Solo un sueño

Cap 8: Sentimiento encontrados

Antes del cap, quiero aclarar q la Universidad de Damien y el Instituto de kei están juntos, osea dos en uno.

Okey todo claro? Bno vamos con el cap (/°^°)/

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Pov. Kei

Me levanté de la cama con mucha flojera y aparte un dolor de espalda impresionante. ¿Que horas son?

Salgo del cuarto y bajo las escaleras mientras me acaricio la espalda. Valla si que duele.

Vi a mamá hablar por teléfono que sólo Dios sabe con quién, parecía preocupada y un poco tensa. Extraño.

Entre a la cocina y muerdo la primera manzana que vi en el mesón, le eche un vistazo al reloj y eran las 6:30. Espera ¿y Damien?

Deje la manzana de lado y me acerco a mi madre la cual estaba sentada en el sofá de la sala con la mirada baja.

-Mamá - la llamo- ¿donde está Damien?

-Hija, el esta en la universidad, va a llegar tarde porque tiene que hacer un proyecto con unos compañeros.

-Mmm... vale-dijo no muy convencida. Por alguna razón tenía un mal presentimiento, mamá decía que era como una conexión de hermanos.

Subí las escaleras y me volví a encerrar en mi alcoba, camino a mi cama pero sin querer me caí gracias a un objeto sobresaliendo del closet.

Me levanto y agarró el objeto para saber qué era.

-Dios -susurro impresionada.

Era el piano que mi hermano me había regalado a los 13 años, en ese tiempo me encantaba tocar cualquier clase de instrumento, pero el que nunca tuve hasta el día de mi cumple fue un piano, recuerdo perfectamente cuando me lo dio.

*Flash Back*

-Haber cierra los ojos.

-¿Para que mano?- pregunto a Damien un poco confundida.

Estaba en su cuarto ya que tenía una sorpresa para mi.

-Solo haslo enana - me regaña.

-Bien, pero espero que valga la pena haberse despertado a las 4 de la madrugada - respondo y hago caso a su petición.

-Si si si lo que digas necia.

Pasaron pocos segundos y puse sentir un gran peso sobre mis brazos.

-Ya abre los ojos- lo hice y ¡Dios santo!

-Un piano- susurro viendo el hermoso instrumento negro con un moño rosado- ¡gracias!- me abalanzó sobre el dándole un abrazo de oso.

-De nada pequeña - me da un beso en la mejilla- feliz cumple.

*Fin*

Valla recuerdos. Paso mi mano suavemente retirando el polvo. ¿será que aún funciona?

Me acomodo en el suelo y presiono suavemente una tecla seguido oi un pequeño *ti* por parte del piano.

Eso me recordó la primera ves que lo toque con Damien, ese día fui aprendiendo tonada por tonada pero había una en especial que encantaba.

Mis dedos presionaron suavemente cada tecla proporcionando un hermoso sonido.

Sonrei.

Aún tengo el toque.

En ese instante la imagen de Damien vino a mi mente, no se porque pero sentí una fuerte nostalgia.