a menos que este Bill en la casa, en ese caso primero me avisas, ¿está bien?

—Por supuesto señor Cipher —le sonreí—. Estaré en el estudio de su padre por si me necesita —salió de mi habitación, el estudio quedaba casi del otro lado de la mansión.

Me acomodé un poco la playera y traté de ordenar mi cabello, sin mucho éxito. Salí de mi habitación y bajé las escaleras casi corriendo, ahí estaba él con una de esas sonrisas que me derretían el corazón por completo, maldito Gleeful.

—Hola —dije tímidamente entrando a la sala.

—Hola —respondió con una sonrisa de lado—, tengo el show en una hora así que no contamos con mucho tiempo.

Control |WillxDipperG|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora