Mi primito
Victoria y Riley estaban a unas cuadras de la casa de Riley. Victoria iba muy entretenida hablando con su mamá por teléfono. En ese mismo momento Riley recuerda la primera vez que victoria fue a su casa…
Era una casa maravillosa según la describió Tori la primera vez que la vio. La casa tiene un pequeño jardín con escasas flores por motivo a la temporada. Para entrar a la casa tiene 2 opciones de entrada. Puedes subir unos 15 escalones que te llevan a un pequeño balcón con un pequeño asiento para 2 el cual se puede balancear, a unos pocos pasos del asiento está una gran puerta de madera que te lleva a una espectacular sala que solo se ven en la televisión, luego de esa espectacular sala están las escaleras que te llevan a las habitaciones del segundo piso. Al lado de las escaleras están las puertas que te dirigen a la cocina comedor y al pequeño patio que tiene la casa. La segunda opción de entrada es bajar unos 15 escalones que te dirigen a una puerta de cristal que le da acceso a la mejor parte de la casa, la sala de juegos. Cuando Tori va la primera vez, pregunta porque entramos como los empleados del servicio, Riley abrió la puerta y le enseña porque entran por esta entrada. Era una sala de juegos. Tenía una gran televisión que estaba conectada a varias consolas de juegos. Frente al televisor había un sofá merecedor de su tamaño, era negro y su textura era tan suave como una pluma. Era todo perfecto para los ojos de Tori que estaba en la puerta con la boca abierta. Desde ese momento a Victoria le encanta la casa de su amiga…
Ya frente a la casa de Riley, Victoria se despide de su madre diciéndole que tomara un taxi cuando salga de casa de su amiga.
-Si mami. Bye. Yo también te quiero. Me le das saludo al pequeño de la casa. Chao.
- Ya estamos aquí- Dice Riley sacando las llaves de la puerta de abajo- ¿Estas lista?
- Lista para que? -Contesta Tori mientras Riley hace malabares para abrir la puerta.
-Pues…
-Pollita querida- Riley no pudo terminar bien la frase ante el gran abrazo de bienvenida que le dio su primo- Te extrañe mucho.
-aaayyy! Tanto amor me va a matar.- Dice Riley quejándose.
-Lo siento, es que ha pasado demasiado tiempo sin verte.
-No seas exagerado, solo han sido unas cuantas horas.
-Bueno ya no importa tenemos demasiadas cosas por hacer.
-No tantas, nos pasaremos la noche viendo películas como en los viejos tiempos.
-Porque no un maratón de alguna serie que tanto no gustaban de pequeños.
-No creo que a mi amiga le vayan a gustar. Verdad Tori- Dice mirando a su amiga que parece estar en otro planeta.
Mientras los dos primos hablaban, Victoria estaba observando la anatomía del guapo primo. Para ella era perfecto. Tenía una camiseta blanca que le dejaba a simple vista su musculatura. Tenía unos ojos negros y penetradores que te hipnotizan, unos labios carnosos y una bella sonrisa que enamora a cualquiera. El era mas alto que su prima pero no tan alto que pueda tocar el techo.
Victoria estaba en las nubes hasta que Riley dice su nombre completo.
-Victoria Maria.
-¿Que?- Dice Tori parpadeando varias veces.
-¿Qué si te vas a quedar con la boca abierta toda la tarde en la puerta o quieres entrar y tomar asiento?
Oh no atraparon a Victoria mirando al primito. Sus mejillas tornaron a rojo ante tal comentario de su amiga, pero ella supo como controlar aquella reacción involuntaria.
-Oye Riley, no me vas a presentar a tu “primito”- Dijo Victoria dándole una mirada de complicidad.
-Ohhh! ¿Quieres conocer a MI PRIMO?- Dice dándole una mirada diciéndole: “Ahora lo quieres conocer luego de todo lo malo que dijiste de el.”
-Siiiiiiii - Dice Victoria entre dientes.
Riley vira los ojos y procede- Pues Noah…-No te preocupes Pollita yo lo tomo desde aquí- Dice el caballero interrumpiendo a su prima.- Mucho gusto Victoria. Mi nombre es Noah.- Dice Noah con una gran sonrisa y extendiendo la mano a Victoria.
Victoria también extiende la mano con timidez. Ambos estrechan las manos con una sonrisa en la cara y un brillo intenso en los ojos.
-Un placer conocerte Noah.- Dice Tori con rubor en sus mejillas.
-El placer es mío. - Dice Noah aun con su sonrisa en la cara.
Todo en su alrededor desaparece. Se han olvidado de que Riley está al lado de ellos.
Mientras que esos dos entrar en conversación entran a la casa y se olvidan que aquella chica que estuvo a punto de presentarlo.
Riley entra a la casa con una gran O en su boca viendo como la dejaron fuera de la conversación.
-Ya me tocará hacer de tercera rueda.
**********
Nota de la autora.
¿Ha ustedes le ha tocado ser la tercera rueda?
Es una situación muy incómoda no?Arriba está una foto de la casa de Riley
Espero que le haya gusta la historia. Esta es mi primera historia en wattpad. Le he puesto mucho amor y dedicación que la disfruten. Besos y abrazos.
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Entre las nubes y las estrellas
Teen FictionNunca has tenido ese día dónde tus audífonos paran de funcionar. Bueno ya pueden imaginar lo malo que es cuando tienes que ir en el metro sin poder oír tu canción favorita. Así iba el día Victoria hasta que la canción cheerleader comenzó a sonar. Er...