Dije - Capítulo 7

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Capítulo 7

Debo estar soñando.

Me encontraba solo en la casa, sola en mi habitación.

Era muy extraño lo que había ocurrido hoy en la casa de Rhea, el obsequio que supuestamente yo le había regalado y ahora esto, la misma melodía que jure haber escuchado provenir de la caja musical cunado ella la abrió; la nota de mi parte.

¿Acaso era una simple coincidencia o solo lo olvide todo?

No soy estúpida-pensé

Y si era una mala jugada de alguien, si solo me estaban tomando el pelo. Me arme de valor y puse mis pies en el sueldo que a estas horas de la noche estaba congelado, me coloque la bata y me dirigí a la puerta, asomando la cabeza por una ranura y observando el obscuro pasillo.

-¿H-Ho-l-la?-genial ahora era tartamuda.

El pasillo se veía intacto, tal vez no tenga visión nocturna, pero pude detectar como una mancha en la obscuridad se movía hacia el final de este. Así que lo seguí.

-Quien esta ahí?! Llamare a la policía!-que tal si era un asesino y si yo era su victima, maravilloso ahora podía localizarme fácilmente. Me detuve y cuando me dispuse en correr como alma en pena hacia mi habitación escuche un estallido. Para el momento en que me gire, no había nada.

Camine despacio hasta el sonido, si quería saber que era tenia que ir hasta allá, aparte los interruptores se encontraban al final del pasillo.

-AGHH!-grite, un dolor punzante es lo que sentí en la palma de mi pie izquierdo. Di un ultimo impulso y llegue hasta donde se encontraban los interruptores. Los moví.

Y se hizo la luz.

Todo en el pasillo parecía normal a excepción del jarrón que se había caído y dejando un desorden con el.

El favorito de mama-fue lo primero que llego.

Mientras me agachaba a recoger los trozos vi el camino de sangre que había dejado y por solo unos momentos se me había olvidado ese incidente. Me vende el pie antes de ponerme a limpiar el desastre y coja regrese para recoger lo demás.

Separe la tierra de los trozos-a quien se le curre poner tierra en un jarrón, ni siquiera hace función de masetero-mientras desplazaba la tierra hacia un cartucho pude sentir una forma solida en el. Lo coloque de nuevo en el piso y me puse a excavar.

Era de metal, al principio pensé que era otro trozo del jarrón que se me había pasado, pero al verlo note que no había similitudes. Era una llave pequeña, que a juzgar por su tamaño debía de ser de algún juguete y en ese momento escuche.

Silencio

El sonido había parado en el momento que recogí la llave.

.

.

.

No puede conciliar bien el sueño después de lo sucedido, a cada rato daba pequeños saltos en mi cama lo que me indicaba que iba a ser una noche sin éxito. Me fije en el reloj que se encontraba en la mesita de noche, 10:23 a.m. . Oí unos pasos fuera de mi habitación y un pequeño bufido después.

-HOLLAND EDVIGE BROUWER-estoy en problemas.

Se que toda persona en el mundo tiene un nombre que lo avergüenza y no soy la excepción, pero peor aun es cuando tus queridísimos padres a parte de un nombre raro viene con uno fuera de este mundo. Año tras año, acaso no les hacen la pregunta ¿Cómo se pronuncia? y si tuviera un dolar por cada vez que lo hacen, seria millonaria.

Era el segundo nombre de mama y aunque no me gustara, sabia que una parte de ella siempre estaría conmigo.

-Si papi?-asome mi cabeza poco a poco por la puerta.

-Te divertiste anoche ¿verdad?

No padre, para nada. Todo lo contrario casi me da un infarto.

-El gato te corto la lengua-su posición me llamo la atención, en el momento que baje la vista pude divisar como tenia la parte del pie roja.

-Juro que lo limpie anoche, muy bien. Mira hasta me corte-le mostré la planta de mi pie que hasta el momento no tenia buen aspecto, pensé que tal ves así sintiera un poco de lastima por mi y dejaría un poco el regaño a un lado.

-Era el de tu madre Holl, por Dios ten mas cuidado la próxima vez. Si sigues así ya no nos quedara ningún recuerdo de ella.

-Por si no te has dado cuenta, ya no nos queda nada de ella-y antes de que el pudiera mencionar una palabra mas cerré la puerta de mi habitación. Me tumbe en mi cama y recordé la pequeña pieza de metal que había hallado anoche. Busque una pequeña cadena que me habían regalado años atrás y que nunca le vi un motivo para usarla, sujete entre mis dedos y pase esa fina cadena por unos de los agujeros de la llave.

Me la coloque y me vi en el espejo. Era como un dije.

Lo que no te mata te hace mas fuerte

La vibración de mi celular inundo la habitación. Rhea era la única que manda palabra por palabra, así estaba segura que se dieran cuenta que alguien les escribía.

-Lista señorita Brouwer

Leí el mensaje una y otra vez, algo tramaba.

-¿Que has hecho ahora?-enviar

Rhea esta escribiendo...

.

.

.

-Asegúrate de no matarlos-me exijo Rhea con suma seriedad.

-Wao, así de mala piensas que soy.

Niñera, eso seria en cuanto mi amiga recibiera la llamada de algún padre que quisiese mis extraordinarios cuidados. Rhea me había comunicado que colgó mi nombre con información de cuidado de niños en los postes de electricidad de la calle, y se aseguro de que me llamaran puesto me dijo "No encuentro ni un poste mas libre del anuncio".

Minutos mas tarde de que me escribiese me llamo emocionada para el gran anuncio de que una madre no muy lejos de aquí la había contactado de ultimo minuto .

-Lista para ganar un poco de dinero-menciono mI pelinegra amiga toda emocionada.

-Que venga con todo




N/A

OLEEEE

QUE PIENSAN, HOLLY HOLL SERA BUENA NIÑERA?

Bueno eso lo veremos la próxima semanaaa!

MUCHAS GRACIAS! ya somos casi 200 lecturass, los adoro chicos

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Ni Mentiras. Ni VerdadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora