Capítulo 3.
La extraña elección de palabras que Clara utilizo para el juramento no me llamo la atención hasta muchos años después, ella no dijo "nunca juegues con el corazón de una mujer" ella dijo "niña".
El resto de la secundaria fue de lo mas normal. Después del beso con Clara la gente comenzó a verme diferente ya no como un niño de catorce años sino como un posible prospecto para un buen polvo. ¿Como llegaron a la conclusión que yo no era virgen?, sinceramente no se, no metería mis manos al fuego pero estaba casi seguro que Clara y sus "Modificaciones de la realidad para crear un mundo mejor" como ella decía para no usar la palabra mentira tenían algo que ver. Poco después descubrí que mis sospechas eran reales al escuchar los chismes de unas niñas mocosas que se creían las muy adolescentes rebeldes.
Al enterarme que Clara era la que había corrido el rumor, esa vez no se salvo de escuchar mi repertorio de: En que jodidos estabas pensando! Ahora no solo tenia que soportar las preguntas de: ¿Tus padres te abandonaron? ¿Es verdad que tu papá era un traficante de drogas y que murió asesinado en la frontera de Colombia? Sino que también un montón de preguntas mas incoherentes que la de si mi papá era traficante, ¿Tu y Clara son novios? ¿es verdad que tu eres sumiso de Clara? ¿Clara te violo? -Como podía tener la mente tan perdida y llena de porquería como para pensar algo así de Clara y de mi?!??,
A pesar de los absurdos chismes y preguntas raras sobre mi pasado... mi vida iba bien. Hasta que llego el tiempo de comprobar si los chismes eran verdaderos o falsos, cuando me toco experimentar en propia carne el tan aclamado y famoso sexo.
Tratare de ser lo mas breve posible con esta historia pero he de decir que ese día cambio mi vida:
Era un viernes por la tarde y con mis compañeros del orfanato habíamos estado planificando una fuga desde que nos habíamos enterado de la fiesta de Benjamin -posiblemente el ser humano más feo que e visto en mi vida, no solo física sino internamente, pero con dinero suficiente para comprar todo un estadio de fútbol y llenarlo de papitas fritas- la fiesta prometía ser la mejor de todo el año. En nuestro orfanato teníamos ciertas libertades que en cualquier otro hospicio habrían sido impensables, ya que eramos pocos los huérfanos se nos permitía ir casa de algún amigo a hacer la tarea o algún trabajo obviamente con una nota solicitando permiso desde 3 días antes. Pero desde luego aunque enviaramos la nota 3 meses antes nunca nos iban a dar permiso para ir a aquella fiesta por lo que creamos un ingenioso plan que consistía en fugarnos y como sabíamos lo poco probable que era lograr regresar al orfanato después de la fiesta sin que nos descubrieran íbamos consientes a lo que nos ateniamos si íbamos porque obviamente nos descubrirían y castigarían con un mes sin ningún permiso y trabajos comunitarios dentro del orfanato pero valía la pena.
El viernes por la mañana me levante como un día normal con la excepción de que hoy en vez de regresar después de la escuela al orfanato me iría a casa de Klaus a "prepara un proyecto" y luego a la fiesta. Todos habíamos tenido que poner escusas diferentes y como no todos podíamos pedir permiso para salir el mismo día porque seria demasiado obvio algunos se quedarían fingiendo estar enfermos para no tener que ir a la escuela y luego fugarse por la noche. Así que sabiendo que me tendría que ir vestido para ir a la fiesta me vestí con mis mejores pantalones y una camisa nuevas que había ido a comprar con Clara con el dinero que mi abuelo me enviaba mensualmente. Me peine estirando mi pelo hacia arriba y luego guiándolo hacia la izquierda, la verdad eso no me preocupaba sabia que al llegar alguna de las chicas me diría que lo he hecho fatal y lo arreglarían por mi.
La casa de Benjamin estaba tupida de gente. Clara había ido con su nuevo "novio" y quedamos de juntarnos en la fiesta. Emily no había logrado escaparse para venir y a Marie a pesar de las insistencias de todos no logramos convencerla a que viniera. Para entrar en ambiente comenzamos a beber algunos tragos y a jugar juegos en que las penitencias al que pedía eran no aptas para menores de 18 años. Ya con unos cuantos tragos enzima, la adrenalina al tope por la fuga y la euforia de la fiesta fue cuando vi a Nataly, tal vez fue el alcohol y las hormonas alborotadas las causantes de lo que paso después. Empezamos a bailar y luego empezamos con esos juegos de: que si te toco el trasero que pasa, que si te estujo la teta, que si te toco el paquete, que si te beso por aquí. Al final terminamos en la lavandería de la casa de Benjamin haciendo cosas de las que ahora me río pero en su momento me apenaron mucho, como mi inseguridad, la cara que debí haber puesto cuando me toco, o que temblaba como anciano con Parkinson y de como Nat soltaba risitas al ver que de verdad no sabia que hacer a pesar de todo el pre-sexo de entrenamiento que recibí de Clara, ¡Dios estaba Tan Excitado!. Para mi suerte Nat no era virgen y me fue guiando paso a paso con mucha paciencia. Al final fui tomando ritmo, aprendo rápido, y según lo que ella contó del lunes siguiente en el colegio, estuvo bastante bien uuufff una carga menos sobre mis hombros, pase todo el fin de semana con la duda carcomiendo mi cerebro. No lo hice mal para haber sido mi primera vez, eso ayudo mucho con mi autoestima.
Después de la "Mejor fiesta del año" el castigo no fue tan terrible, yo creo que la directora del orfanato Frau Laing, nos castigo solo para dar un ejemplo a los demás niños de que cualquier desobediencia seria penalizada. Ella siempre había estado enterada de nuestro plan, creo que quería que viviéramos la experiencia.
La Sra. Laing también había sido huérfana así que era una señora muy comprensiva y mimadora pero también muy disciplinada.
La holgazanería era su veneno, siempre nos mantenía ocupados. Ella tenia un la idea de que mientras mas ocupados estuviéramos menos mediocridades pensaríamos . Así que gracias a las generosas donaciones de las familias de los huérfanos y exalumnos del orfanato, teníamos fondos suficientes para pagar maestros privados para clases extracurriculares.
Así fue como aprendí a tocar el violín.
A los 10 años yo ya podía leer partituras y tocaba casi cualquier pieza con facilidad, a los 14 años yo ya estaba a la altura de Vivaldi, según yo. También había recibido clases de chelo y piano, Frau Laing creía que era alguna clase de prodigio musical, pero al final lo maestros se dieron por vencidos al ver que mi talento realmente era únicamente para el violín.****
Los Meses fueron pasando,todo iba bien, me había convertido en un chico popular con un pasado misterioso, deportista, musico y muy Sexy, el chico ideal. Pero yo no me conformaba nunca lo hacia. Trataba de ser el mejor humano posible, era el mejor de la clase, en casi todas excepto en las numéricas, las matemáticas eran mi punto débil. Escondía mi inseguridad bajo todos esos datos inteligentes. Pero no importaba que tanto me esforzara siempre seguiría siendo yo. Yo era una persona molesta y ridícula, esa era idea que tenia de mi mismo, me molestaba mi personalidad, yo simplemente no me agradaba. Una vez leí en un afiche colgado en la pared de un callejón que decía "Tratar de cambiar a alguien es como tratar de Perfumar caca" simplemente no se puede.
Creo que todos lo huérfanos crecemos de alguna manera con esa inseguridad, el simple hecho de vivir sin tus padre marca a una persona. A veces la gente pregunta ¿Qué se siente haber sido huérfano, eso te afecto en la vida? Y siembre la mayoría respondemos -No, no lo hizo- pero mienten obviamente afecta.
Cuando empecé a ir al psicólogos de la prisión el siempre estaba preguntando sobre mi infancia. El creía que el hecha de ser huérfano fue uno de los factores que hizo que me convirtiera en un "Enfermo".
Yo no soy un enfermo lo juro.
No parecía estar mal, nadie lo veía mal, no realmente. Yo solo le quería. Pero tampoco era algo similar al incesto porque yo jamas la vi como a una hija o a una hermana. Mas bien yo la veía como un chico de 13 años ve a su novia.
Me gustaba lo admito.
Me gustaba tomarle la mano, ir a caminar, ver la Tv mientras comíamos palomitas, peinarla, hacer rompecabezas juntos, escucharla susurrar mi nombre entre jadeos.
Recordarla alivia mis miedos, me tranquiliza. Su nombre me da paz, me hace sentir fuerte, todos los doctores trataron cien tratamientos extraños para hacerme olvidarla, robármela borrando su recuerdo. Pero me aferre a ella y no pienso soltarla aun, quizá nunca.
ESTÁS LEYENDO
Hannes Böttler, Autobiografia de un abusador
Teen FictionUna de las terapias en la cárcel consta de escribir una autobiografía, y tratando de hacerla lo mejor posible, asi empiezo mi historia... Mi nombre es Hannes Böttler tengo 36 años, naci un 7 de Julio en Viena, Austria. Estudie Publicidad en la univ...