Dos; cuando este molesta, sonríe.
•Joseph•
Bueno, después de la primera caminata, vinieron muchas más. Era cierto lo que ella me decía, esos pequeños detalles eran los que marcaban y enamoraban a una mujer. A Víctor tampoco le estaba yendo mal con Luna, ellos también habían comenzado con pequeñas citas que consistían en caminatas, picnics, ver el atardecer. Era como volver a nuestras épocas en la universidad, cuando vivíamos libres, enamorados, y no es que no este enamorado, es solo que conforme uno va creciendo se obtienen mas responsabilidades, y a veces, debemos tener claras nuestras prioridades, incluso si sacrificamos algunas cosas.
Y si, no se equivocan. Yo decidí sacrificar un poco mi relación con Krystal, pero... Es que, yo pensé, que... ¡Argh! No se ni en que pensaba cuando decidí que primero era mi trabajo. Supongo que al ver que me iba bien, y que podía darle a Krystal todo lo que ella quería, creí que eso la tendría feliz. Pero como buen fail que soy, pues... Me equivoque.
Arriesgue una relación con la persona mas... Con la mejor persona del mundo por cosas materiales.
Es por eso que Krystal tomo la decisión de hacerme ese... Uhmm... Castigo.
Y bueno, como dije antes, las caminatas fueron frecuentes. A veces Víctor y Luna nos acompañaba. En otras ocasiones, cenábamos en algún restaurante. Era como volver a empezar.
Me sentía enamorado, de nuevo.
Pero, no todo es color rosa. Y eso lo descubrí el día que me informaron que debía viajar a Inglaterra, debía intentar cerrar un contrato de publicidad.
Yo era bueno en mi trabajo, pero todos saben que los ingleses, o por lo menos los de esa empresa, eran un hueso duro de roer.
Aunque, lo que más en preocupaba era la reacción de mi pequeña Krystal. Ella creería que todo lo hice justo por eso, porque me iba. Tenia que pensar las cosas, debía encontrar las palabras para decirle que saldría de viaje.
Se que podría sonar tonto, incluso yo llegue a creerlo, se que Krysta se enoja cada que viajo. Antes no lo entendía, pero ahora se que nones enojo es mas bien dolor. Me quieres, no, me ama y le duele separarse de mi.
Aquella noche tuvimos nuestra pequeña mini-cita diaria. La lleve a un pequeño restaurante al que me gustaba ir con Víctor. Era un lugar cálido, familiar. En ese lugar, le diría la gran noticia. Bueno, ya saben.
—Joseph, esta cita ha estado esplendida. Te has lucido.
—Gracias, princesa.
De un tiempo a acá, he optado por decirle princesa, ella luce feliz al oirlo.
—¿Que sucede, Jos?
—Krys, yo... Uhmm... Inglaterra debo viaja negocios.
—¿Qué? (Khá?) No te entiendo.
—Krys, yo se que odias esto....
—Si, ya sabia que no podía ser tan perfecto todo. Eres un...
Bueno, ella me insultó por diez, quince o veinte minutos. En otras circunstancias, tal vez hubiera explotado, le hubiese gritado y tal vez me hubiera ido. Si, era una dona si glass, era un desglasseado (desgraciado). Ok no, pero si era poco paciente.
Cuando vi que había terminado de insultarme, cogí sus manos y le sonreí. La mire fijamente y vi sus ojos cristalinos. Ella quería llorar, no se si por enojo o tristeza.
—Cariño, se que no te gusta que vaya de viaje. Sin embargo, es parte de mi trabajo, por lo tanto es necesario.
—Tú no sabes nada, eres un idiota.
—Vale, cariño, te propongo dos cosas. Uno, puedes acompañarme a este viaje, seria lindo que fuéramos a Inglaterra juntos, pero la mayoría del tiempo estaría atendiendo asuntos de la empresa —Krystal negó ante la idea —; o puedes quedarte aquí, y cuando regrese, planeamos un viaje para mis siguientes vacaciones. Iremos a donde quieras y haremos lo que quieras.
Krystal pareció pensarlo un poco, y después de varios minutos decidió hablar.
—Aunque seria lindo ir a Inglaterra, no quiero verte trabajar todo el tiempo que estemos allá. Supongo que puedo esperar uno o dos meses para tu siguientes vacaciones y elegir todo, complacerme... Complacerte...
¿Eso fue doble sentido? Juro que ella va a matare. De haber sabido, comenzaba todo eso desde antes... ¡Mierda! Soné muy idiota.
Pero, ella jamas había insinuado ese tipo de cosas, normalmente soy yo quien suplica por eso.
Después de la cena, regresamos caminando a su apartamento, y allí, ella se despidió de mi como si fuera la ultima vez que nos veríamos.
—¿Cuando te vas, Jos?
—En dos dias.
—Promete que no te olvidarás de que tienes una novia en Estados Unidos.
—Jamas, princesa.
—Está bien, trabaja duro para esta princesa.
Ella volvía hablar en doble sentido, ¿cierto? No lo se, pero me encantaba esta nueva etapa con mi Krystal.
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[Mini-Fic] Lo que una chica quiere || Kryber || Amber × Krystal
Fanfiction«No juzgues un libro por su portada». «Amar es compartir (tambien votar y comentar 😂😂)». Gracias por darle una oportunidad a esta historia, espero la disfrutes. La presentacion y datos de la historia se encuentran dentro de la obra. Gracias. -체...