Capítulo 1.

29 2 9
                                    

El día estaba bastante nublado, no había llovido pero tenía toda la pinta de que no tardaría mucho. Mi madre y yo estábamos en el aeropuerto esperando a que anunciasen mi vuelo, el cual no debería tardar mucho. En cierto modo, estaba nerviosa, no volvería a Kentucky en un tiempo bastante incierto y tenía muchas ganas de empezar de cero en una ciudad nueva, de la que había escuchado maravillas y tenía muchas ganas de recorrer hasta el último rincón.

A penas eran las diez de la mañana, y ya me había tomado tres tilas y dos valerianas, pero seguía igual o más nerviosa, cosa que mi madre no entendía. Había montado más veces en avión, y tampoco era la primera vez que me iba a otro país sola, pero me comían los nervios por dentro. Estábamos sentadas en unos bancos mientras esperábamos, y mis piernas eran un par de gelatinas. No podía parar de moverlas de un lado a otro, conseguí poner nerviosa a mi madre también. Cuando parecía que mi madre iba a perder los nervios, gracias a mi, anunciaron mi vuelo, por lo que me levante rápido y mi madre soltó un suspiro. Ambas nos encaminamos hacia la puerta de embarque, en la que ya había gente esperando. Miré a mi madre, que me miraba con orgullo mientras retenía las lágrimas, y me acerqué a darla un abrazo muy fuerte que no sabía cuando volvería a repetir. Evite llorar mientras nos abrazábamos, y una vez separadas, la di una última mirada y me dirigí hacia la puerta de embarque. Londres me esperaba.

El vuelo se me hizo un poco pesado. A pesar de ser directo, esas 13 horas en el avión las pase bastante mal, seguía bastante nerviosa y aunque había conseguido dormirme unas horas, seguía bastante inquieta. Mi cabeza no paraba de dar vueltas a como sería todo, y si todo sería tan bonito como me había dicho Matt. Estaba por bajar del avión cuando me pasó la cosa más surrealista que me podía haber pasado en todo este tiempo, una niña de no más de 13 años, me estaba mirando atentamente. No sabía muy bien porque, por lo que decidí ignorarla, pero la niña me seguía mirando. Miré hacia otro lado algo incomoda, y cuando pensé que por fin la niña se había ido, escuche mi nombre. Miré de nuevo donde hacía unos segundos estaba la niña, y me la encontré a mi lado.

-Eres Bee ¿verdad? –preguntó con algo de timidez. La miré de arriba a abajo antes de responderla. Era una niña rubia, un par de centímetros más baja que yo, que me miraba atentamente con sus ojos de color gris. No entendía como se sabía mi nombre, pero en cuanto me fije en su camiseta, supe la respuesta.

-Sí, esa soy yo – sonreí a la niña con amabilidad. La niña ante mi respuesta también sonrió, aunque parecía bastante nerviosa, no paraba de tocarse el brazo una y otra vez.

-¿Te harías una foto conmigo, por favor?- preguntó algo nerviosa.

-Claro – la sonreí a la niña – pero mejor abajo – la respondí, a lo que ella asintió rápidamente.

Una vez fuera del avión nos hicimos la foto, y después me dio un pequeño abrazo dándome las gracias.

-¿Ahora tienes fans? – preguntó una voz burlona detrás de mi. Me giré inmediatamente sabiendo quien era y le abracé fuerte.

-Eres idiota, Matthew – le respondí a su estúpida pregunta sin dejar de sonreír. Matt soltó una carcajada ronca y me abrazó fuerte.

-Ya te echaba de menos malhumorada –volvió a decir de forma burlona. Negué con la cabeza y me separé de él para mirarle atentamente. Iba más abrigado de lo que pensaba, llevaba una especie de cazadora militar e incluso un gorrito. Ante mi falta de respuesta volvió a hablar -¿qué ocurre?

-Nada, solo que no pensaba que iba a necesitar esto –dije empezando a sacar la cazadora de la maleta de mano. Matt negó con la cabeza con diversión en la mirada.

-Pues lo vas a necesitar, y mucho. –respondió. Giré los ojos mientras se me escapaba una sonrisa, y fuimos a por mis maletas. – Y bien, ¿me vas a contar que fue eso? – preguntó refiriéndose a lo ocurrido con la niña.

Story Of Another Us. [2ª Temporada MLP]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora