CAPÍTULO 12

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Un bebé, un precioso bebé de piel blanca y suave como la suya. "Xiumin" pensó de repente, mientras todo se tornaba negro.

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-¡Papá!.-llamó el pequeño niño mientras corría hacia su progenitor.

-¡Xiumin!-Exclamó Kyuhyun contento, cargando a su bebé de cabellos castaños y acariciando su cabecita.-¿Cómo está el hombrecito más hermoso de este mundo?.- le preguntó suavemente al pequeño.

-¡Muy bien!, Papi me ha llevado al pueblo, ha sido muy divertido y hemos conocido a un hombre muy amable.-Dijo el niño orgulloso.

-¿En donde esta tu papi?.-Y como una invocación apareció Sungmin, hermoso y radiante como siempre, caminando hacia él por el gran jardín del castillo.
Kyuhyun quedó embobado por la belleza de su esposo, no importaba cuantos años pasaran, seguía amando y deseando a Sungmin como el primer día.

Aun recordaba el primer día que había visto a esa gran belleza, nunca se arrepentiría de haber acompañado a Nari al pueblo en aquella ocasión. Caminaba junto a la señora cuando lo vio. Su cabellera rubia era lo que más había llamado su atención, era brillante, bien peinada y se veía suave, muy suave, la imagino revuelta sobre sus almohadas blancas. Sus labios acorazonados y rellenos se veían muy apetitosos, tanto, que, podría besar toda la vida solo a esos labios tan hermosos si así se le permitiese. Su estatura pequeña lo había cautivado, era tan delicado, daban ganas de protegerlo contra todo, aunque era poco probable que alguien en su sano juicio quisiera lastimar a a aquella criatura hermosa.

Desde ese día Kyuhyun iba al pueblo todo el tiempo, a pesar de las protestas de sus padres, ya que, según ellos, no era bueno mezclarse tanto con los pueblerinos.

Y lo veía, lo veía y lo amaba secretamente, aunque no sabia su nombre, sabía lo que le gustaba, casi todos los días compraba rosas rojas, se veían hermosas con él, también compraba fresas y muchísimas frutas, pero siempre compraba fresas extra, al parecer las amaba.

Un día decidió acercarse a él, compro todas las rosas rojas del pequeño puesto y más de 10 kilos de fresas, y así, le habló.

-Hola.-Le dijo muy nervioso, pues él chico era tan pequeño que se sentía bruto y demasiado grande a su lado.

-Oh, Hola.- Le respondió él joven de cabellos dorados con las mejillas sonrosadas.

-Me llamo Kyuhyun y...-No sabia como darle los íntimos obsequios, pues tal vez le parecería un acosador y no quería que se asustara.-Yo...vi que te gustaban las rosas, así que, ten.-Le dijo mientras le daba más de 5 canastillas de rosas rojas, al ver que el joven se limitaba a sonrojarse y mover sus dedos nerviosamente, decidió darle también las fresas.-Y te he traído fresas, puede que sea demasiado, pero he visto que te gustan mucho.-Le dio el gran costal.

-Muchas gracias.-Dijo muy sorprendido y un poco asustado, pero algo le decía que ese hombre no le haría daño nunca.-soy...Sungmin.-Dijo el pequeño riendo bajito, viendo los ojos chocolate del gran hombre, eran hermosos, te podías perder en ellos.-No se a que se deben tus obsequios, pero igual te lo agradezco.-Dijo Sungmin regalandole una hermosa sonrisa.

-¿Quieres...quieres ir a caminar por el pueblo junto a mi?.-Dijo sonrojado Kyuhyun.

-Por supuesto.- Susurró, y lo demás fue historia.

Regresando al presente tomó a su esposo de la cintura, le dio un tierno beso en los labios, derritiendo de dulzura a Sungmin.

-¿Quién es el hombre al que han conocido hoy, mi niño?.-Le preguntó Kyuhyun con suavidad.

-Oh, veo que Xiumin no ha perdido tiempo.-Dijo Sungmin riendo dulcemente.- Ha sido un viejo vendedor del pueblo, nos ha regalado unas hermosas rosas rojas.-Le guiño el ojo picaramente.

-Mmm, pues eso de "viejo" me tranquiliza.-Kyuhyun besó su frente.

-Tú siempre tan posesivo.-Dijo Sungmin haciendo un puchero.

-Se que te encanta.-le susurró al oído, haciendo que Sungmin se estremeciera y riera suavemente.

-Parece que alguien se ha aburrido de nosotros.-Dijo Kyuhyun al darse cuenta que Xiumin había quedado profundamente dormido.

-Vamos adentro para que este pequeño príncipe duerma bien.-Sugirió divertido Sungmin.

-Vale, vamos.-Susurró Kyuhyun besando sus labios, caminando hacia él castillo.

Continuará...

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Algo cortito, pero con mucho amors!!! No se confundan, esto es solo como un flash back, para que entiendan lo que paso antes del infierno de Min v:

Espero sus estrellitas y comentarios ;-;

Gracias por leer!!


OBSESIÓN  [KYUMIN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora