Cap 6: Confusiones

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Pov. Damien

Desde el beso en el hospital Kei no me ha vuelto a dirigir la palabra en la escuela y nisiquiera en la casa me da la mirada.

Siento que soy la peor persona del mundo, yo mismo la he cagado.

Me levanté de mi cama y salí del cuarto, bajé las escaleras y vi a Kei mirando la televisión en la sala.

Voltio a verme pero no dijo nada, se acercó y sin emitir sonido comenzo a subir las escaleras. Ya no aguanto esto.

La agarro del brazo y la llevo a su habitación, sin importarme sus gritos y golpes, los que por cierto, no dolían.

-¡Sueltame, no quiero ir contigo animal, sueltame joder!- la tire a la cama y cerré la puerta. Debo controlarme o si no la lastimare más.

Se acercó a paso furioso y frunciendo el ceño trato de abrir la puerta. Me puse en medio para que no saliera.

-¡Abre la maldita puerta!- me ordena pero no lo haré.

-No hasta que hablemos- me cruzo de brazos y me apoyo en la puerta. Debo ser firme pero no tanto.

-¡No hay nada de que hablar Damien!- seguía gritando e intentado no tener contacto visual.

-¿¡Entonces porque me ignoras!?- le reprocho.

-¡No lo hago!- contradice- sólo... ¡No lo se!- se lleva las manos a la cabeza y cae de rodillas- no lo se- susurra.

Pov. Kei

Dios, ¿que pasa?. ¿porque siento esto?. No lo debo de sentir, siempre he sido segura de mi misma pero ahora en este momento, no se que pasa. Me siento... debil.

Me quito las gafas ya que varias lágrimas habían caído en ella. No lloro por lo que hizo y no estoy molesta con el, lo estoy... conmigo.

-Damien no quiero hacerle daño a ninguno de los dos, pero no se, no sabes que se siente estar impotente, *snif* *snif* pero la verdad, no estoy molesta contigo... sino conmigo- me llevo las manos a mi cara y me derrumbo. Crei que tener las respuesta a todo, pero no es así.

-Kei- sentí sus manos acariciar mi cabeza seguido me abraza- se que se siente, yo igual lo estoy, pero no debes culparte de nada, yo fui quien te alejo- la sinceridad fue reflejada en esas palabras aunque no ayudaba mucho.

-Damien, se que tratas de arreglar las cosas pero ya lo dije no estoy molesta - lo miro- sólo... confundida mas que nada.

-Quizas pueda aclararte las cosas- no entendí a lo que se refería pero cuando sentí sus labios sobre los mios me di cuenta de sus intenciones.

Eran suaves y dulces como un algodón de azúcar que nunca te empalaga.

Involuntariamente lleve mis brazos a su cuello. No se que me pasaba. Sentía una descarga de adrenalina pasar por todo mi cuerpo, como me pasó con Matt, pero esta era mas fuerte.

El aire comenzó a faltar así que me separé un poco sin abrir los ojos, pocos segundos después me volvió a besar.

Esto está mal.

Me aleje de el y me levanto de golpe, "¡Reacciona, estas cometiendo un erro!" .Me llevo las manos a la boca pensando en lo que acabo de hacer.

-D-damien- susurro su nombre, no sabía que decir todo esto es muy confuso. Salgo de la habitación pero sentí como el me agarraba la mano, deteniendome.

-Kei- no quise voltear a verlo no puedo hacerlo.

-Dejame- me suelto de su agarre y lo miro con horror- Damien esto es un error - agacho la cabeza- no podemos seguir así.

-Kei por favor- me suplica. Su mirada reflejaba desesperación y tristeza. Me mordí el labio inferior y camino a la puerta- ¡Kei yo te amo!- al oír eso mis ojos se humedecieron, lo peor mi mano estaba a sólo pocos centímetros de la puerta. No, esto no puede ser amor, no puedo.

-Lo siento Damien, perdon- salgo de la casa sin decir una palabra. Yo tampoco sé si lo amo o no, pero esa descarga de adrenalina me dice algo, pero, ¿que es?

Camino al parque y me siento una banca. Mis ojos ardían de tanto llorar pero era inevitable. Me lleve las manos a la cabeza en signo de desesperación.

-¡Joder!- grito sin importar que alguien me oiga.

Sollozaba y a la ves algo muy dentro de mi me decía que cometí un error, sentí una opresión en el pecho.

-Damien...

Pov. Damien

No puede ser, trato de arreglar uno de mis tantos errores y vuelvo y meto la pata. Cuando ella salió de la casa todo quedó en silencio.

Me recoste contra la pared y me deje caer. Joder, ¿que hice?. Decirle que la amo. Bravo Damien ganaste un oscar.

Suspiro.

Sinceramente no se que paso, esas palabras brotaron de lo mas profundo de mi corazón y se lo que siento, ya no tengo dudas.

La amo, su sonrisa, su forma de ser, todo de ella es lo único que quiero.

Siempre trate de enamorarme de una chica pero nunca pude, incluso llegué a salir con un chico pero no funcionó, ninguno tenía las cuales necesarias. Las que... tiene Kei.

-¡AAAHHH!- golpe la pared sintiendo impotencia. Tenía ganas de buscarla pero sabía que sólo lo arruinaría más.

-Kei...

Solo un sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora