Diez; Can't help falling in love.

1.9K 137 37
                                    

—¿Dónde está mi teléfono?—le pregunto con rapidez.

—Los escondí—se tiró en la cama y me miró desde ahí—puedes buscar en toda la habitación y no los encontrarás.

—Camila... ¿Por qué demonios me has traído aquí?—le pregunto enojada.

—Quiero que te relajes—murmura con los ojos cerrados—que pasemos un tiempo a solas, como si fuéramos pareja—me quedo perpleja por lo que dice, abro la boca sin saber qué decirle.

—¿Qué?—es lo único que sale de mi boca.

—Que quiero que te relajes—me dice.

—No. Lo otro.

—¿Qué cosa?—me pregunta con inocencia mientras me mira desde la cama.

Me resigno y camino hasta la cama, con tranquilidad me siento y unos segundos después tengo a Camila detrás de mí. Me abraza por detrás mientras me deja su barbilla en mi hombro.

—¿Estás dispuesta a olvidar todo y fingir conmigo?—me dice al oído y yo cierro los ojos con lentitud.

Quisiera fingir todo esto que siento por ella, pero está más que claro que no puedo evitar estar enamorada de ella. Me lastima todo lo que hace, pero sigo ahí porque me gusta.

En realidad ya ni siquiera ese término es válido, porque sé que estoy tan jodida por el hecho de que la amo. Mierda, la amo y sé que no voy a salir ilesa después de todo esto.

—Lo siento, pero no estoy dispuesta a fingir—porque cuando se trata de ella, yo no puedo fingir.

***

—¡Camila!—toco la puerta del baño—¿Cuándo tiempo llevas ahí metida? También quiero bañarme.

—¿Qué te detiene a entrar?—me grita desde el interior y yo sonrío por lo que me dice.

—Apúrate Cabello—le gruño a modo de juego mientras camino hasta la cama.

Había pasado apenas un día desde que la pequeña psicópata me había secuestrado, y en solo ese lapso de tiempo había descubierto muchas cosas.

Primero, que mi teléfono se encuentra en un peluche de banana que lleva siempre con ella y que era mentira que estábamos en México. Estábamos en Miami.

Lo último que Camila había publicado era una frase un tanto curiosa que me había hecho reír. "No soy una psicópata" con una foto de ella con mi camisa.

Probablemente tendría problemas, pero estaba dispuesta a todo. Y solo por ella.

Cuando estoy distraída, sentada en la cama. Siento los brazos de Camila rodear mi cuello en un abrazo, su aroma es tan delicioso que me hipnotiza una vez más.

—Tengo que bañarme—le murmuro cuando no me suelta—¿Hoy saldremos?—le pregunto cuando me doy cuenta de que no me va a soltar.

—Uhm... No—escucho una pequeña y delicada risa—te quiero solo para mí.

Alejo sus brazos de mi cuello y me levanto de la cama, siento su mirada seguirme pero no le tomo importancia.

Girls Like U (Camila Cabello y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora